La paranoia de Chávez
Luis Muñoz viernes 6, Ago 2010Segunda vuelta
Luis Muñoz
Cierta ocasión un periodista le preguntó a un destacado literato si a él, que recorría el mundo, le gustaría morir en algún lugar “de preferencia”. La respuesta fue más o menos la siguiente: “Si por mí fuera, no me gustaría morir en ninguna parte”.
Lo mismo dirán seguramente aquellos de clara vocación pacifista: “No queremos guerras en ningún sitio del mundo”.
Y sin duda, ese es el sentir de los pueblos que hoy están bajo la amenaza de un conflicto armado. En ese horizonte se ven algunas naciones a las que no les ha servido de mucho los canales diplomáticos. Ni siquiera la reacción de la comunidad internacional que reprueba todo tipo de acciones intervencionistas, sea cual sea el pretexto.
Pareciera que el mundo está diseñado para las guerras y no la paz. Hoy los “tambores de guerra” suenan aquí, mañana allá.
Ahí están los temores -desde la óptica del presidente venezolano, Hugo Chávez, de que “algo” pretende Estados Unidos.
El primer vicepresidente de la Asamblea Nacional, Darío Vivas, dijo que las declaraciones del embajador designado de Estados Unidos para Venezuela, Larry Palmer, en el sentido de que la moral de las fuerzas armadas venezolanas anda por los suelos, “evidencian que ese país pretende crear un conflicto en la región”.
Desde luego, las reacciones de Chávez hay que tomarlas con reserva, pues el mandatario es muy dado a imaginar cosas y a suponer que el gobierno de Barack Obama pretende hacer la “guerra”.
En declaraciones al diario “El Universal” de Caracas, Padilla aseguró que “es impensable absolutamente un conflicto entre los militares de Venezuela y Colombia, por las relaciones históricas, comerciales y de hermandad tan fuertes que unen a ambas naciones.
Sin embargo, Darío Vivas insiste en que la intervención del recién nominado embajador de Estados Unidos en Venezuela es parte de la campaña “belicosa y armamentista” que, presuntamente, el gobierno norteamericano lleva a cabo dentro de la región latinoamericana.
Las declaraciones fueron transmitidas a través del canal del Estado, luego del anuncio de parte del cronograma de actividades que tiene el Partido Socialista Unido de Venezuela para el mes de agosto. “¿Qué quiere el gobierno de Estados Unidos? Que haya guerra, que no haya paz en la región”, dijo Vivas en referencia a la presencia de los buques norteamericanos en Costa Rica y la instalación de las bases militares en Colombia.
Luego añadió: “Nosotros tenemos aquí (en Venezuela) un producto que les interesa mucho: el petróleo, y están trabajando activamente para generar un conflicto que traiga como consecuencia ponerle la mano a la riqueza petrolera”.
Lo mismo que pretendió George Bush al atacar Irak.
A todo esto, el Larry Palmer dijo que la moral de las fuerzas armadas de Venezuela está, según informes, “considerablemente baja, particularmente debido a designaciones orientadas por lo político”.
Estas declaraciones fueron de inmediato refutadas por Hugo Chávez, quien expresó su molestia a Estados Unidos por las declaraciones del embajador designado por Washington en Caracas sobre “la baja moral” de las fuerzas militares venezolanas, comentarios que calificó como “inaceptables”.
En un comunicado difundido la cancillería de Venezuela señaló que el contenido de las declaraciones “constituyen un serio precedente de injerencia e intervencionismo” de un funcionario que “no ha pisado territorio venezolano”.
El ministro de Defensa de Venezuela, general Carlos Mata, aseguró que las fuerzas armadas están “más fortalecidas que nunca, en especial en lo moral”.
“Usted nos está agrediendo. Está agrediendo a toda la Fuerza Armada Nacional”, dijo el militar.
No hay que pasar por alto que Venezuela, que tiene en su presidente Hugo Chávez a uno de los más feroces críticos de Estados Unidos, es uno de los principales abastecedores de crudo de ese país.
