Policía Estatal, sin preparación
¬ Augusto Corro jueves 21, Ene 2016Punto por punto
Augusto Corro
En nuestro país la ola de violencia creció incontrolable desde el gobierno del panista Felipe Calderón.
Una guerra fallida desatada contra la delincuencia organizada sólo dio como resultado miles de víctimas: secuestrados, asesinados y desaparecidos.
Además se evidenció la incapacidad y corrupción de los cuerpos policiacos municipales y estatales. El ejemplo claro de esa corrupción se vio, claramente, en el contubernio de representantes de la ley y criminales en la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa. Esas alianzas delincuenciales se dieron en un sinnúmero de municipios, en los que los representantes de ley se asocian con los delincuentes.
El último caso se vive en Veracruz, donde policías estatales, en contubernio con el crimen organizado, levantaron a cinco jóvenes, cuyo paradero se desconoce.
Ante la corrupción e incapacidad de las policías municipales se ideó la posibilidad de que los gobernadores se responsabilicen del manejo de las policías municipales y estatales, en el denominado Mando Único.
Este asunto del Mando Único se aplica ya en algunas entidades. Los resultados aún se desconocen.
QUERÉTARO SÍ PASA
Lo que sí se sabe es que “no hay policía estatal en todo el país que cumpla plenamente con los procesos de desarrollo a los que están obligadas por ley desde el 2009”. La organización civil Causa Común informó que las policías estatales consiguieron una calificación de 6.1, en la más reciente evaluación del Semáforo del Desarrollo Policial.
Ese examen lo realiza la propia organización Causa Común, que realiza un seguimiento puntual en los siguientes rubros: sistema profesional de carrera policial, profesionalización de los cuerpos policiacos, certificación integral y el régimen disciplinario.
Sólo a Querétaro puede otorgársele “luz verde” para consolidar una institución policial en ruta de cumplir con su responsabilidad de brindar seguridad a los ciudadanos”. En otras 17 entidades, los uniformados apenas pasaron de “panzazo” y “están en alerta amarilla”. El resto de las entidades resultaron reprobadas.
Las autoridades deben, pues, analizar las declaraciones de Causa Común, porque son los ciudadanos quienes resultan afectados en su seguridad por el mal desempeño de las policías.
En fin, ahí está la tarea de las autoridades de hacer mejores policías, es decir capacitarlos y proporcionarles mejores condiciones de vida.
ALCALDE “POLLERO”
Todo hace suponer que el presidente municipal de Tlalquitenango, Morelos, Enrique Alonso Plascencia, perdió el primer round frente al gobernador Graco Ramírez.
Como se informó, el alcalde se opuso al Mando Único y decidió encargarse del control de la policía municipal, en medio de un escándalo más como los que ocurren en aquella entidad desde que llegó a gobernar el perredista Graco Ramírez.
El alcalde se negó a aceptar la subordinación al Mando Unico, hecho que terminó en un enfrentamiento con el mandatario estatal, que empezaba a tener visos de triunfo para el presidente municipal.
Sólo que el pasado de Alonso Plascencia se enturbió repentinamente, pues resultó que tiene antecedentes penales.
El ahora alcalde, en el 2009 fue aprehendido en flagrancia cuando internaba, en complicidad con otras tres personas, en territorio nacional a nueve indocumentados guatemaltecos.
Una vez detenido fue presentado ante un juez federal acusado de los delitos relacionados con tráfico de personas, operación con recursos de procedencia ilícita y delincuencia organizada.
En diversos medios de comunicación apareció la ficha delictiva del alcalde mencionado.
De acuerdo con el acta policial, Alonso Plascencia fue detenido el 23 de abril de 2009, a la altura del kilómetro 145 de la carretera Las Choapas-Ocozocoutla, en calidad de “pollero”.
Tres años después, el Partido de la Revolución Democrática (PRD) se encargó de “rehabilitarlo” políticamente.
¿ES PERIODISTA SEAN PENN?
¿Se puede considerar como un trabajo periodístico la entrevista que Sean Penn le hizo a Joaquín Guzmán “El Chapo”, cuando éste era el capo más buscado del mundo?
De acuerdo con los tiempos que vivimos, sí. Se trató de una entrevista mal trabajada, pero que sí cumplió por lo menos con un requisito: la oportunidad de la noticia.
Por lo demás, no deja de ser una serie de preguntas que contestó el capo de acuerdo a sus intereses personales.
Las reglas del periodismo no fueron observadas por Sean Penn, pues no se le ve ni estilo, ni presentación profesional. Cualquier estudiante de comunicación lo hace mejor.
El actor hollywoodense logró su propósito de entrevistarse con “El Chapo”, como lo hizo con otros personajes polémicos. Es su estilo de actuar y allá él.
En México aquellos que se creen santones del periodismo se rasgaron las vestiduras y lanzaron un sinnúmero de descalificaciones al actor.
¿Realmente tiene importancia alguna que Sean Penn sea periodista? Me parece que no tiene importancia el tema. “El Chapo” ya está en la cárcel que era lo que buscaban las autoridades. Sean Penn tendrá más seguidores y todo seguirá igual, luego de una discusión estéril y sin sentido.