Confía CEESP en que reformas eleven ingresos en los hogares
Nacional* lunes 20, Jul 2015- Mayor inversión
Los empresarios aseguran que urge facilitar la instrumentación de las reformas estructurales para que se eleve la inversión y el empleo, y así mejorar el ingreso de los hogares mexicanos.
El Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP) destacó que es necesaria la disponibilidad de autoridades y empresas de hacer ajustes a las políticas públicas que permitan un desempeño más eficaz del aparato productivo del país.
Por ello, sugirió revisar la reforma hacendaria, así como la energética o cualquier otra, y hacer cambios si así se requiere, será un factor clave en el impulso económico.
Asimismo, es fundamental que las instituciones que se encargan de establecer las leyes y aplicarlas lo hagan con mayor eficiencia, de tal manera que no haya posibilidad de generar un ambiente de incertidumbre para el capital.
Esto, luego de que recientemente se publicaron los resultados de la Encuesta Nacional de Ingresos y Gastos de los Hogares (ENIGH) 2014, que mostraron que el ingreso corriente total trimestral de los hogares tuvo una caída real de 3.2 por ciento respecto a la encuesta del 2012, dentro del cual el ingreso corriente monetario se contrajo en 1.9 y el no monetario en 7.9 por ciento.
En este entorno, la ENIGH identificó un universo de 75 millones 330 mil 247 perceptores de ingresos, de los cuales la mayor proporción se concentra en los niveles salariales más bajos.
De acuerdo con los datos, los perceptores que reciben hasta un salario mínimo representaron 32.3 por ciento; si se suman los perceptores que reciben hasta tres salarios mínimos, el porcentaje se eleva hasta 78.7 por ciento, lo cual implica que quienes integran los niveles de salarios superiores a tres salarios mínimos solo representan 21.3 por ciento.
La ENIGH también indicó que en 2014 el gasto corriente monetario de los hogares se contrajo en 3.7 por ciento, respecto al 2012 y a su interior, las transferencias de gasto fueron las que presentaron mayor pérdida, con una caída real de 24.3 por ciento.
Además, hubo una disminución de 11.8 por ciento en el gasto en vestido y el canalizado a cuidados personales, que disminuyó 5.5 por ciento; en tanto, el gasto en vivienda y combustibles fue el único rubro que tuvo un resultado positivo al aumentar 2.9 por ciento.
“En un contexto en el que la situación de los hogares no muestra mejoras importantes en materia de ingresos, es claro que su cautela para gastar se incrementa, y eso simplemente se refleja en un menor dinamismo del consumo”.