MERCOSUR, AVANTE
Por cierto, hablando de esa región, el Mercosur concluyó en la ciudad argentina de San Juan la más fructífera de sus cumbres en materia integracionista, luego de esquivar coletazos del conflicto entre Colombia y Venezuela, país que aún espera entrar como socio pleno del bloque suramericano.
Después de seis años de negociaciones, Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay, los socios plenos del Mercosur, alcanzaron en esta cumbre un acuerdo definitivo sobre puntos clave del Código Aduanero común, además de acordar el libre comercio con Egipto.
Las partes resolvieron antiguas disputas sobre la distribución de la renta aduanera, así como el doble cobro del arancel exterior común, con lo cual dieron un paso vital hacia la consolidación del bloque, el mayor de América Latina.
Además, concedieron beneficios comerciales a Haití y fijaron las bases para la protección del acuífero Guaraní, una de las mayores reservas de agua dulce del mundo, que abarca a territorios de los cuatro países del bloque.
Fue un resultado “extraordinario, fantástico, que pone a todos muy contentos”, dijeron varias veces tanto la mandataria argentina, Cristina Fernández, como su colega brasileño, Luiz Inacio Lula da Silva, que en San Juan recibió de la presidenta la posta del liderazgo semestral del Mercosur.
Da Silva, quien recordó que es el mandatario “más veterano” en estas cumbres, insistió en que la cita de San Juan “es la más importante” desde la de diciembre de 1994 en la ciudad brasileña de Ouro Preto, cuando se sentaron las bases del proceso hacia la unión aduanera.
DEMANDA DE INCONSTITUCIONALIDAD
La Corte Constitucional colombiana comenzó a analizar una demanda de inconstitucionalidad contra el polémico acuerdo militar firmado entre Colombia y EU. por el que militares estadounidenses puedan usar bases en el país andino.
El presidente de la Corte Constitucional, el magistrad o Mauricio González, dijo que “comenzaron las deliberaciones” y que el alto tribunal tiene de plazo hasta el próximo 17 de agosto para emitir su fallo.
“Hoy no va a tomarse ninguna decisión. La semana entrante proseguirá la deliberación”, dijo González.
CHÁVEZ COARTA LIBERTAD
Según un comentario de Antonio Ledezma, la libertad de expresión está amenazada en Venezuela. Comenta que hace unos días se cumplió un año de la antidemocrática medida gubernamental del cierre de 34 emisoras de radio y dos canales de televisión regionales. Es muy preocupante el futuro de la libertad de expresión en Venezuela. Son numerosas las arremetidas del gobierno contra periodistas y dueños de medios. En tal sentido, dijo, hago un llamado a los venezolanos a defender la libertad y la democracia. Cosas insólitas que se ven en un país donde se dice que hay democracia, remató.
CALDERÓN SE PONE DURO
A ver si ahora sí. El presidente Felipe Calderón endureció su discurso en contra de las fuerzas políticas que han ignorado sus llamados para construir una política de Estado sobre seguridad, y advirtió que no se quedará a esperar a qué hora los intereses particulares dejan de estar por encima de los intereses nacionales, y que actuará acompañado por la sociedad para movilizar al país en busca del apoyo para resolver el problema de la delincuencia.
El llamado a la sociedad fue en el sentido de denunciar, incluso de manera secreta, vínculos de gobernadores, alcaldes o jueces con el crimen; y a los mejores ciudadanos, comprometidos con el país y con su comunidad y estén decididos a una defensa institucional, que se enrolen en las filas de la policía.
Ahí va a estar lo difícil porque ¿quién en estos momentos aciagos quisiera ser policía?
Los ciudadanos pueden estar todo lo comprometidos que quieran con el país, pero de qué garantías gozarán en esta lucha en la que hasta los más avezados agentes caen abatidos por las balas…
El llamado que hace el presidente Calderón está bien, pero también debería exhortar a los impartidores de justicia para que cumplan con su trabajo, pues de que sirve que se denuncie si los ministerios públicos no proceden como deberían.
Por otro lado, uno se pregunta “¿por qué las fuerzas políticas de este país han ignorado el llamado del presidente Calderón?”.
Ahí se los dejamos de tarea.