Ventilan vinculaciones narcopolíticas
¬ Augusto Corro viernes 5, Feb 2016Punto por punto
Augusto Corro
Empezamos una temporada preelectoral en la que los aspirantes a cargos de representación popular son acusados de delincuentes, sin mayor miramiento.
Claro, el desprestigio daña temporalmente y no pasa nada.
Los señalados como corruptos, narcopolíticos, rateros, etc., son expuestos unos días ante la opinión pública y luego todo se olvida.
Por supuesto, tenemos las excepciones del caso, pero en el fondo, los candidatos no son llevados ante la justicia por las denuncias de que fueron objeto durante las campañas.
¿Ocurrirá lo mismo con el senador Francisco Javier García Cabeza de Vaca, el precandidato del Partido Acción Nacional (PAN) al gobierno de Tamaulipas?
El aspirante blanquiazul fue acusado de recibir dinero de parte del Cártel del Golfo. Esto fue afirmado por el narco Héctor Crescencio de León Fonseca “El R3”, a la policía que lo capturó.
Dijo De León Fonseca que su jefe Marco Antonio Haro Rodríguez, “El R2” “le reveló que parte del dinero que recolectaban de sus diversas actividades ilícitas iban a manos de García Cabeza de Vaca”.
Por su parte, el senador negó ser sujeto de una investigación por parte de la Procuraduría General de la República (PGR). Obvio, no iba a aceptar alguna culpabilidad.
Lo anterior, es un ejemplo del lodazal de las precampañas y campañas electorales.
CÓMO LLEGÓ LUCERO A DIPUTADA
El caso de la diputada panista Lucero Sánchez parece que cayó en el limbo.
Nadie en el Partido Acción Nacional (PAN) aparece como el responsable que la ayuda a ingresar a las filas blanquiazules y luego ganar la elección de diputada.
Lucero Sánchez saltó al escándalo luego de entró a visitar a Joaquín “El Chapo” Guzmán en el Altiplano, con una identificación falsa.
Posteriormente, se reunió con el capo prófugo para esperar el Año Nuevo 2016.
Esa relación de una legisladora con “El Chapo” fue un golpe duro que recibieron los dirigentes panistas empeñados en una lucha anticorrupción, sin pies ni cabeza.
El líder panista, Ricardo Anaya, tuvo que enfrentar el problema y de entrada anunció la expulsión del partido a aquellos que defiendan a la diputada. Pero el tema importante es saber quién o quiénes la ayudaron a ingresar al PAN y hacerla candidata triunfadora.
Gustavo Madero, el ex dirigente panista, se lavó las manos. Dijo que la legisladora salvó todos los filtros para llegar al cargo.
¿Tuvo alguna responsabilidad Madero? Eso solamente lo conoce la jerarquía panista, que no estará dispuesta a castigar a uno de sus ex dirigentes, para no dividir a ese instituto político.
¿Esto quiere decir que no habrá ningún castigado más?
El hilo más delgado se reventó en el Congreso de Sinaloa. La dirigencia panista acordó destituir al coordinador del partido en el Congreso local, Guadalupe Carrizoza, por la defensa que hizo de Lucero Sánchez.
Y todo hace suponer que el desafuero de la diputada seguirá su camino sin obstáculos y quién sabe cuánto tiempo le lleve. A la cúpula panista le urge que se cierre ese asunto, porque en temporada de elecciones recurrir al tema de la narcopolítica en el PAN no le dará más electores a su causa.
EN CHIHUAHUA
El Partido Acción Nacional (PAN) nombró al senador Javier Corral como su candidato a la gubernatura de Chihuahua.
El legislador, de acuerdo con las encuestas, resultó con mejor aceptación electoral que Teresa Ortuño, Carlos Angulo, Carlos Borruel y Juan Blanco, los otros aspirantes blanquiazules.
Javier Corral es un político controvertido, que por segunda ocasión intentará convertirse en gobernador. Sin duda, se trata de uno de los dirigentes panistas más aguerridos en la cúpula del poder.
Así lo demostraron sus enfrentamientos con el propio Felipe Calderón Hinojosa, ex presidente de México, a quien criticó, sin miramiento alguno, su política en telecomunicaciones, radio y televisión.
Se trata pues de un senador que siempre estuvo en el frente de batalla política, aún contra las opiniones y el modo de pensar de los dirigentes de su partido.
Javier Corral realizará su campaña electoral en una entidad gobernada por el priísta, César Duarte, quien luego de dedicarse a la venta de autos usados, ahora es uno de los hombres más ricos del estado.
También competirá contra el alcalde tricolor de Ciudad Juárez, Enrique Serrano, y el aspirante independiente, José Luis Barraza, ex presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE).
Feliz fin de semana.