Presupuesto Base Cero, una tarea de largo plazo
Roberto Vizcaíno jueves 2, Jul 2015Tras la puerta del poder
Roberto Vizcaíno
- Ya se avanzó en evitar la duplicidad de programas que absorben gran parte del presupuesto
- La deuda pública de México asciende a los 500 mil millones de euros
- Los diputados que llegarán en septiembre tienen el reto de informar más a los mexicanos
La Secretaría de Hacienda entregó a la Cámara de Diputados en estos días la Estructura Programática del Proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación 2016.
Lo hizo, a pesar de saber que los diputados que recibieron el documento nada pueden hacer porque ya se van, y que los que lo tienen que aprobar entrarán hasta el 1 de septiembre.
El documento es en sí el inicio del procedimiento para procesar el llamado Presupuesto Base Cero, que no es otra cosa que programar el gasto público del próximo año, como si todo lo que se vaya a hacer fuesen programas nuevos.
Hay quienes afirman que hacer tal cosa es imposible, pues existen compromisos irrenunciables e inmodificables del gobierno, como es el gasto en obras en proceso, o en seguridad pública, deuda, pensiones y jubilaciones, salud y educación así como las aportaciones y participaciones estatales, o los programas de apoyo a ahorradores y deudores de la banca, entre otros.
Se sabe que para readecuar parte de estos gastos, el propio secretario de Hacienda, Luis Videgaray y quienes integran su equipo, han visitado prácticamente a todos los gobernadores y han hablado con ellos varias veces a fin de convencerlos de entrarle a los recortes que vienen.
En este documento Hacienda —es decir Videgaray-, propone dar recursos a 851 programas presupuestarios, es decir 22.4% menos respecto de los programas de la Estructura Programática vigentes totales.
En lo que corresponde a los programas de los Ramos Administrativos y de Control Directo del gobierno federal bajarían de 818 a 605, lo que representa una reducción de 26%.
Esta reducción se logró con la fusión de 261 programas en 91; la resectorización de otros 7; la eliminación de 56 y la creación de 4 nuevos programas presupuestarios.
En fin, el inicio apenas de un ejercicio de largo plazo que requerirá en los siguientes años de reformas a leyes y reglamentos para ir disminuyendo el gasto público en áreas específicas.
Será sobre todo terminar con la duplicidad o más del gasto en programas similares.
APENAS EL 6%
Quienes saben de esto indican que la negociación para impulsar el Presupuesto Base Cero será difícil, ya que sólo se tiene cerca de 5.9% del gasto público total para modificar o redistribuir y las demandas de programas, servicios y obras son muchas.
Es importante señalar que el gobierno mexicano parte de este ajuste de una amplia experiencia de crisis y del mantenimiento de una fuerte estabilidad económica en lo macro y en lo micro.
Si se logra iniciar este proceso, el país tendrá garantizado un proceso de limpieza de sus finanzas durante los siguientes años.
GRECIA, AL FILO
Hoy mismo, Grecia es el mejor ejemplo de porqué México va bien en el ajuste de fondo de sus finanzas públicas.
Sin estar siquiera en una situación cercana, México no deja de rondar graves problemas de deuda pública y privada, tanto en lo internacional como en lo nacional.
Localizada en el sureste de Europa —con una superficie de apenas 131 mil 960 kilómetros cuadrados / nada frente al millón 972 mil 550 kilómetros cuadrados de México-, Grecia tiene una población de 10 millones 993 mil habitantes.
Mientras México está entre las primeras 15 economías del mundo, Grecia es la número 46 y su deuda pública asciende a los 317 mil 94 millones de euros, el 177, 10% de su PIB. La deuda per cápita asciende a casi los 29 mil euros por habitante.
En este contexto, Grecia acaba de dejar de pagar su deuda al FMI, lo cual la coloca en una posición cercana a la expulsión de la Unión Europea, con todas las consecuencias que eso pueda tener para su
futuro y su pueblo.
Al dejar el euro como su moneda, Grecia quedaría excluida de los beneficios comerciales y de financiamiento que le da el pertenecer a la UE.
Y estaría bajo la amenaza de embargos de sus productos y bienes para hacer frente a la enorme deuda que tiene con el sistema financiero europeo.
El desastre social sería de consecuencias impensables.
LA REALIDAD MEXICANA
La deuda pública en México asciende en este 2015 a los casi 500 mil millones de euros. Habría que aclarar que el gobierno de Felipe Calderón le heredó al del presidente Enrique Peña Nieto una deuda de 440 mil 426 millones de euros.
Los montos indican que la deuda global representa quizá el 50.08% del PIB de México, un alza de 3.74 puntos respecto a 2013, en el que la deuda era del 46.34% del PIB.
La evolución de la deuda pública en México desde 2004 fue de 253 mil 46 millones de euros a los casi 500 mil millones en 11 años.
Hoy, esta deuda representa 4 mil 38 euros por habitante. En 2013, apenas iniciada la actual administración, fue de 3 mil 716 euros lo que significa que el aumento de la deuda por habitante es de 322 euros en lo que va de este sexenio.
En 2004 la deuda de cada mexicano era de 2 mil 388 euros. Los números indican que en 10 años se duplicó.
MÁS INFORMACIÓN
El presidente de la Comisión de Vigilancia de la Auditoría Superior de la Federación, el perredista José Luis Muñoz Soria, consideró que a pesar de los avances alcanzados en la materia de transparencia, el Estado tiene el reto de incrementar sus esfuerzos de comunicación e información hacia los mexicanos.
Y reconoció que al Poder Legislativo le faltó voluntad para informar de sus operaciones y gastos a los ciudadanos y disminuir su opacidad.
Al participar en la conferencia “Ley General de Transparencia y Acceso a la Información. Una Política Pública”, varios expertos en transparencia indicaron que en los últimos 13 años, el IFAI (ahora INAI) ha acumulado alrededor un millón y medio de solicitudes de información.
Sin embargo, esta demanda proviene apenas del 10 por ciento de la población lo cual indica que el 90 por ciento restante no acude a este mecanismo de transparencia, indicaron.
Adriana Plasencia Díaz, especialista del Instituto Nacional de Administración Pública A.C., afirmó que diversas asociaciones civiles han calificado a los diputados y senadores como “uno de los poderes con más opacidad en México”.
Indicó que si bien las obligaciones señaladas para el Poder Legislativo en la Ley General de Transparencia y Acceso a la Información, constituyen un paso importante sería relevante proporcionar más información del trabajo legislativo en las cámaras federales y estatales.
“Se ha evaluado a los legisladores desde la perspectiva presupuestal, pero su trabajo en comisiones, su participación en proyectos de ley y puntos de acuerdo, y sus resultados, es información más trascendente para conocer por qué se votó por una ley y no por otra, o por qué se impulsó o limitó un punto de acuerdo”, subrayó.
Sería muy importante explicarle a los mexicanos que desde el Poder Legislativo se diseñan y construyen las políticas públicas que les benefician y afectan.