Se posiciona el país entre los emergentes más sólidos: CEESP
Finanzas lunes 30, May 2016- Fortaleza económica
La fortaleza macroeconómica de México lo ha posicionado como una de las naciones emergentes más sólidas, permitiéndole tener acceso a los beneficios financieros internacionales, destacó el Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP).
Ante ello, señala, el Fondo Monetario Internacional (FMI) aprobó la renovación de la línea de crédito flexible de la que goza México desde 2009, que en esta ocasión tendrá una vigencia de dos años por un monto de 88 mil millones de dólares, 21 mil millones más que en el acuerdo anterior.
Esta línea de crédito, además de fortalecer la solidez de la economía mexicana, puede reanimar la confianza del entorno internacional, sostuvo en su publicación semanal “Análisis económico ejecutivo”.
Estima que estas decisiones, además de resaltar la solidez de la economía, comprometen más a México con el avance en todas aquellas medidas que contribuyan a mejorar el ritmo de crecimiento y bienestar de los hogares, en un entorno de Estado de derecho y de cumplimiento de las leyes.
“En medio del adverso ambiente externo hay aspectos positivos que se deben resaltar, como es la fortaleza macroeconómica que ha mantenido el país en un entorno tan difícil, independientemente de la inquietud y el posible efecto que han generado temas como la corrupción, impunidad e inseguridad”.
No obstante, la fuerza con la que evoluciona la economía no es suficiente para contrarrestar el impacto de la debilidad del entorno externo, como se refleja en el hecho de que la Secretaría de Hacienda y el Banco de México modificaron sus expectativas de crecimiento.
Refiere que la Secretaría de Hacienda redujo en cuatro décimas de punto el rango de avance esperado para 2016, para ubicarlo de 2.2 a 3.2 por ciento, y sin cambio su pronóstico para 2017, de 2.3 a 3.6 por ciento.
Por el contrario, el Banco de México mantuvo su estimación para este año, en un rango de 2.0 a 3.0 por ciento, y la redujo en dos décimas para el siguiente año, a un intervalo de 2.3 a 3.3 por ciento.
El organismo de investigación y análisis del sector privado considera que estos ajustes pueden responder también a que las fuentes de crecimiento interno se apoyan en factores temporales.
Entre los anteriores, menciona el importante aumento del gasto electoral por las próximas elecciones en 13 entidades y la selección del constituyente para la elaboración de la Constitución de la Ciudad de México, así como el efecto de las remesas o la evolución del crédito.
Precisa que el único factor que puede seguir con un efecto favorable es la inflación, dada la holgura que tiene respecto al crecimiento de la economía, aunque la volatilidad del tipo de cambio en algún momento podría reflejarse en aumentos en los precios al consumidor.