Disminuida y quebrada, la CNTE fue echada de la CDMX
Roberto Vizcaíno lunes 23, May 2016Tras la puerta del poder
Roberto Vizcaíno
- Por primera vez, en 37 años de vida, la CNTE es obligada a irse
- En lugar de diálogo y ganancias, se fueron con casi 5 mil ceses fulminantes
- PRD, PRI y PES denuncian: Ricardo Monreal desvía recursos de Cuauhtémoc a Zacatecas
En lugar de obligar al presidente Enrique Peña Nieto, al secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong y/o al de Educación Pública, Aurelio Nuño, a sentarse en una mesa de “negociación y diálogo” sobre la reforma educativa, la CNTE fue “invitada” a fines de la semana a levantar sus campamentos en Bucareli y Santo Domingo, e irse de la Ciudad de México sin gritos ni confrontaciones y con las más altas pérdidas de su historia.
Se fueron no sólo disminuidos hasta la casi disolución, sino con cerca de 5 mil ceses fulminantes por parte de la SEP y con el señalamiento de que en lo sucesivo el trato para ellos es sólo el que marca la ley.
Nada de las tradicionales mesas de diálogo y menos para anular o modificar la reforma educativa. Esa reforma es ya es una realidad, y no tiene regreso, reiteró el presidente Enrique Peña Nieto.
NO APRENDEN
Los hechos indican que esta vez los maestros y sus líderes llegaron derrotados de antemano. Sin más imaginación, con los mismos desgastados métodos aplicados por ellos desde hace casi 40 años, marcharon, gritaron, amenazaron e intentaron inútilmente colocar su plantón en espacios públicos sensibles.
Esta vez no los dejaron.
Provenientes de Chiapas, Oaxaca, Guerrero y Michoacán apenas sumaron 3 o 4 mil maestros. Ni de broma algo parecido a los contingentes de 20 o 30 mil maestros que movilizaron aquel 9 de mayo de 2013, cuando iniciaron el embate contra la promulgación de la reforma educativa, cosa que al final no pudieron impedir.
Ni la sombra del grupo que entonces tomó el Zócalo, o el que secuestró el monumento de la Revolución durante casi un año, o el que se apoderó una y otra vez las principales calles y avenidas de la capital, o el que rodeó a San Lázaro y el Senado y obligó a diputados y senadores a sesionar en el Centro Banamex.
Nada de eso, hoy apenas un fantasmal reflejo de aquellos aguerridos, violentos, insolentes maestros que asaltaban impunemente los Oxos que encontraban a su paso, para llevarse papas y refrescos.
Ni la sombra de esos que, prepotentes colocaban sus sillas playeras de lona para dormitar en pleno Paseo de la Reforma, y vandalizaban y sembraban el terror entre los ciudadanos.
Hoy, pues, la clara muestra de un grupo quebrado, doblado, sometido por las acciones del Estado que ahora los recibió con el cese fulminante de cerca de 5 mil de ellos, y con la advertencia de que no tenía nada que negociar con la CNTE.
Un trato aplaudido por cientos de miles, quizá millones de mexicanos que vieron por primera vez cómo los de la CNTE eran enfrentados y rodeados, anulados, por Fuerzas Federales.
Nunca antes, desde el 17 de diciembre de 1979 en que fue creada la CNTE en Chiapas, es decir hace 37 años, se les había echado fuera de la Ciudad de México. Y sin siquiera un jaloneo.
Apenas participaron en esta ocasión en un par de marchas e intentaron, primero, llegar al Zócalo para iniciar ahí un plantón. Un cordón de agentes federales reforzados por granaderos capitalinos se los impidió.
Sorprendidos, incrédulos, enfilaron entonces hacia la plazoleta del Monumento a la Revolución, donde otro contingente policiaco los obligó a dar marcha atrás.
Con las cosas así, no les quedó más que tomar avenida Bucareli a lo largo de 3 cuadras, de donde fueron echados por la policía Federal el viernes, a fin de restablecer el flujo de esa importante arteria citadina.
Entonces se les ocurrió plantarse en la explanada de Santo Domingo, en la parte posterior de la Secretaría de Educación y a unas 3 cuadras de la Plaza de la Constitución.
