PAN, PRI y PRD en Michoacán
¬ Augusto Corro martes 2, Jun 2015Punto por punto
Augusto Corro
El Partido de la Revolución Democrática con su cardenismo rancio no representa ningún estimulo para el electorado. En las mismas condiciones se encuentra el Partido Revolucionario Institucional.
Solo el Partido Acción Nacional falta por sentarse en la silla del poder en Michoacán. Aunque ya tenemos conocimiento de la manera en que gobiernan los blanquiazules.
Los perredistas se encargaron de gobernar a los michoacanos durante dos administraciones. En la primera, Lázaro Cárdenas Batel no tuvo empeño suficiente para frenar a la delincuencia organizada. Se podría decir que las bandas de criminales no encontraron obstáculos para desarrollar sus actividades.
Le sucedió en el cargo el otro mandatario amarillo, Leonel Godoy, cuya estancia en el gobierno fue gris, anodina. Pasó de noche. Fue la mejor época de los cárteles de la droga como “La Familia Michoacana” y “Los Caballeros Templarios”.
Con los perredistas, los michoacanos vivieron años de terror derivados de la espiral de violencia y a la falta de seguridad.
RECAPTURAN A “EL GERBER”
La política cayó en una descomposición total que alcanzó su punto más importante con el gobernador priísta Fausto Vallejo.
Todo mundo sabe de las relaciones peligrosas entre las autoridades estatales y los capos templarios, encabezados por Servando Gómez Martínez (a) “La Tuta”.
Como es del conocimiento de todo mundo, los escándalos se sucedieron gracias a la “tutateca” asi llamada la colección de videograbaciones promovidas por “La Tuta” en las que aparecen con él un sinnúmero de políticos michoacanos.
El propio gobernador interino, Jesús Reyna García, estrechó vínculos con el delincuente y ahora ambos se encuentran en prisión.
También Rodrigo Vallejo “El Gerber”, hijo de Fausto Vallejo, alcanzó a formar parte de la “tutateca”. En el video apareció con desplantes de gran amistad con el líder templario. Las autoridades federales lo detuvieron y lo encarcelaron. Salió libre una temporada y ayer fue recapturado por la policía federal, en Morelia, Michoacán.
Por la tarde fue trasladado a las instalaciones de la Procuraduría General de la República, donde será interrogado una vez más sobre su amistad con el capo templario.
Tampoco la candidata panista Luisa María Calderón Hinojosa alcanzó a mantenerse libre de vínculos con “La Tuta”.
LAS ACUSACIONES
Resulta que en Michoacán, al cierre de campaña de su hermana Luisa María, el ex presidente Calderón acusó al PRI y al PRD de tener tratos con la delincuencia.
El dirigente nacional del PRI, César Camacho, no se tardó mucho en contestarle al ex mandatario michoacano. Dijo que la situación que se vive en Michoacán es culpa de Felipe.
Tras calificar de cínicas las declaraciones del panista, el líder tricolor manifestó que Luisa María negoció con Servando Gómez Martínez “La Tuta” la liberación de su primo Alfonso Reyes Hinojosa, “quien estaba secuestrado por un adeudo de 30 millones de pesos”.
Camacho también se refirió al “michoacanazo” acción que consistió en detener y enviar a la cárcel a funcionarios del gobierno perredistas y a alcaldes de todos los colores, que según Calderón tenían alguna relación con el crimen organizado. Tras varios meses en la cárcel los funcionarios quedaron libres porque no se les comprobó ningún delito.
Por cierto, Calderón, con la idea de convalidar su “triunfo” electoral que lo llevó a Los Pinos, decidió enfrentar a la delincuencia organizada y empezó por Michoacán, su estado. Sin la estrategia adecuada la iniciativa bélica no funcionó. Los cárteles de la droga se fortalecieron y las consecuencias de ese desatino aún se viven.
A las autoridades michoacanas se les fueron de las manos las riendas del poder y la población empezó a sufrir los estragos de la violencia e inseguridad. El tejido social se afectó con un sinnúmero de personas extorsionadas, secuestradas, asesinadas y desaparecidas; así como la formación de grupos de autodefensa con el propósito de defender sus vidas y propiedades.
En las elecciones del próximo domingo participarán los siguientes candidatos: Ascención Orihuela Bárcenas, del PRI; Silvano Aureoles Conejo, por el PRD; y Luisa María Calderón Hinojosa, representante del PAN.
De acuerdo con las encuestas, los aspirantes fuertes para ganar son Ascensión y Silvano, pues Luisa María cayó al tercer lugar.
EJEMPLO DE CORRUPCIÓN
Ya lo comentamos en otra ocasión en este espacio: la contienda electoral se transformó en un lodazal que, sin duda, llevará a la cárcel a varios aspirantes a cargos de elección popular.
¿Cuántos candidatos violaron la ley electoral? Seguramente miles. Aunque hay diferentes clases de delitos: unos más graves que otros. Algunos que rebasaron los topes de campaña; otros que se pasaron la ley por el arco del triunfo, etc.
Pero un caso singular nos llamó la atención. Resulta que Francisco Rojas Toledo, candidato panista a la alcaldía de Tuxtla Gutiérrez, Chiapas, lo videograbaron cuando recibía “moches” (doce fajos de billetes) de un empresario agradecido.
Ese hecho nos recordó a aquel dirigente de izquierda, René Bejarano Martínez, quien también fue filmado cuando el hombre de negocios, Carlos Ahumada Kurtz, le entregaba “grandes fajos de billetes”.
Lo anterior ocurrió en marzo del 2004. El escándalo dejó muy mal parada a la llamada izquierda.
En esta ocasión, le tocó a los panistas colaborar con el video de la corrupción cotidiana de los políticos. Supuestamente, el dinero que recibió Rojas Toledo se trata de un “moche” para financiar su campaña a la presidencia municipal de Tuxtla Gutiérrez. Será muy interesante saber que actitud asumirán las autoridades para castigar al panista “transa”.