Historias y versiones
Ramón Zurita Sahagún viernes 5, Jun 2015De frente y de perfil
Ramón Zurita Sahagún
El domingo quedarán despejadas una serie de historias, rumores, leyendas y versiones, que vienen circulando desde el inicio del año electoral.
Será entonces cuando se confirmen o desmientan muchas de ellas, las más de ellas vinculadas a los resultados electorales.
En casi todas ellas se hablan de truculencias, de arreglos por debajo de la mesa, de provocaciones dirigidas, de fomentar la violencia, generar el caos y evitar, hasta donde se pueda la celebración de los comicios.
De los últimos señalamientos ya existen evidencias como son la violencia en diversos estados, la destrucción de la papelería electoral, los cercos en los comités distritales de algunas entidades.
El propósito desestabilizador obtiene, hasta el momento, resultados, habrá que ver si fructifican el domingo.
Se verá si las autoridades pueden frenarlos a tiempo, sin que esto llegue a rebasar los límites admisibles.
La violencia, la intolerancia y el abstencionismo son de los principales enemigos que enfrentará la jornada electoral para la renovación de la Cámara de Diputados, nueve gubernaturas y 17 congresos locales.
Pero hay una serie de pruebas que deberán pasar los comicios, los que van desde la necesidad de preservar los partidos políticos como medio de proyección de los programas de gobierno o dejar el paso a los candidatos independientes, que vienen empujando fuertemente.
La legislación electoral permite la participación de ciudadanos independientes que no sean cobijados por ningún partido y abrió ya la llave para que estos reciban apoyos económicos, a la par de los candidatos de los partidos que reciben subsidios del erario.
Se pondrá a prueba la nueva legislación electoral, la que se verá que tan estricta es en su aplicación y si los tribunales son capaces de respetar los resultados emitidos en las urnas y castigar a quien intenten vulnerar los preceptos legales.
Por lo pronto, existen algunas dudas sobre el papel que juegan estos organismos y los resultados que ofrecen, sobre todo cuando se aplican multas a los partidos de parte de uno de estos organismos y viene el otro, las elimina o reduce considerablemente.
La prueba de las urnas se antoja difícil para cinco de los partidos participantes en la contienda electoral, los que verán obtener, como mínimo, el tres por ciento de la votación total, de los sufragios legales.
Movimiento Ciudadano, Partido del Trabajo, Nueva Alianza, Partido Humanista y Encuentro Social, son los organismos políticos participantes con candidatos propios o en alianza que buscan mantener el registro, ya que en esta ocasión a pesar de competir en coaliciones, los votos de cada uno serán cuantificados y validados.
Hay una serie de versiones circulantes sobre el resultado que obtendrán los partidos y sus candidatos en los nueve estados que elegirán a sus nuevos gobernantes.
Las versiones no son nuevas, muchas de ellas se han sostenido y lo harán hasta conocer el resultado de los comicios.
Otras hablan de que los tres partidos considerados de resonancia nacional, estarían dispuestos a canjear triunfos alcanzados en algunos lados por otros que les sean más representativos para sus necesidades.
También se rumora que en el Distrito Federal, se hará hasta lo imposible para evitar que el Movimiento de Regeneración Nacional obtenga triunfos resonantes como pudieran ser las jefaturas delegacionales de Cuauhtémoc, Iztapalapa y Tlalpan o que alcance en número de posiciones al Partido de la Revolución Democrática en el Congreso local del Distrito Federal.
Los resultados electorales desmentirán la mayor parte de esos dichos, usados maliciosamente y difundidos para intentar enturbiar los comicios y desalentar la participación ciudadana.
De ahí, la necesidad de que los electores en el mayor número posible acudan a las urnas y voten libremente, para evitar todo tipo de triquiñuelas o que algunos vivales sean los ganadores de un proceso electoral que tiene empadronados a más de 83 millones de ciudadanos.