De ahí fueron desalojados durante la madrugada del sábado por agentes federales, que los conminaron a subir a autobuses que los regresarían a sus estados de origen.
Apenas hubo algunas quejas. La mayoría de los pocos que quedaban, quizá apenas unos 200, aceptó gustosa la solución. Para entonces estaba más que claro que este movimiento era un fracaso.
Así terminaba una movilización anunciada con gran euforia por sus líderes como parte de “Un Paro Nacional”, para echar atrás la reforma educativa.
A diferencia de lo ocurrido en la Ciudad de México, hacia fines de la semana en Chiapas, Guerrero y Michoacán hubo algunos enfrentamientos entre policías y maestros de la CNTE.
En Oaxaca persistió el plantón que tienen en el centro histórico. Sólo que por estos días llegaron de nuevo varios aviones repletos de agentes federales a esos estados.
No se requiere ser mago para entender que ahora el Gobierno Federal va por ellos en sus propias madrigueras.
Lo único cierto es que, desde el 21 de julio de 2015 en que, en un golpe impensado por ellos, el gobierno de Enrique Peña Nieto les quitó el control del IEEPO, y sin dinero ni control de plazas, han perdido el predominio sobre sus grupos. Desde entonces no dan una.
Hoy el fin de esta movilización en la Ciudad de México deja en claro que están en su fase terminal.
Los líderes de la CNTE nunca entendieron que luego del encarcelamiento de Elba Esther Gordillo, quienes siguen son ellos.
MONREAL A REVISIÓN
Ricardo Monreal, delegado de la Cuauhtémoc y aspirante a la Jefatura de Gobierno, fue denunciado la semana pasada por su ex partido, el PRD, de desviar recursos de su demarcación capitalina para apoyar a su hermano, a David Monreal, como candidato de Morena al Gobierno de Zacatecas.
La denuncia la reiterarían después el Partido Encuentro Social y el PRI, cuya fracción en el Senado pidió al Jefe de Gobierno de la Ciudad de México, a Miguel Ángel Mancera, iniciar una inmediata auditoría a los presupuestos y fondos financieros, obras y servicios de la delegación que encabeza Ricardo Monreal.
Los senadores del tricolor indicaron que hay no sólo indicios, sino testimonios firmes, de que el delegado de Cuauhtémoc, quien fue gobernador de Zacatecas, tiene grupos de la nómina a su cargo trabajando en favor de su hermano en aquel estado.
De acuerdo a testimonios, dicen perredistas y priístas, el Jefe Delegacional no sólo ha enviado dinero en efectivo para beneficiar la campaña de su hermano, sino que también ha pedido a diversos empresarios, beneficiados durante su administración como delegado, que aporten y faciliten vehículos, espectaculares y propaganda.
“No es la primera ocasión que Ricardo Monreal es acusado por este tipo de hechos, basta mencionar que en junio de 2015, tres personas que presuntamente eran sus colaboradoras fueron detenidas cuando intentaban abordar un avión privado en Tapachula, llevando consigo más de un millón de pesos”, recordaron.
Por ello piden que la Contraloría General de la Ciudad de México verifique que los recursos destinados a la Delegación Cuauhtémoc son administrados y ejercidos en el marco de la ley, y a la Fepade le exigen indague si es cierto que empresarios han sido presionados para dar recursos y servicios al candidato de Morena en Zacatecas.
MECATE CORTO
Tales son los datos sobre la intervención del delegado de la Cuauhtémoc en el proceso de Zacatecas, que la dirigencia nacional del PRI decidió enviar a un grupo de delegados especiales a Zacatecas.
Ellos son Cruz Juvenal Roa Sánchez, presidente de la Junta de Coordinación Política de la LIX Legislatura mexiquense; así como los diputados Francisco Fernández Clamont, Roberto Sánchez Campos, Eduardo Zarzosa Sánchez, Ivette Topete García, María de Lourdes Montiel Paredes, Irazema González Martínez, Jesús Antonio Becerril Gasca y Abel Neftalí Domínguez Azuz.
Todos ellos tienen la encomienda de hacer promoción por sus candidatos y a la vez aplicar una vigilancia especial sobre la aplicación de recursos y acciones del candidato de Morena, David Monreal.
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