Sin una revolución educativa, no habrá futuro
Víctor Sánchez Baños viernes 26, Jun 2015Poder y dinero
Víctor Sánchez Baños
¿Por qué se ha de temer a los cambios?
Toda la vida es un cambio.
¿Por qué hemos de temerle?
George Herbert (1593-1633) Poeta religioso inglés.
La reforma educativa no debe ser únicamente la evaluación de los maestros para obtener una plaza o un ascenso. Debería convertirse en todo un instrumento que va más allá de utilizar una herramienta de medición, sino de un paquete integral de mejoramiento del sistema educativo del país, a fin de lograr sustraer a millones de mexicanos de la mediocridad, mediante el conocimiento.
Es muy claro que hay fuerzas oscuras, donde los analistas y periodistas necesitamos convertirnos en traductores de señales de las clase política y los grupos de presión, a fin de averiguar de quiénes son las manos que mueven las marionetas que bloquean la reforma educativa.
Si hacemos una evaluación de los puntos más importantes de esas leyes aprobadas por el Congreso, incluso a nivel constitucional, encontramos que a un año de aprobarse, materialmente está inmóvil, congelada.
Uno de los puntos es la participación de los padres de familia en los planes y programas de estudio de la educación preescolar, primaria, secundaria y normal. El Ejecutivo federal, la SEP, pues, con su flamante secretario, Emilio Chuayffet, no los ha convocado.
A través del Instituto Nacional de Evaluación de la Educación el famoso INEE, a través de concursos, los maestros que demuestren mayores conocimientos y capacidades serán acreedores del ingreso al servicio docente, para la promoción a cargos de dirección o supervisión en la educación básica y media superior que imparta el Estado, lo que no se ha concretado y se continúan heredando las plazas en algunas regiones del país.
La evaluación obligatoria y periódica para todos los maestros del país, con el fin de asignarles el ingreso salarial, promoción, reconocimiento y permanencia en su plaza, no lo han realizado, por miedo a movilizaciones.
Otro punto se refiere al fortalecimiento de la “autonomía de gestión” de las escuelas públicas. Esto ya ocurría desde hace muchos años, ya que directores, maestros, alumnos y padres de familia participan en la limpieza y mejoramiento de mobiliario e infraestructura de los planteles, ante el desdén del gobierno de cumplir esa función. Así, es como hasta cobran cuotas, convirtiendo en escuelas privadas (aunque sea un pago simbólico) los planteles públicos.
Mínimamente han creado las escuelas de tiempo completo, con jornadas de 6 a 8 horas, donde se alimenta a los alumnos. Generalizarlo, con el obstáculo de maestros en algunas entidades, es un sueño imposible y, para el gobierno una pesadilla, ya que viene aumentando el presupuesto para educación unas décimas de punto porcentual, lo que en términos reales disminuye conforme al crecimiento de la población y la inflación.
Por cierto, otro mito urbano, se convirtió la venta de productos o alimentos “chatarra”, que aparentemente y por ley queda prohibida en las escuelas. Este es ahora negocio de los conserjes, quienes salen a la calle a comprar esos productos dañinos a la salud.
El fondo, definitivamente, es la configuración de los planes de estudio. Se necesita una auténtica revolución educativa, que no sólo transforme la operatividad de maestros y autoridades. De la mano de padres de familia, que obligatoriamente deberían estar involucrados, crear sistemas que den a los niños las herramientas suficientes para ser competitivos en el país y fuera de nuestras fronteras. Cualquier peso gastado es inversión que veremos resultados hasta dentro de 20 años, si iniciamos hoy mismo.
PODEROSOS CABALLEROS.- Salieron los políticos de izquierda a criticar que Pemex participe en la producción de películas, en base a la deducción del Impuesto Sobre la Renta, como lo establece la ley. Esa izquierda que pide financiamiento para sus filmes críticos al gobierno y a la sociedad mexicana (algo que no estoy en contra), se ve beneficiada y ahora lo critica. El cine es una manifestación artística que debe ser apoyada tanto por la IP como por el gobierno. Claro está, deben ser transparentes esas operaciones. Que Pemex siga promoviendo el cine. *** Donald Trump, el magnate que por negocios fallidos en México se lanzó contra su pueblo, ahora sufre otro descalabro en su bolsillo, cuando Univisión rompe con el concurso Miss Universo, por los dichos del empresario inmobiliario. Ahora acusa al gobierno mexicano por esa decisión empresarial. Trump es corto de miras. No se da cuenta que con insultos no se logran negocios.
RESPONSABILIDAD SOCIAL CORPORATIVA.- Grupo IMU, de publicidad exterior en mobiliario urbano, bajo la dirección de Gerardo Cándano, con su Programa de Manejo Responsable de Pilas de Desecho, logró una concentración récord de 600 toneladas de pilas. El Programa de Manejo Responsable de Pilas de Desecho que opera Grupo IMU en coordinación con el gobierno del Distrito Federal, que encabeza Miguel Ángel Mancera, busca evitar al máximo que los componentes tóxicos de pilas mal desechadas se liberen en las calles, coladeras y tiraderos donde generarían daños considerables al medio ambiente de la ciudad, proporcionando a los habitantes de la misma, una alternativa viable para la adecuada disposición de este tipo de materiales.
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