¡Fuego, bomberos, fuego!
¬ Salvador Estrada martes 29, Mar 2016Folclor urbano
Salvador Estrada
¡Fuego, los bomberos se queman! Las llamas de la corrupción achicharran al sindicato y muchos cesados demandan el agua refrescante de la justicia para que se castigue a su líder.
Los bomberos, el heroico cuerpo que cada desfile es ovacionado por la ciudadanía, son ahora, debido a su dirigente, señalados como malos servidores públicos. Y esto duele e incendia el enojo de la población, porque no se puede creer que ellos estén “ardiendo en la corrupción” cuando siempre trabajan con el agua.
Ismael Figueroa, secretario general del Sindicato de Bomberos, es acusado por 57 miembros de esa organización que se hace llamar “Bomberos en Resistencia” de vender plazas, de acoso sexual y de despidos injustificados.
Los “vulcanos” quejosos dicen que las plazas las vende hasta en 200 mil pesos, pero aclaran que hay plazas de 100 mil y de 50 mil pesos. Y denuncian que hace tres años, en 2013, vendió 500 plazas.
Señalan que son despedidos de su trabajo para dar la plaza a familiares de los dirigentes sindicales y que no son aptos para integrarse al Cuerpo de Bomberos. Aquí, el nepotismo no ”quema”, sino fortifica.
Bueno, no es echarle más gasolina a este fuego de corrupción que vive el sindicato, pero damos a conocer la declaración de una mujer-bombero, que dice la corrieron porque no estuvo de acuerdo de ir a un servicio porque su compañero estaba ebrio. “Yo no estaba a favor de los que se ponían a tomar en la estación y llevaban mujeres con las que se encerraban en los dormitorios”.
El secretario general, Ismael Figueroa, ha rechazado las acusaciones, y aclara que no ha sido requerido por las autoridades correspondientes para rendir declaración sobre la presunta venta de plazas.
Bomberos en Resistencia dieron a conocer que ya acudieron a Derechos Humanos y que enviaron un documento a la Contraloría capitalina, pero no hay respuesta y existe temor de que sigan los despidos. Y antes que este “incendio de corrupción avance con los vientos de la complicidad, urge apagarlo con las aguas limpias de esas instituciones que deben investigar y declarar la culpabilidad o la inocencia”.
El líder Figueroa, después de desmentir las acusaciones, aclara que tal vez lo atacan porque quiere ser candidato independiente al Congreso Constituyente. Y entonces, este escándalo que empezaba a arder, va a quedar en una falsa alarma a la que están acostumbrados los bomberos. Y el único “quemado” sería el líder, si llega a diputado.
