Mariguana y debate sobre su legalización
¬ AAPAUNAM jueves 3, Dic 2015AAPAUNAM INFORMA
Jorge Delfín Pando
El consumo de drogas, tanto ilegales como legales –tabaco y alcohol– es potencialmente perjudicial para la salud, sobre todo en grandes cantidades. El uso de mariguana (cannabis) por tiempo prolongado puede ser causa de diferentes alteraciones pulmonares y metabólicas, así como de trastornos mentales, estos últimos principalmente en personas menores de 18 años de edad, en quienes existe una diferencia significativa entre desarrollar o no dependencia a la droga, prevalencia que se estima en 10%.
Señala el doctor Wáscar Verduzco Fragoso, médico psiquiatra y psicoterapeuta, profesor de la Facultad de Medicina de la UNAM y jefe del Departamento Clínico del Hospital de Psiquiatría “Dr. Héctor H. Tovar Acosta” del IMSS, que en vista de que durante los últimos meses se han presentado planteamientos sobre la despenalización de su uso, para ello, el gobierno federal ha llamado a la realización de un debate nacional sobre el tema, enfatizando en la importancia de la discusión sustentada científicamente.
La misma postura asumió el Senado de la República al señalar que la regulación resultante del debate sobre su legalización deberá estar fundamentada en estudios científicos, para lo cual resolvió crear un “Consejo Técnico para las Alternativas de Regulación” integrado por 16 instituciones, entre ellas, la Universidad Nacional Autónoma de México, la Academia Mexicana de Ciencias, el Colegio de México, el Centro de Investigación y Docencia Económicas, el Instituto Nacional de Salud Pública y la Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior.
Por tanto, se debe tomar en consideración, previo a cualquier normatividad al respecto, el impacto sobre la salud, sobre todo, en sectores vulnerables de la población, como lo son niños y adolescentes, entre otras razones porque el neurodesarrollo concluye aproximadamente a los 21 años de edad.
Explica el médico psiquiatra, que el -tetrahidrocannabinol- es el principio activo de la mariguana, responsable de sus propiedades adictivas, por lo que en el organismo de los seres humanos se encuentran presentes receptores endógenos para cannabinoides con diferentes funciones, entre ellas, regulación de colesterol y triglicéridos, del dolor y de las emociones, lo que explica los efectos del consumo de cannabis, también presentándose lentificación del pensamiento, del lenguaje y de las funciones motoras; la intoxicación aguda puede provocar ataques de pánico y su consumo crónico puede llevar al llamado ”síndrome amotivacional”, así como aumentar el riesgo de desarrollar esquizofrenia.
Por otro lado, se ha “medicalizado” el uso de la mariguana debido a que estudios muestran evidencias sólidas en casos de glaucoma, SIDA, algunos tipos de epilepsia y de enfermedades de la colágena, entre otros, por tener acciones antiinflamatorias, analgésicas y antioxidantes, así como antieméticas en pacientes sometidos a quimioterapia, pero se requiere realizar estudios comparativos con fármacos ya aprobados por las autoridades sanitarias para estos rubros con el objetivo de comprobar esas propiedades terapéuticas.
En consecuencia, la regulación de la mariguana para su producción, venta y consumo es prioritaria por ser la droga de mayor consumo en nuestro país; considerando que no por prohibir se evita su consumo.
Previo a su despenalización se debe escuchar a todas las voces y acompañarse de una amplia estrategia de información y difusión sobre sus potenciales daños a la salud.
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