Ozono, causante de contaminación en CDMX
¬ AAPAUNAM jueves 12, May 2016AAPAUNAM INFORMA
Jorge Delfín Sánchez
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Para resolver los problemas de movilidad, transporte y contaminación en la Zona Metropolitana de la Ciudad de México no existe solución a corto plazo. Las respuestas son a mediano y largo plazos y consisten en hacer eficiente y planear el crecimiento de la urbe, afirmó el director del Instituto de Geografía de la UNAM, académico Manuel Suárez Lastra.
Señaló que lo correcto es generar planes locales de ordenamiento territorial, basados en problemas regionales. La forma en que crece la ciudad no puede ser de expansión, sino de concentración. Además, resaltó que el transporte en la metrópoli es caótico, ya que la mayoría de los viajes se realizan en transporte colectivo, a ello se suman los autos y el Sistema de Transporte Colectivo Metro y le siguen los taxis, Metrobús, motocicletas que ocupan porcentajes menores. Actualmente lo que se invierte en ir al trabajo es de dos horas aproximadamente, que es igual a la cuarta parte de una jornada laboral, demasiado tiempo que bien se podría utilizar en otras actividades.
La manera en que las personas se trasladan depende de la forma de organización de la ciudad, dijo el coautor del libro “Entre mi casa y mi destino: Movilidad y transporte en México”, UNAM, 2015.
Refiere por otra parte, que es difícil cuantificar los autos que circulan en la Ciudad de México, porque los registros no son claros y la cifra normalmente está subestimada, ya que las personas venden sus vehículos sin dar aviso a la autoridad y así parece que van en aumento. Las estimaciones de circulación para la Zona Metropolitana son de aproximadamente tres o cuatro millones de vehículos por día, aunque hay diferencias entre el número de automóviles registrados y los que están circulando.
De hecho, con base en datos de la Encuesta Nacional de Movilidad de Transporte, realizada en la UNAM, la Ciudad de México está por debajo del promedio nacional del uso de autos, sin embargo, el 60 por ciento de los vehículos es usado por el 25 por ciento de la población con más ingresos; los de menores recursos utilizan el transporte público. La mayoría de los conductores son adultos jóvenes y la proporción de hombres que manejan con respecto a las mujeres es un poco más alta.
De los que manejan, indica la Encuesta, sólo el 6 por ciento dejaría su auto si es que hubiera un transporte eficiente, el resto solo lo haría si no le alcanza para comprar gasolina. Es bueno resaltar, que la CDMX tiene la flota de servicio público más moderna del país, 10 años más nueva que el resto. Sabemos, que los engomados doble cero y cero impulsaron a la compra de autos del año que contaminan menos. En ese sentido si ha funcionado la política de verificación.
Por otra parte, los días en que se han registrado contingencias ambientales, el problema se debe a que las unidades antiguas de servicios públicos que no son verificados elevan el nivel de contaminación y las condiciones meteorológicas cuando no hay viento y sí mucho calor, que en conjunto producen el peor escenario. Hoy No Circula no funciona porque la disminución de ozono depende de reacciones químicas en la atmósfera.
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