Terapias inmunes contra el cáncer
Salud viernes 22, Abr 2016Cápsulas de la salud
Elsa Rodríguez Osorio
- En el mundo, 285 millones sufren discapacidad visual
- El asma puede llevar a un rápido deterioro de la función pulmonar
- En la última década, la inmuno-oncología se considera como un pilar contra el cáncer junto a la cirugía, la radioterapia y la quimioterapia.
Los primeros anticuerpos monoclonales fueron aprobados en la década de 1990 para tratar cáncer de mama y linfoma, y hoy están siendo estudiados para muchos tipos de cánceres.
Las células cancerígenas a menudo encuentran formas de “ocultarse” de células normales, por lo que el sistema inmune no siempre las reconoce como dañinas.
Este posee una serie de células especializadas, las cuales tienen la capacidad de reconocer y atacar a cualquier cuerpo extraño, incluyendo las células cancerígenas.
La inmunoterapia se diferencia de otras terapias porque se dirige directamente al sistema inmune en vez de al tumor, lo cual permite que éste reconozca selectivamente y ataque a las células cancerígenas y puede brindar una memoria de larga duración al sistema inmune y le enseña a luchar contra las células cancerígenas, incluso tras la remisión. Los efectos adversos asociados a los tratamientos inmunooncológicos son manejables. La doctora Marissa González, Directora Médica de Oncología de MSD afirma quela farmacéutica ha desarrollado un programa de investigación en inmunooncología que ha permitido traer a la luz nuevas moléculas inmunoterapéuticas en diferentes tipos de cáncer como melanoma y cáncer de pulmón.
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De acuerdo con la OMS en el mundo hay alrededor 285 millones personas con discapacidad visual, de ellas, 246 millones tienen esta condición y 39 millones sufren ceguera total. El 80% de estos casos podrían prevenirse o curarse y el 90% de estos padecimientos se concentran en países de bajos recursos. el doctor Jans Fromow, cirujano oftalmólogo, especialista en retina y vítreo señala que los padecimientos más comunes de la visión son: miopía; hipermetropía; astigmatismo; presbicia (vista cansada); catarata, (consiste en la opacidad progresiva del cristalino, puede provocar ceguera pero se resuelve con cirugía); glaucoma, (se caracteriza por el aumento de la presión intraocular con daño al nervio óptico); retinopatía diabética (complicación tardía de la diabetes y es la causa número uno de ceguera en México); edema macular, este padecimiento se desarrolla con los años y es un proceso degenerativo que afecta la parte central de la retina la cual permite ver los detalles más pequeños y proporciona una visión más fina Existe la degeneración macular seca que se produce cuando las células de la mácula, sensibles a la luz, se deterioran por efecto del tiempo, lo que hace que la visión central se nuble gradualmente.
La degeneración macular húmeda es más severa y ocurre cuando los vasos sanguíneos, alojados detrás de la retina, comienzan a crecer debajo de la mácula y permiten la fuga de sangre y líquido, esto levanta la mácula de su lugar normal en el fondo del ojo y generan un daño inmediato.
Para evitar todo ello se aconseja hacerse un examen de la vista por lo menos una vez al año.
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El asma es un padecimiento de las vías respiratorias, puede presentarse de manera crónica o en episodios agudos, llamados exacerbaciones: falta de aliento, respiración sibilante, tensión en el pecho y tos.
Si la enfermedad es diagnosticada y tratada integralmente, no interfiere con la vida diaria del paciente y puede realizar todas sus actividades laborales, escolares y deportivas.
De acuerdo con el doctor Jorge Iván Rodríguez, especialista en neumología y terapia respiratoria, el asma es un trastorno relacionado con múltiples factores, en el que intervienen mecanismos genéticos y medioambientales.
Inicia en la niñez y sus primeras manifestaciones suelen confundirse con otras enfermedades respiratorias, lo que ocasiona que con frecuencia el asma esté sub-diagnosticada e inadecuadamente tratada, además de que por cada paciente detectado existe otra persona que lo ignora. Una vez diagnosticada, mediante un estudio que mide el volumen y flujo del aire en los pulmones (espirometría), el asma debe ser tratada integralmente, reduciendo la exposición a factores desencadenantes o alérgenos como pelo de mascotas, polvo, cambios de temperatura, polen, entre otros y llevar un tratamiento farmacológico de largo plazo, de lo contrario se incrementa el riesgo de posibles exacerbaciones que lleven al paciente a un rápido deterioro de la función pulmonar y perder la capacidad de respirar bien .