Avión presidencial no es propiedad del Ejecutivo
Nacional jueves 11, Feb 2016- Realiza primer vuelo oficial
El nuevo avión presidencial no es propiedad del titular del Poder Ejecutivo federal, sino un instrumento de trabajo que está al servicio de todas las instituciones mexicanas, subrayó el mandatario Enrique Peña Nieto.
En declaraciones a bordo de la aeronave Boeing 787 que ayer realizó su primer vuelo, en el marco del 101 aniversario de la Fuerza Aérea Mexicana, el jefe de Estado subrayó que el avión lo utiliza el gobierno para cumplir sus tareas y con la representación oficial que tiene tanto en el interior del país, como durante giras internacionales.
Peña Nieto aprovechó para aclarar “muchas imprecisiones y distorsiones que han corrido en distintas fuentes sobre la adquisición del avión”, que lleva como nombre “José María Morelos y Pavón”.
Al respecto, dijo que la compra la concretó en 2011 la Fuerza Aérea Mexicana por un exhorto del Congreso de la Unión, como parte del proceso de la renovación de la flotilla de ese instituto armado, pues la anterior era pieza obsoleta, costosa y que representaba riesgos para quien lo utilizara.
El Presidente de la República dio un recorrido a los representantes de los medios de comunicación por todas las áreas de la nave, pues subrayó que nada tiene qué ocultar y no es como lo han reflejado algunos medios.
Entre las áreas mostradas está su camarote, que cuenta con una mesa, un sillón, una cama y un baño, así como otras zonas donde viajan sus acompañantes.
En esta ocasión se trasladaron con él los secretarios de la Defensa Nacional, general Salvador Cienfuegos Zepeda; de Marina, almirante Vidal Francisco Soberón Sanz; de Comunicaciones y Transportes, Gerardo Ruiz Esparza, y de Desarrollo Social, José Antonio Meade Kuribreña, entre otros funcionarios.
Este vuelo inaugural tuvo como invitados especiales a 10 alumnos de primaria y secundaria con los promedios más altos en aprovechamiento académico, quienes le entregaron algunos obsequios.
El presidente Peña Nieto comentó que la nueva aeronave tiene la particularidad de que sus “usuarios frecuentes son representantes de los medios de comunicación”, como ocurre en los países democráticos y abiertos al escrutinio de la sociedad para que esté informada de las actividades del Ejecutivo federal.