¡Memorable!.. Guns N’Roses ofrece concierto de ilusiones en el Foro Sol
Espectáculos jueves 21, Abr 2016- La agrupación tocó las canciones más exitosas de su carrera, que inició como grupo en 1985
- A pesar de la fractura en el pie, Axl, quien portó un paliacate rojo, salió algunos instantes con una silla de ruedas para cambiarse de ropa o para tocar el piano, que fue aplaudido por todos
Asael Grande
Fotos: Lulú Urdapilleta/Ocesa
Después de cinco años de no pisar suelo azteca, y por cuarta ocasión de visitar México, la banda estadunidense más icónica del hard rock, Guns N’Roses, ofreció dos sensacionales conciertos (19 y 20 de abril) en el Foro Sol como parte de su gira “Not In This Life Time”, y con la alineación conformada por Axl Rose (voz), Slash (guitarra), Duff McKagan (bajo), Dizzy Reed (teclado), Richard Fortus (guitarra), Melissa Reese (teclado y coros) y Frank Ferrer (batería), después de que Duff McKagan regresara a la banda en lugar de Tommy Stinson, y con el esperado regreso del guitarrista Saul Hudson, mejor conocido como Slash.
Recién desempacados del Festival Coachella, y de sus conciertos en el T-Mobile Arena de Las Vegas, y en el The Troubadour, en Los Ángeles, Axl Rose y compañía deleitaron a sus fans mexicanos con un concierto lleno de buen hard rock, rock and roll, heavy metal, glam metal, sleaze rock y punk rock. Los encargados de ser los teloneros invitados de GN’R fueron los británicos de The Cult, integrados por Ian Astbury, Billy Duffy, Chris Wyse, y John Tempesta, quienes tocaron algunos de sus temas clásicos y otros de su reciente álbum titulado “Hidden City”.
En punto de las 21:50 horas y tras el intro de la caricatura Looney Tunes y The Eualizer de Harry Gregson-Williams, a la voz de “¡Hola!” de Axl Rose tras bambalinas, Guns N’ Roses inyectó su sonido con el arranque de la poderosa “It’s So Easy” (de su álbum debut “Appetite for Destruction”), que dio paso a Mr. Brownstone y Chinese Democracy.
Ante 65 mil 500 seguidores en el primero de sus dos cinciertor, y con un escenario conformado por dos pantallas laterales, y una central que proyectó imágenes con el logo de la banda, el concierto continuó con la clásica “Welcome to the Jungle”, que incluyó juegos pirotécnicos y explosiones. “Double Talkin’ Jive” y “Estranged”, antecedieron a “Live and Let Die” (cover de Wings) que estuvo acompañada de lanzallamas detrás del stage.
Las clásicas “Rocket Queen” y “You Could Be Mine” dieron paso para que Duff McKagan interpretara un tema de los Misfits, Attitude. “This I Love”, “Coma y Speak Softl” y “Love” (tema de amor de “The Godfather”) fue la siguiente tercia de rolas antes de que Slash comenzara el famoso riff de “Sweet Child O’ Mine”, canción que los presentes cantaron a coro junto a la intocable voz de Axl Rose quien (a pesar de estar sentado en sillón prestado Dave Grohl debido a la fractura en su pie izquierdo) no perdió sus clásicos movimientos estando sentado en su moderno sofá adornado con brazos de guitarras eléctricas.
Después de sonar “Civil War” (con la presentación de la banda), Slash y Fortus tocaron un jam de “Wish You Were Here” (tema de Pink Floyd); Axl Rose regresó al escenario para sentarse al piano y tocar la bella y magistral balada “November Rain”. La velada siguió con el tema de Bob Dylan, “Knockin’ on Heaven’s Door”, y seguir con “Nightrain” antes del obligado “Encore”.
De regreso al escenario, Guns N’Roses, cantaron la acústica “Patience”, para continuar con The Seeker (canción escrita por Pete Townshend de The Who), y finalizar la noche entre juegos pirotécnicos con “Paradise City”, canción que la legión presente de fans coreó junto a la banda la famosa estrofa “Take Me Down To The Paradise City Where The Grass Is Green And The Girls Are Pretty” (“Llévame a la ciudad paraíso donde la hierba es verde y las chicas son hermosas”).
Guns N’Roses, demostró una vez más porqué es una de las bandas más icónicas del hard rock, y lo hizo nuevamente con creces en la ciudad de México, en lo que fue un extraordinario y sensacional concierto lleno de ilusiones.
Con “Sweet Child O’Mine”, antecedida por la introducción en guitarra de “The Godfather Theme”, en el que la agrupación llenó de nostalgia a su público, que en su mayoría vestía con ropa oscura y uno que otro portaba un sombrero parecido al de Slash