Los aguinaldos
¬ Augusto Corro martes 15, Dic 2015Punto por punto
Augusto Corro
El aguinaldo llega cada año con sus respectivas injusticias.
El regalo o gratificación que se da a una persona por Navidad es muy disparejo y así será hasta el fin de los siglos.
Para no ir tan lejos, los funcionarios, aquellos que están ligados al poder, reciben escandalosas sumas de dinero.
Los más necesitados, los pobres, alcanzan un beneficio mínimo, raquítico: una burla.
Leemos en DIARIOIMAGEN el aguinaldo que reciben los ministros de la Suprema Corte de Justicia quedó este año como referente récord: 586 mil 449 pesos. Vaya regalo.
En cambio aquella persona encajonada en el salario mínimo tendría que trabajar 558 años, es decir 5 siglos, para igualar el aguinaldo de los ministros.
Esta situación, analizada por el economista investigador de la UNAM, Alfonso Bouzas Ortiz, refleja la realidad de un país con una burocracia bien pagada y pueblo mal atendido.
En ese rango andan los aguinaldos de diputados y senadores. Los primeros recibieron alrededor de 140 mil pesos de gratificación, los segundos 234 mil pesos.
También reciben el apoyo económico para gastos personales, atención médica, etc. Cuando se retiran del empleo, las pensiones, obvio, son mayúsculas.
Así pues, la fábrica del gobierno para hacer dinero trabaja arduamente en esta temporada de regalos.
¿Y los gobernadores? Pues estos virreyes no se quedan atrás en materia de aguinaldos. Como ellos hacen lo que les viene en gana, se reparten el botín que representa el erario, sin ningún obstáculo.
En este renglón las gratificaciones para 30 gobernadores casi llegan a los cuatro millones de pesos, aunque cinco de ellos concentran un tercio de este monto.
La lista de mandatarios con el aguinaldo más alto lo encabeza el perredista Arturo Núñez, de Tabasco, con 486 mil 954 pesos; el panista Miguel Márquez, de Guanajuato, con 310 mil 959 pesos; el priista Aristóteles Sandoval, de Jalisco, con 276 mil 991 pesos; los otros dos son el priista Egidio Torres, de Tamaulipas, con 252 mil 414 pesos; y el tricolor Carlos Lozano de la Torre, de Aguascalientes, con 240 mil 989 pesos.
En el tema de aguinaldos, los gobernadores de extracción perredista, panista o priista están cortados por la misma tijera.
El FÁCIL ARTE DE LEGISLAR
En el asunto de los privilegios, en el Congreso tienen los recursos económicos suficientes para realizar su tarea legislativa de manera descansada y sin apuros.
Para tal fin cuentan con asesores en diferentes materias que ayudan a los senadores y diputados a entender los contenidos de las reformas a las leyes que les caen en las manos. Para ese desempeño legislativo, en ambas Cámaras entre 2012 y 2016 “se habrá gastado en asesores 8 mil 678 millones de pesos”.
Los beneficios de esas “asesorías” también incluyen a hijos y choferes, etc.
¿Un ejemplo de lo anterior? Va. El chofer del senador Carlos Romero Deschamps, líder del Sindicato Petrolero, reportó a su chofer como asesor con un salario de 20 mil pesos mensuales.
Por cierto, se planteó una iniciativa para reducir el número de diputados y senadores en el Congreso.
Seguramente esa proposición no fue motivo de regocijo en los partidos políticos. La idea tenía como meta desaparecer a los diputados plurinominales, esos que llegan a San Lázaro sin hacer campaña política, basta con la designación de la cúpula partidista.
En la Cámara de Diputados el número de legisladores es de 500, no sería mala idea reducirlo a 250. El ahorro en el subsidio económico sería cuantioso.
¿EN QUÉ MUNDO VIVE EL LÍDER PANISTA?
Los dirigentes panistas en el poder pierden el piso, se salen de la cruda realidad cotidiana.
El líder de Acción Nacional, Ricardo Anaya, refleja que vive en otro mundo.
Por lo menos no se da cuenta que la sociedad mexicana está harta de políticos demagogos sin ningún interés de escucharlos.
Esto viene a cuento, porque Anaya presentó una iniciativa para que los líderes nacionales de los partidos políticos debatan cada mes para transparentar, entre otras cosas, lo que cada partido piensa y hace.
Es de reconocer la osadía del panista, que con el intercambio de puntos de vista con los otros dirigentes lo que busca son reflectores que lo ayuden para reafirmar su posición de liderazgo para lo que se ofrezca, lo que vendrá.
En esos debates, el gran perdedor sería Anaya porque a quien convencerá de que los presidentes panistas, Fox y Calderón, no supieron gobernar. El primero no hizo el cambio que México esperaba; y el segundo inició una guerra contra la delincuencia organizada con más de cien mil muertos, sin incluir los miles de desaparecidos. En fin, Anaya es un joven líder que bien podría dirigir su fortaleza física e inteligencia para mejores causas.