Sintaxis del autismo
Francisco Rodríguez miércoles 8, Abr 2015Índice político
Francisco Rodríguez
El gramático alemán Heinrich Gottfried Ollendorff desarrolló una técnica para el aprendizaje de idiomas que consistía en que, a una pregunta expresa sobre algún tema, se respondiera con otra pregunta, pero referida a otro asunto. Sin conexión.
Herr Ollendorf afirmaba que la anterior era una respuesta correcta, con la única condición de que estuviese bien expresada. A esto se le conoce en todo el mundo como el Método Ollendorff y, por lo visto últimamente, ha prendido entre los aprendices de política que padecemos en México.
Ya el legendario Humpty Dumpty —el huevo antropomórfico de las rimas infantiles inglesas— explicaba en una famosa caricatura que el dueño del poder tiene el derecho de imponer el valor de las palabras. Para los novatos, entonces, es imposible resistirse a la tentación de manipular el sentido de los mensajes, aunque incurran en cualquier despropósito.
Lo anterior explica, en parte, la catarata de palabras y declaraciones, en boletines y a capela, repetitivas e insulsas, que ha proferid políticos o —mejor dicho— aprendices de políticos, queriendo “bajarle ” a una masacre y a una catástrofe política de gran magnitud, con tendencia a seguir creciendo.
Es una pantomima total. Yerros por todos lados. Pontificadores de la tragedia; políticos sacados de sus sarcófagos, ahora con la varita mágica, buscando de nuevo las marquesinas; caifases rasgándose las vestiduras y echando la culpa a los demás; “líderes” de la sociedad civil; jovencitos en busca de afecto; publicistas desplazados; electricistas; maestros, todos quieren participar en el juego de “no importa lo que digas, con tal de que el mensaje tenga sintaxis”.
Gerifaltes lívidos, con cara de velorio, que acarrean a los padres de las víctimas en autobuses de redilas para hacerlos pasar la vergüenza de no obtener ninguna solución.
¿Por qué abren la puerta, sólo para decir que al fin ya se logró un acuerdo con los padres de los masacrados, dan lectura a un listado de diez puntos y se exponen a que, al mismo tiempo de esa lectura, los padres de las víctimas descalifiquen sus procederes infantiles?
Necesitan del rebumbio de una reunión que asesina todo el tiempo de los demás sin ningún sentido, para que les contesten que no tienen remedio, que llegaron a la tragedia, que, continuando con Ollendorff, “no busquen sólo en las fosas, sino ¿adónde irían si estuvieran vivos”?
Es que la gente se cansa, aplicándole la vía de la incompetencia. Frente a estos “talentos”, la gente se bloquea, se irrita y prefiere descalificarlos, antes de compartirles su dolor. ¿Usted cree que no tienen razón?
Funcionarios así queman las neuronas, le desconectan el switch al más pintado; frenan el menor interés; desactivan cualquier impulso vital o societario.
En el colmo, después de la reunión fallida, que disocia más al pueblo con la realidad y siembra mayor desconfianza… ¿qué cree usted? Pues que se aparece el “criminólogo” Pablo Monzalvo a desautorizar todas las investigaciones sin hipótesis que hace el gabinete de “seguridad”.
¿Y quién es Monzalvo?
Pues es aquél sujeto que socavó los presupuestos de la Policía Auxiliar, en favor del peculio de Marcelo Ebrard y de otros jefes de gobierno y hasta regentes de la antigüedad más próxima. Un experto zapador que acabó con las ilusiones de miles de familias del Distrito Federal y, claro, con sus ahorros. Eso es lo único que les faltaba. Utilizar un roto para un descosido.
¿Qué no tienen memoria?
¿Por qué poner en estos momentos, la Iglesia en manos de Lutero?¿Tanto daño nos merecemos, que ponen a los indiciados a opinar sobre asuntos que ellos provocaron? Y avísenle a Mondragón que se prepare.
Quienes hablan desconocen el Pacto Federal y la soberanía de los estados que lo conforman. Nombraron comisionado y gobernador en Michoacán. Lo hicieron, apenas, en Guerrero donde, al igual que en tierras tarascas, se disponen a designar a los encargados de la seguridad pública y la procuración de justicia.
Es la primera sesión del Congreso local de Guerrero luego de su nueva realidad: violencia y un nuevo gobernador. – ‘Fue una imposición’, confiesa un diputado. Nos pide guardar discreción. ‘Es que casi todos sentimos lo mismo. En privado los diputados lo dicen: ‘nos impusieron al nuevo gobernador’. En público sostienen: ‘Es una buena decisión. Le servirá al estado de Guerrero’. Todo en corto. Nada de comentarios en público.”. + + + Ahora hay en la calle criminales con recursos pecuniarios no sólo para sobrevivir, incluso para planear más abducciones. ¿Y el mensaje? Hay que secuestrar, el propio gobierno interviene para hacer efectivo el pago del rescate. Hace meses que en este espacio usted ha leído que “El Monje” —así lo llaman, burlones, en la PGR— y sus “acólitos” presumían logros. Lo mismo hacen en los estados donde prolifera el secuestro. Ahí dan por cerrados los casos, cuando el rescate es pagado por las familias de las víctimas. ¡Qué vergüenza!