Alejandro Fernández viste de romance el Auditorio Nacional

Espectáculos lunes 29, Jun 2015

• “El Potrillo” se presentó ante un lleno total, interpretando cada uno de sus éxitos en versiones para enamorar

Arturo Arellano

 

El Auditorio Nacional se vistió de romance con la presencia de Alejandro Fernández, quien ataviado en un elegante traje oscuro apareció en su escenario para interpretar cada uno de sus éxitos en versiones para enamorar a cada uno de sus fans, quienes sin duda se llevaron una noche para el recuerdo, cantando a todo pulmón desde “Cóncavo y convexo”, hasta “Como quien pierde una estrella”, desde las canciones para enamorar, hasta las que definen como “llegadoras”, disfrutando de principio a fin, cada paso y nota del cantante en el escenario, todo como parte de su gira “Confidencias”.

Todo comenzó con las luces y pantallas anunciando la presencia del charro mexicano, quien lejos de salir con el tradicional sombrero y pantalones entallados con adornos en dorado, apareció con un elegante saco en tonos oscuros y pantalón negro, interpretando para comenzar “Cóncavo y convexo” y “Se me va la voz”, que suficientes fueron para enloquecer a las casi 10 mil personas presentes, según cifras de los organizadores.

Luego de esto “El Potrillo” dijo “Muchas gracias a todos. Buenas noches, es un placer estar aquí, con mi familia y amigos, que son ustedes. Estamos de regreso con nuestras ‘Confidencias’ que ahora serán más reales”, y siguió con “Cuando digo tu nombre”, “Estuve”, “Qué voy hacer” y “Desahogo”, para lo cual sostuvo “Pasen una noche inolvidable, olvídense de problemas y cosas malas, para cantar y pasar una noche inolvidable”.

Continuó con “Hoy tengo ganas de ti” y “Te amaré”, para lo cual se acompañó de una banda compuesta de varios músicos y tres coristas, que sin duda enriquecían cada tema, elevándolo al romanticismo y al amor hecho canción, reflejado luego en “Tu amor me hace tanto bien”, “Te voy a perder” y “Canta corazón”.

Luego de una breve pausa, Alejandro Fernández reapareció en el escenario ahora sí, con el tradicional traje típico del charro mexicano, con el que galante se paseó por el escenario enamorando hasta al viento, para ello cantó “Qué lástima”, “Cascos ligeros”, “Abrázame”, “No”, “Que digan misa”, “Loco”, “Nube viajera” y “Tantita pena”, para luego de una salida en falso rendirle homenaje a su padre Vicente Fernández, haciendo algunos temas de su repertorio, concluyendo con el agradecimiento “Gracias a todos por venir, por hacer posible esta noche”.