Cuatro de alternancia
Ramón Zurita Sahagún miércoles 17, Jun 2015De frente y de perfil
Ramón Zurita Sahagún
De los 12 estados que irán a la elección de sus nuevos gobernantes el año próximo, los de mayor interés son Veracruz, por todo lo que conlleva (habitantes, presupuesto, etc.) Oaxaca, Sinaloa y Puebla, por ser gobernadores por una alianza de fuerzas ideológicas contrarias entre sí, pero que vencieron sin muchas dificultades al partido tricolor.
Sin embargo, los restantes ocho estados tienen también un atractivo especial, ya que son gobernados en su totalidad por militantes del Partido Revolucionario Institucional.
En la mitad de esos estados se ha producido la alternancia y en los otros cuatro, se mantiene el PRI como partido dominante desde siempre. Aguascalientes, Chihuahua, Tlaxcala y Zacatecas, saben lo que es la alternancia. Durango, Hidalgo, Quintana Roo y Tamaulipas se mantienen inalterables como entidades de probada raigambre priísta.
Entre los primeros, Aguascalientes tuvo dos gobiernos consecutivos emanados de Acción Nacional, hasta que un priísta que fue vencido en todos sus intentos de elección popular los derrotó en las urnas. Claro que Carlos Lozano contó con ayuda externa, ya que el entonces gobernador panista Luis Armando Reynoso Femat fue un factor esencial en el regreso del PRI al gobierno estatal.
Priístas y panistas dirimirán en las urnas, ya que los partidos de izquierda no tienen penetración en el electorado, con todo y que varias de sus figuras son nativas de esa entidad, se rehúsan a ser candidatos, como es el caso de Jesús Ortega Martínez, el “Chucho” mayor.
Aguascalientes cuenta con buenos prospectos por parte de priístas y panistas. Por los primeros se cuenta a la ex alcaldesa capitalina Lorena Martínez Rodríguez, procuradora Federal del Consumidor y el senador Miguel Romo Medina, entre otros. Los panistas tienen en los senadores Fernando Herrera Ávila, coordinador de su bancada y Martín Orozco Sandoval.
La administración de Carlos Lozano de la Torre está bien calificada, pero en la elección federal del 7 de junio, el PAN ganó dos distritos federales y el PRI con las uñas sacó uno.
En Aguascalientes se corre el riesgo del fenómeno Querétaro con un gobernante bien calificado y los electores votando por la opción contraria.
Chihuahua también probó las mieles de la alternancia, aunque solamente fue una administración panista, la de Francisco Barrio Terrazas, ya que a la siguiente los priístas recuperaron el control del estado y no lo han perdido hasta ahora.
Su actual gobernador César Duarte Jáquez, gobierna en el filo de la navaja, ya que cuenta con denuncias públicas al por mayor, las que van desde corrupción, acumulación de bienes, pasando por la compra de un banco que es el que opera el gobierno a su cargo.
Los priístas salieron bien librados, ya que solamente perdieron uno de los distritos electorales en juego, con todo y que su gobernador tiene tantos taches.
Panistas y priístas serán los jugadores estelares en la disputa por el gobierno estatal y Gustavo E. Madero Muñoz es la mejor carta del blanquiazul, aunque se mantiene vigente el senador Javier Corral Jurado, mientras que Héctor “Teto” Murguía y la senadora Lilia Merodio Reza, representan opciones priístas.
Tlaxcala es uno de los pocos estados en los que la alternancia se ha producido en todos los marcos ideológicos. Gobernaba el PRI, ganó el PRD, consiguió el triunfo el PAN y regresó el PRI.
Claro que todos los candidatos triunfadores provenían del Revolucionario Institucional, ya que Alfonso Sánchez Anaya fue gobernador gracias las siglas del PRD, pero unos meses antes de la elección militaba en el PRI que no lo hizo candidato.
Héctor Ortiz Ortiz venció al priísta Mariano González Zarur cuando este fue postulado por el tricolor y a él se le marginó, por lo que aceptó vestir los colores del PAN y ganar los comicios.
Mariano volvió a competir en una segunda oportunidad y regresó a los tricolores al gobierno estatal, aunque los resultados no son satisfactorios.
González Zarur está considerado como un gobernante ausente, alejado de la ciudadanía, aislado totalmente, con escasa obra pública y vinculado a un pequeño círculo.
Con todo y ello, su partido, el Revolucionario Institucional, consiguió la victoria en los tres distritos federales del estado.
La elección del año próximo será sumamente competida y como es costumbre en Tlaxcala se espera que los candidatos de unos y otros surjan de los rompimientos y fracturas de los actuales militantes de alguno de los partidos. Dos mujeres se ven como prospectos atractivos, las senadoras Lorena Cuéllar y Martha Palafox.
Zacatecas es la entidad que marcó el rumbo para el triunfo de candidatos que al cuarto para las doce cambiaron de partido.
Ricardo Monreal Ávila marcó la pauta que luego siguieron una docena de militantes priístas que ganaron gobiernos estatales con otras siglas.
Monreal lo hizo con las siglas del PRD que se mantuvo en la siguiente administración con el triunfo de Amalia García Medina, aunque la siguiente victoria correspondió a un candidato que pagó con la misma moneda.
Miguel Alonso Reyes militaba en el PRD, partido que no lo hizo candidato, por lo que buscó las siglas del PRI y ganó por buen margen. El gobierno de Alonso Reyes se ha mantenido dentro de lo aceptable y el PRI reivindica victorias y mantiene ánimo de conservarla ante el desplome del PRD en el estado y de un panismo que no logra crecimiento.
Zacatecas puede ser la segunda entidad con un gobierno Verde si es que el senador Carlos Alberto Puente Salas, logra la nominación en alianza PVEM-PRI-PANAL.
En la siguiente entrega abordaremos los estados restantes con elección en 2016.