CNDH, ni tan tontos
Francisco Rodríguez martes 24, Ago 2010Índice político
Francisco Rodríguez
CIERTO. HAY EN la fallida administración una intentona por desprestigiar a los organismos defensores de los derechos humanos. Directo como es, el hoy ex ocupante de la Secretaría de Gobernación, Fernando Gómez Mont, develó en unas palabras lo que en Los Pinos, en los cuarteles de Genaro García Luna y muy probablemente en los del general Galván Galván y el almirante Saynez Mendoza piensan de ellos, “tontos útiles” de la delincuencia…
Pero resulta que tontos no son. Al menos quienes, al lado de Raúl Plascencia, se desempeñan en la paragubernamental Comisión Nacional de los Derechos Humanos.
Una denuncia los exhibe como “esclavos de las cuotas y de los cuates”, pues los denunciantes señalan que “las principales posiciones de la CNDH las ocupan personajes mediocres e improvisados recomendados por senadores de uno y otro color que ungieron a Plascencia como presidente de la CNDH”.
Enlistan así al tercer visitador general, Daniel Romero Mejía, a quien señalan como recomendado del senador también bajacaliforniano Castro Trenti y del polémico ex alcalde de Tijuana, Jorge Hank, así como a la cuarta visitadora general, Teresa Paniagua Jiménez; al secretario ejecutivo, Luis Ortiz Monasterio; al oficial mayor, Malcolm Alfredo Hemmer Muñoz y todos sus directores generales cual parte de la “cuota” pagada al senador Manlio Fabio Beltrones.
“El novel director general de la delicadísima área encargada de agravios contra periodistas, Juan Pablo Piña Kurczyn, es ni más ni menos que hijo de una consejera de la CNDH, Patricia Kurczyn, único mérito personal. Patricia Kurczyn también recomendó a un sobrino para que cobre en la CNDH. Kurczyn, en el Consejo de la CNDH, es la más devota y expresiva defensora de Plascencia en las agrias discusiones con consejeros realmente independientes como Miguel Carbonell, Ricardo Sepúlveda, Rafael Estrada y Fernando Serrano Migallón. Al interior de la CNDH existe una abierta y burda cruzada en contra de Carbonell por no ser abyecto a los caprichos de Plascencia. No lo han podido “cooptar”. Lo están orillando a renunciar”, se señala en la denuncia.
Ahí mismo se lee que en la Secretaría Ejecutiva “trabajan” la hija de Castro Trenti y la del profesor José Luis García Mercado, secretario privado de Beltrones, como antes lo fuera del extinto Fernando Gutiérrez Barrios.
Se apunta, asimismo, que la hija y el yerno de Héctor Fix Zamudio también cobran en la CNDH.
Pero eso no es todo. De acuerdo a la imputación, “en la presidencia, ‘trabajan’ el hermano (dedicado únicamente a los asuntos personalísimos de Plascencia como sus propiedades y sus cuentas personales) y la cuñada del primer visitador general, Luis Refugio García López Guerrero, en funciones de ‘vicepresidente’ como a él le gusta presumir…”.
Apuntan que quien realmente manda en la CNDH es precisamente García López: “Su nueva secretaria particular, sin experiencia alguna, es sobrina de Isabel Miranda de Wallace, quien fue la única que propuso a Plascencia en el Senado de la República.
“El secretario técnico del consejo, un oscuro personaje, es fiel personero de García López y su prestanombres de una importante propiedad en Tlaxcala.
“El vicepresidente de la CNDH, García López, es de tal fatuidad y prepotencia que ahora se transporta en un flamante BMW serie 5 blindado, propiedad de la CNDH, vehículo más lujoso que el destinado para el mismo Plascencia.
“A García López se le identifica como aquel personaje ampliamente cuestionado y denunciado por propios y ajenos (incluso en los medios) en el proceso de selección de sucesor de José Luis Soberanes, quien utilizó toda la estructura y amplios recursos financieros de la Secretaría Técnica del Consejo que entonces encabezaba, para impulsar las espurias aspiraciones de Plascencia, quien por cierto falseó su oriundez…
“Luis García López tuvo en la nómina al secretario técnico de la comisión senatorial encabezada por Rosario Ibarra de Piedra como espía y manipulador del proceso que favoreció a Plascencia.
“Hoy, la CNDH obedece únicamente a intereses personales, económicos de Plascencia y García López,y oscuras y perversas manos que nada tienen que ver con el respeto a los derechos humanos”.
Tontos tontos no son, como se aprecia.
Ahora qué ¿útiles?
Índice Flamígero: En una ampliación de su denuncia ante los medios se da a conocer el costo del vehículo en el que se transporta Luis Refugio García López Guerrero: “… el flamante BMW que conduce el ‘vicepresidente’ de la CNDH en funciones de primer visitador general tiene las placas 442TWA, a nombre de la CNDH, con un valor de factura de $714,783.00 pesos. Bonito regalo de Plascencia a su ‘segundo’, ¿no?”.
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