La Interpol, tras “Los Porkys”
¬ Augusto Corro viernes 15, Abr 2016Punto por punto
Augusto Corro
La Policía Internacional (Interpol) busca a tres de “Los Porkys” acusados de atacar sexualmente a una menor de edad hace un año en Boca del Río, Veracruz.
Autoridades estatales y federales emitieron las fichas rojas internacionales de arresto contra los implicados en el “Caso Porkys de Costa de Oro”.
La agresión a la joven Daphne ocurrió en enero del 2015 y fue en este año, cuando el padre de la víctima, Javier Fernández, hizo público el caso, debido a que no avanzaban las investigaciones.
Las tarjetas rojas de localización y arresto son para Enrique Capitaine, Jorge Cotaita y Diego Cruz, todos pertenecientes a familias adineradas. Del cuarto mozalbete implicado, nada se dijo. De acuerdo con la información de medios, Diego Cruz salió de México con destino a España el 28 de marzo.
Enrique Capitaine dejó el país y se encuentra en The Woodlands, Texas.
El “Caso Porkys de Costa de Oro” le tronó en las manos al impresentable gobernador de Veracruz, Javier Duarte, cuando más cuestionada es la aplicación de la justicia en esa entidad.
María Elena Morera, presidenta de Causa Común, culpó a Duarte de la huida de los pandilleros que agredieron a Daphne. Aunque el mandatario negó proteger a los “juniors”, reflejó lo contrario su lentitud para echar a andar el aparato de la justicia con el fin de castigarlos.
Ahora, la policía se llevará un tiempo considerable en la localización y captura de los fugitivos, que, sin duda, servirá para que el asunto se olvide o se archive.
Así ocurre cuando se trata de la aplicación de la ley al puro estilo mexicano.
LA PENSIÓN VITALICIA
El fin de semana pasado, en Cancún, una persona le gritó “¡parásito!” al ex presidente Felipe Calderón, cuando iniciaba una conferencia en una universidad.
Una vez entrevistado, el desconocido argumentó que el ex presidente recibe una pensión inmerecida, estratosférica, más allá de lo que percibe el común de los mexicanos jubilados.
El martes pasado, una diputada envió una carta a los ex presidentes Luis Echeverría Alvarez, Carlos Salinas de Gortari, Ernesto Zedillo, Vicente Fox y Felipe Calderón, en la que los invita a renunciar a esa pensión de privilegios, que le cuesta sumas millonarias a los mexicanos.
De ese grupo de ex presidentes, únicamente Fox se atrevió a contestar que no va a renunciar a la pensión vitalicia, porque señaló que de ese dinero vive.
“Yo vivo de eso. No recibo ni un solo centavo de mi familia. Hicimos un trabajo profesional (seguramente se refirió a su paso por Los Pinos) de absoluta transparencia y honestidad, y yo vivo de eso, yo sí la necesito”, declaró en una entrevista radiofónica.
Obviamente, nadie creyó en las declaraciones del guanajuatense, que vive sin necesidad alguna en su Centro Fox, que también es subsidiado por los contribuyentes mexicanos; mientras en el país, más de 50 millones de personas viven en la pobreza.
La insensibilidad de los políticos mexicanos raya en la ofensa. ¿Usted, amable lector, cree realmente que Fox vive de su pensión? Yo tampoco.
“FABIANCITO”, LIBRE
Otro ejemplo de la aplicación de la ley a la mexicana es el caso del Fabián Granier Calles, “Fabiancito”, el hijo de Andrés Granier, ex gobernador priísta que tiene cuentas pendientes con la justicia tabasqueña. El junior, acusado de presunto fraude fiscal por más de 2 millones de pesos, fue detenido y enviado a prisión.
Sin embargo, logró su libertad tras pagar una fianza de 2 millones 111 mil 725 pesos, equivalente al fraude citado.
“Fabiancito” tiene otras dos órdenes de aprehensión giradas por jueces tabasqueños, también por el delito de defraudación fiscal.
El citado sujeto es el ejemplo de algunos hijos de quienes son o fueron gobernadores, que al amparo de su poder y riquezas, generalmente inexplicables, no solamente se burlan de la ley, sino que también viven como jeques petroleros.
Durante el mandato (reinado) de su padre Andrés, “Fabiancito” empezó a trabajar en el gobierno como repartidor de despensas para los pobres y terminó como dueño del hotel “El Pueblito”, que tiene un costo superior a los 50 millones de dólares.
El inmueble se encuentra en el kilómetro 17.5 de la zona hotelera de Cancún, es de 4 estrellas y tiene 350 habitaciones, según se publicó en diferentes diarios.
Por otra parte, en Tabasco esperan a Andrés Granier, el ex gobernador, para procesarlo por varios delitos: peculado y enriquecimiento inexplicable, entre otros.
Feliz fin de semana.