Vértigo postural paroxístico benigno
Elsa Rodríguez Osorio, Salud miércoles 1, Jul 2015Cápsulas de la salud
Elsa Rodríguez Osorio
- Hay que conservar la sangre del cordón umbilical
- La criptorquidia, una de las causas de infertilidad
El vértigo es una sensación de movimiento rotatorio del propio cuerpo o del entorno que nos rodea, cuando en realidad nada gira. Algunas personas confunden el vértigo con mareo; éste suele ser una sensación de vahído o una pérdida del equilibrio que desestabiliza a la persona, pero no implica la sensación de movimiento personal o del entorno. La Dra. Neil Shepard, Audiología de Mayo Clinic en Rochester, Minnesota, señala que varios trastornos pueden provocar vértigo, pero el más común es una afección llamada vértigo postural paroxístico benigno, que se presenta ante determinados movimientos; sentarse, voltear la cabeza o recostarse, por ejemplo. Este es el resultado del desplazamiento de unos cristales diminutos que hay dentro del oído interno. Esos cristales nos hacen sensibles a la gravedad y nos permiten mantener el equilibrio. Por lo general, los cristales se mantienen en su puesto gracias a una membrana gelatinosa que tiene el oído, pero cuando éste sufre algún daño, por lo general a consecuencia de un golpe en la cabeza, los cristales pueden desplazarse hacia otra parte del oído. Una vez fuera de su lugar, los cristales vuelven a la persona sensible a movimientos y cambios de postura que normalmente no le afectarían, desencadenando así el vértigo. El tratamiento implica recibir guía médica para que lentamente y a través de una serie de movimientos específicos de la cabeza, se reubiquen los cristales del oídio interno en un lugar donde ya no provoquen vértigo. En la mayoría de las personas, desaparece después de un solo tratamiento de reubicación de los cristales; sin embargo, en alrededor del 50% de quienes tuvieron un tratamiento exitoso el vértigo puede reaparecer al cabo de un año.
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La sangre del cordón umbilical se desecha en el 99% de los partos que se dan a nivel mundial, declara la Dra. Diana Pier, directora Médica de BCU (Banco de Cordón Umbilical). En éste se encuentran alojadas las células madre que tienen la capacidad de crear todos los tejidos, órganos y sistemas del organismo, por ello, es importante su conservación. Las células madre ayudan a tratar enfermedades hematológicas e inmunológicas, genéticas o que se desarrollan por factores externos. En México, uno de los pioneros en su preservación y estudio es el Banco de Cordón Umbilical (BCU), empresa 100% mexicana que almacena esta sangre desde 2001. Este banco de criopreservación de células madre, ha proporcionado con éxito terapia celular para tratar enfermedades como leucemias, anemias, cáncer y tumores malignos, entre otras. Estas células también están en investigación para tratar otras enfermedades como secuelas de la diabetes, infartos y otras que pueden presentarse en el trascurso de la vida. El primer trasplante con esta terapia celular fue en Francia, en 1988. Hasta hora se han realizado más de 30 mil trasplantes en todo el mundo y 350 en México.
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La criptorquidia -falta de descenso de los testículos- se presenta en el 3% de los nacimientos, y es una de las causas de infertilidad, explica la doctora Rosa María Vigueras, adscrita al servicio de Urología del Instituto Nacional de Pediatría. El porcentaje de casos se puede incrementar hasta 30%, cuando se trata de niños prematuros, debido a que no culminó el proceso del descenso testicular, en los últimos meses de la gestación. El testículo desciende de manera espontánea, durante el primer año de vida, cuando esto no sucede, se debe realizar una corrección quirúrgica, para evitar problemas de infertilidad en el futuro, así como el desarrollo de cáncer testicular. Estos pacientes tienen de 7 a 10 veces más probabilidades de desarrollar cáncer que el resto de la población. Para prevenirlo, el INP trabaja junto con el Instituto Nacional de Cancerología, para detectarlo durante los primeros años de vida. Otras causas de esta enfermedad son: bajo peso al nacer y fumar durante el embarazo, además de factores genéticos. La desinformación sobre este tipo de casos ocasiona que el paciente se atienda tardíamente. Las madres deben decirle a sus hijos pequeños que es muy importante revisarse los testículos cada vez que se bañen para detectar cualquier anormalidad, como el crecimiento acelerado de alguno de ellos o la aparición de alguna bolita.