Derroche de dinero
¬ Augusto Corro miércoles 8, Abr 2015Punto por punto
Augusto Corro
¿Qué son 54 mil pesos en las manos de un rico?, nada. ¿En manos de un pobre? Pues la solución de muchos problemas. Muchos con esa cantidad de dinero podrían iniciar un negocio. Para el Partido de la Revolución Democrática (PRD) esa cifra es una bagatela, algo que no tiene importancia.
La riqueza boyante de los amarillos quedó demostrada el domingo pasado en el arranque de campaña de Silvano Aureoles Conejo, candidato perredista a la gubernatura de Michoacán.
En Zitácuaro, donde se efectuó la reunión proselitista, la cúpula amarilla llegó a bordo de helicópteros, como si se tratara de un mitin de políticos del primer mundo, de un país sin carencias, lleno industrias, con sus fuentes de empleo cubiertas completamente.
Pero la realidad es diferente. Como se sabe, alrededor de 60 millones de mexicanos viven en la pobreza. Sin embargo, a los políticos parece no interesarles ni la miseria, ni las carencias de aquellos a quienes invitan a votar por sus candidatos el próximo 7 de junio.
Con el desparpajo de la indiferencia, la cúpula política, en este caso la del PRD, utilizó el helicóptero para asistir, puntual, al mitin de Aureoles Conejo. Claro, el dinero que gastan los candidatos no es de ellos, sino de los contribuyentes, no hay razón para cuidarlo.
Así, el domingo pasado, al dirigente del PRD, Carlos Navarrete, se le hizo tarde para llegar a la reunión del candidato Silvano y sin mayor sobresalto ordenó que le enviaran un aerotaxi para estar puntual en la cita. Se contrató al helicóptero por dos horas, servicio por el que se pagó 54 mil pesos.
“Voy retrasado”, dijo Navarrete en Toluca, para luego ordenar que le mandaran un aerotaxi. Sus órdenes y deseos se cumplieron al pie de la letra. Llegó el aerotaxi por el dirigente para trasladarlo a Zitácuaro, rápido y cómodamente.
Por si le interesa, estimado lector, las características del helicóptero, son las siguientes: modelo Eco Charly 130 T2, con capacidad de vuelo de hasta 23 mil pies de altura, con asientos de piel y sistema electrónico antivibración, único en su tipo”.
El mismo aerotaxi fue utilizado por el gobernador de Guerrero, Rogelio Ortega, para asistir al acto de inicio de campaña de Aureoles Conejo. El mandatario guerrerense no perdió la oportunidad para colaborar con una frase para la inmortalidad: “cuando tengo que caminar camino” y “cuando tengo que trasladarme en vehículos modernos también lo hago, porque en el poco tiempo que tengo como gobernador, tengo mucho qué hacer”.
Y concluyó que la gente de izquierda se traslada en helicóptero “cuando es necesario”. Me acuerdo de la frase aquella de que quienes tengan perros que los amarren, los que no, no.
En fin, en Zitácuaro a un lado del mitin había hasta cinco helicópteros, según se publicó. Una de las naves, como informamos, transportó al gobernador de Morelos, Graco Ramírez.
El líder del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), Andrés Manuel López Obrador, dijo, al referirse al mismo tema, que los dirigentes del PRD son igual que los del PRI. Algo les sabrá.
¿UNA ADVERTENCIA?
Al menos 15 personas murieron y ocho resultaron heridas tras una emboscada de un grupo criminal contra un convoy de la Fuerza Única de Jalisco.
Las víctimas formaban parte de la Fuerza Única, principal órgano de seguridad en esa región. El hecho se registró a las 3 de la tarde cerca del pueblo de Soyatán, en la carretera que va de Guadalajara a Puerto Vallarta.
Ese acto llevará a las autoridades a observar con mayor interés lo que ocurre en Jalisco, entidad que últimamente vive el asedio de la delincuencia organizada, encabezada por el Cártel de Jalisco Nueva Generación.
Es posible que aún se esté a tiempo para controlar la espiral de violencia en Jalisco. Se deben tomar las medidas preventivas necesarias para evitar que se repitan casos como los registrados en Tamaulipas, Michoacán y Guerrero. La experiencia obtenida en esos estados debe servir para una mejor aplicación en el combate a los narcotraficantes.
La matanza de los uniformados de Fuerza Única es más una llamada de atención de las autoridades de los tres niveles: municipal, estatal y federal. Se trata de un aviso y una muestra de que la violencia amenaza con quedarse, en una entidad, hasta hace poco tiempo, tranquila.