Guillaume Rose, ministro de Turismo de Mónaco, presenta a los mexicanos el abanico de atractivos de ese país

De cinco estrellas

Victoria González Prado

• Más de 700 eventos al año, de ellos el Grand Prix, en mayo. El principado recibe 6 millones de turistas al año y 300 mil visitantes anualmente llegan en cruceros

Jesús Scott, Corinne Kiabski, Guillaume Rose, Laurence Aquilina y Massimo Michelis.

Guillaume Rose, ministro de Turismo de Mónaco, acompañado por Lamia Zahouani, Laurene Aquilina, Corinne Kiabski, Jesús Scott y Stéphanie Bocchino, prestadores de servicios de ese país y, por Anne-Marie Fabre y Mèlanie Belin, directora y responsable de Comunicación en Atout France en México, respectivamente, llegaron a la Ciudad de México para presentar los atractivos que ofrece.

La reunión tuvo lugar en el restaurante Beef Bar del hotel Camino Real, donde se dieron cita importantes representantes de agencias de viajes y operadores turísticos interesados en conocer la oferta de ese país para el mercado mexicano y, algunos representantes de los medios de comunicación.

Al hacer uso de la palabra, Guillaume Rose dijo: “Mónaco es el segundo Estado más pequeño del mundo después del Vaticano. Está localizado a lo largo de la Costa Azul, entre Francia e Italia. Brinda a los visitantes la esencia, elegancia y la emoción de la historia europea en dos kilómetros cuadrados”.

El principado, dijo el ministro de Turismo, “ofrece  más de 700 eventos al año, de ellos destaca el Grand Prix en el mes de mayo. Recibimos 6 millones de turistas al año y 300 mil visitantes llegan en cruceros”.

De igual forma, destacó que el 78 por ciento de los viajeros a Mónaco lo hace por placer, el 22 por ciento por negocios, y, desde Mónaco, por su ubicación privilegiada, puedes visitar también Francia e Italia.

Guillaume Rose se refirió igualmente a la Fundación Turquois, que preside Raymond Turquois, que proporciona a estudiantes mexicanos seleccionados la posibilidad de mejorar sus conocimientos en la industria del turismo y la hospitalidad, con la intención de que puedan completar sus estudios y seguir cursos de formación profesional  en  la hostelería y la gastronomía.

Cabe destacar que en la Edad Media Mónaco fue uno de los lugares más codiciados por los estrategas europeos. Su bahía y puerto, al abrigo de vientos y tormentas y sobre todo la Roca, eran de valor incalculable para controlar la zona sur de Francia.

Mónaco ofrece un abanico de opciones para disfrutar la ciudad como la  Catedral de Saint Nicholas, donde se casaron el príncipe Rainiero III y Grace Kelly; el Palacio de Justicia, la Rue Basse. En la plaza del Palacio se realiza el cambio de guardia en punto de las 11:55 horas; el barrio de Montecarlo y su casino”.

De los hoteles destaca el París que estará completamente remodelado en 2018 y el Métropole, un hotel boutique de ubicación discreta, pero distinguida por sus jardines toscanos y su privilegiada vista, desde donde puede verse una de las mejores vueltas del  circuito del Grand Prix.

Mónaco, dijo Guillaume Rose, “no sólo se trata de un destino de lujo, es un país repleto de cultura e historia, y es la puerta de entrada para visitar el sur de Francia y el norte de Italia”.

Al mismo tiempo aseguró: “cada vez más mexicanos nos visitan, les encanta nuestra gastronomía mediterránea y nuestra lujosa oferta hotelera; Mónaco es muy especial para este mercado, porque aquí converge la amabilidad y alegría de los italianos con la sofisticación y el glamur de los franceses. No estamos enfocados al turismo masivo, sin embargo, los visitantes mexicanos han incrementado su estancia año con año; en 2015 se contabilizaron 3 mil 46, y para 2009, hubo un incremento del 86 por ciento”.

En Mónaco puedes hacer distintos recorridos, por ejemplo, uno de compras en la Pavillions Monte Carlo y/o el Métropole Shopping Center. Por la noche hay un sinnúmero de bares y restaurantes.

En Puerto Hércules, uno de los sitios más lujosos de Europa, podrás ver los barcos más espectaculares y costosos. Para los amantes de la navegación, éste es un sitio perfecto para disfrutar de los lujos que la riqueza puede concebir.

Si lo tuyo son los autos, Montecarlo es un buen lugar para encontrarlos, por sus calles transitan Ferrari, Porsche, Lamborghini, Rolls Royce, etcétera. Además, Mónaco alberga uno de los circuitos de la Fórmula 1.

Hay que caminar por las calles de Mónaco para ver hermosas vistas al Mediterráneo y una colección de casas y mansiones bellísimas; los jardines Saint Martin que cuelgan prácticamente de la roca; la iglesia de Santa Devota, construida en 1870 y más.

Ir a Mónaco es conocer de lujo, el esplendor, la riqueza… Es un país pequeño con muchos atractivos. Si tienes oportunidad visítalo. Te sorprenderás.

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