Sin un pueblo sano no hay progreso
Luis Muñoz martes 28, Jun 2016Segunda vuelta
Luis Muñoz
En México, cualquier otro sector podría “resistir” un nuevo recorte a su presupuesto, pero no el de salud. ¿Por qué?
Para empezar, el país necesita invertir más en servicios de salud en áreas poco atendidas hasta ahora.
Se debe cubrir más adecuadamente el gasto “catastrófico”, a fin de mejorar la protección económica de los pacientes.
Sabido es que, con frecuencia, como observa la OCDE: “una salud precaria conlleva a un empobrecimiento económico”.
Es menester subrayar que la salud es la base del bienestar social.
Y no hay mayor determinante de la capacidad de progreso de una nación que el estado de salud de su pueblo. Por tanto, cabe preguntar si el sector salud resistiría otro ajuste presupuestal.
El presidente de la Comisión de Gobierno en la Asamblea Legislativa, advierte que en lo que se refiere a la Ciudad de México ya tuvo un recorte al gasto de salud por 270 millones de pesos y uno más significaría un grave deterioro en la calidad de los servicios.
Ante el anuncio de un nuevo ajuste al gasto público de 2016, el legislador pidió a las autoridades federales reconsiderar el recorte presupuestal en el rubro de salud…
Estimó que el impacto de los recortes al gasto público por parte del gobierno federal ha sido de tal magnitud que hay afectaciones en programas de salud, principalmente en el seguro popular, en acciones preventivas y abasto de medicamentos en esta capital.
Entonces, tenemos que recordar lo que dice la OCDE:
Qué no hay mayor determinante de la capacidad de progreso de una nación que el estado de salud de su pueblo. Dicho de otro modo. Un pueblo enfermo estará diezmado para generar con su trabajo el bienestar de su familia y, por ende, del país.
Tan solo en la Ciudad de México, el “recorte” impediría además la contratación de personal suficiente para atender las distintas instalaciones hospitalarias, como las clínicas del Metro, Clínica Especializada Condesa VIH/SIDA y de Odontogeriatría de Iztapalapa, entre otras.
Por tanto, en este quinto ajuste presupuestal, que el asambleísta atribuye a que Reino Unido votó para salir de la Unión Europea (Brexit), cuya decisión influyó en los mercados internacionales, el escenario no es muy positivo, sobre todo porque el gobierno federal determinó que salud y educación serían de los rubros que tendrían el mayor recorte presupuestal.
Si con ello se afecta aún más a muchas familias de escasos recursos, la operatividad de clínicas y programas de salud, ¿No importa?
¿BECAS A ESTUDIANTES INDÍGENAS?
Esa es la intención porque solo el 1 por ciento de los jóvenes que viven en zonas rurales logra inscribirse a la universidad. Aunque el gobierno federal no ha reparado en esfuerzos para apoyar a este sector, estos han sido insuficientes.
Por este motivo, la Comisión de Educación Pública y Servicios Educativos analiza una iniciativa para crear, por medio de una ley, el Sistema Nacional de Becas para Estudiantes Indígenas, cuyo objetivo es apoyar a este segmento con la finalidad de que concluyan sus estudios desde el nivel básico hasta el universitario, así como generar un banco de datos del total de los estudiantes indígenas.
La iniciativa fue presentada ante la Comisión Permanente por el diputado Victoriano Wences Real (PRD), quien precisó que los grupos indígenas del país son de los más rezagados, debido a pronunciadas desigualdades que enfrentan, además de que los esfuerzos que han hecho diversos gobiernos para ayudarles, “no han tenido resultados destacados”.
El documento que sustenta su propuesta, destaca que esta población está conformada por 15 millones de personas, distribuidos en 871 de los dos mil 443 municipios del país.
Con el Sistema de Becas que pretende, se fomentaría el desempeño escolar y se determinarían normas y procedimientos para otorgar apoyos a los estudiantes de los pueblos originarios de nuestro país.
UN MÉXICO “SEDIENTO”
Parafraseando al malogrado Luis Donaldo Colosio, la diputada Ana Juan Ángeles Valencia también ve a un “México sediento” de reformas consensuadas por todos los sectores sociales y de leyes acordes a las necesidades humanas, no a capricho de autoridades que las disfrazan.