Una sociedad se mide por la forma en que cuida a sus niños: TSJDF

Cd. de México viernes 17, Abr 2015

• “Defendiendo la niñez, se materializarán grandes triunfos”

El presidente del Tribunal Superior de Justicia del Distrito Federal (TSJDF), Edgar Elías Azar, dijo que las sociedades han entendido la vulnerabilidad en el que sus propias dinámicas colocaron a algunos grupos, como la niñez. Necesitar la protección que sólo los adultos saben y pueden dar, no hace a los niñas y niños tener menos derechos, ni menos inteligentes, ni afecta su capacidad de juicio.

Durante la inauguración de la VI Reunión de la Red Mexicana de Cooperación Judicial para la Protección de la Niñez, el funcionario dijo que esta obligación protectora cobra mayor importancia cuando hablamos del Estado en su función de vigilante y protector de los derechos de todos y particularmente de los más vulnerables.

“No permitamos que nuestra mirada se detenga en la niñez como un concepto socio jurídico; veamos al niño, en su cabal individualidad, para asumir las mejores condiciones cuando se ventilen juicios que les afectarán en sus derechos e intereses, en su capacidad de desarrollo e inclusive en su dignidad”, exhortó el  también presidente de la Comisión Nacional de Tribunales Superiores de Justicia (Conatrib).

Recordó que la Red Mexicana para la Protección Judicial de la Niñez, tiene el propósito de ser cauce  adecuado para el pleno cumplimiento en nuestro país de la Convención de Derecho Internacional Privado de La Haya.

“Nuestro jueces y juezas que hoy acuden a esta convocatoria serán los instrumentos silenciosos y modestos que harán posible  la vigencia de los propósitos nobles que la propia convención representa, en sus resoluciones darán la cara por México ante el mundo, serán nuestros emisarios y nuestros mensajeros, porque en cada resolución de un juez hay un acto que habla materialmente del Estado mexicano”.

Afirmó que si el Derecho se hubiera dictado de una vez y para siempre, las mujeres no votarían y no tendrían posibilidades de obligarse jurídicamente; las iglesias no contarían con personalidad jurídica; los niños y los jóvenes seguirían siendo tratados como retrasados mentales e inimputables; las naciones, bajo el mando de un concepto de soberanía entendido como muro, no podrían relacionarse comercialmente; sería válido el  papel del filibustero y del corsario, para legítimamente hacer presas de mar y aire; los vínculos matrimoniales serían hasta que la muerte separara a la pareja que ya no puede convivir.

“En el caso que hoy nos reúne y que nos unirá siempre, atendemos fenómenos sociales migratorios, de nuevas estructuras familiares, de movimientos relacionados también con las economías, con el comercio con muchas realidades que los adultos hemos creado y que tienen efectos necesariamente en nuestras familias y particularmente en nuestros niños, no podemos cerrar los ojos y pretender que no pasa nada”.

Afirmó que hablar de los problemas  de la niñez en el mundo genera pasiones, pero, sobre todo, “nos mueve a exigir pronta atención y decisiva solución”.

Finalmente, dijo que es un orgullo para el TSJDF ser sede de esta VI Reunión de la Red Mexicana de Cooperación Judicial para la Protección de la Niñez, ya que se ha vuelto pieza fundamental en las acciones de la Conatrib, “mientras más acciones emprendamos en pro de la infancia, habremos de marcar un cambio verdadero en aquellas políticas y prospectivas sociales… una sociedad se mide en la forma en la que cuida a sus niños”.