Nosotros los inexpertos
¬ José Antonio López Sosa viernes 21, Ago 2015Detrás del Poder
José Antonio López Sosa
Cuando nos atrevemos a quejarnos -periodistas y ciudadanos-,. por la devaluación que estamos padeciendo en México, de inmediato surgen algunos eruditos en economía y muchos analistas promotores del gobierno.
Las explicaciones son amplias, que no es devaluación y se llama depreciación, que no es síntoma de un retroceso económico, que es un mal que aqueja al mundo entero, incluso que este fenómeno está haciendo más atractivo a México.
Fuera de los números macroeconómicos y de la comodidad de los escritorios del gobierno, la realidad para los ciudadanos de a pie resulta desastrosa con la devaluación del peso.
“Sólo los que viajan al extranjero lo padecen”, dicen otras voces también como si quien permanece permanentemente en México no sufriera las consecuencias del dólar cotizándose sobre los 17 pesos la tarde de ayer.
Si somos un país dependiente económicamente de los Estados Unidos y la moneda de aquel país es el dólar, ¿cómo no va a afectar a los ciudadanos una devaluación de esta envergadura?, con elementos silvestres en economía sencillamente cada peso que ganamos vale menos cada que el dólar sube su paridad.
Por coincidencia o no, los gobiernos priístas en nuestro país han sido partícipes o testigos de devaluaciones monumentales desde los años setenta y siempre el discurso ha sido el mismo: atraerá inversión, los beneficios se verán después, está pasando en el mundo entero, los pesimistas miran esto como desastre, etcétera.
¿Hasta dónde llegará la cotización del peso?, es una incógnita que todos los días crece, mientras los precios de prácticamente todo lo que adquirimos se basa en valores internacionales, hecho que los hace incrementarse casi de inmediato cuando el peso de devalúa.
Nosotros los inexpertos, somos los que sufrimos la devaluación escuchando alegóricos discursos del gobierno y sus incondicionales.
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