Futbol y política
¬ Augusto Corro viernes 27, Mar 2015Punto por punto
Augusto Corro
Las selecciones de México y Brasil se enfrentarán en un partido de futbol soccer el próximo 7 de junio fecha de elecciones intermedias.
El solo hecho de saber la noticia provocó en el líder panista Gustavo Madero algo parecido a un desajuste emocional.
El político pensó que con ese hecho, se opacaría el interés de los mexicanos para presentarse en las casillas a emitir su voto.
Como se sabe, en la fecha mencionada se llevarán a cabo las elecciones que significan la renovación de la Cámara de Diputados, nueve gubernaturas, alcaldías, delegaciones políticas en el DF, etc.
Y la preocupación de Madero es tal, que su partido pidió al Instituto Nacional Electoral (INE) que intervenga para que se cambien la fecha del partido debido a que es un día de elecciones en el país.
“Nos preocupa y puede ser perverso que se organice un partido de futbol el 7 de junio, porque se puede ver agravado el desinterés, el desánimo y el abstencionismo. Se puede generar una mayor distracción de los ciudadanos ante las elecciones”, dijo el líder blanquiazul.
ANTECEDENTES PANISTAS
¿Es correcto el punto de vista de Madero? ¿Realmente se distraerá la atención de los electores? ¿Madero se cura en salud como se dice coloquialmente?
En lo que debe pensar el presidente panista es en el estímulo político para que los ciudadanos acudan a las urnas.
¿Son tan impopulares los candidatos panistas que temen ser derrotados por el interés de ver un partido de futbol?
Si los aspirantes a los cargos de elección popular reúnen las características que exige el electorado no habrá ningún obstáculo para votar por ellos. A cualquier hora los interesados se presentarán en las casillas electorales.
En cambio, si se trata de un candidato impuesto, que proviene de otro partido, como ocurre en los tiempos que corren, un vulgar desconocido, sin ideología, demagogo, etc., la población, con futbol o sin él, se abstendrá de emitir su voto.
Y en el PAN como en otros partidos políticos son pocos los aspirantes idóneos que participan en la contienda electoral.
En el blanquiazul, el desprestigio, el divisionismo y la lucha interna por el poder desdibujaron la imagen del instituto político. Lo mismo se puede decir de las demás organizaciones políticas que integran la denominada plutocracia.
GOBIERNOS PANISTAS
En la sociedad mexicana siguen presentes los dos sexenios de los gobiernos panistas que nada hicieron por sacar a México del atraso en que se encuentra.
Vicente Fox se negó al cambio. Felipe Calderón se enfrascó en una guerra fallida contra la delincuencia organizada.
Los legisladores panistas se lucen con sus escándalos que van desde los “moches” hasta las fiestas con sexoservidoras, etc.
El PAN vive uno de sus peores momentos. A lo anterior debe sumarse la pugna entre el propio Madero y el ex presidente Calderón. Ambos inmersos en una lucha por poder.
¿Ante esa situación tan decepcionante, algún militante panista dejaría de ver el juego México-Brasil para presentarse en las casillas y emitir su sufragio? Realmente, ¿Cuál es la verdadera preocupación de Madero?
Pienso que el partido entre México y Brasil en nada afectará la justa electoral del 7 de junio.
A Madero, debe preocuparle el manejo que hace el Partido de la Revolución Democrática (PRD) que almacena despensas para cambiarlas por votos el día de las elecciones, hecho que se descubrió en la delegación Cuauhtémoc.
CAMBIOS EN LOS PARTIDOS
En estas elecciones los partidos estrenarán nuevos militantes en algunas candidaturas.
Aunque no se sabe bien a bien cuál es la línea ideológica de los aspirantes. Hasta hace pocos días militaba en un partido diferente al que ahora lo registra como su representante.
Parece que la ideología y los principios de los partidos se uniformaron. Como están las cosas ya no se nota la diferencia en la manera de pensar de la izquierda de y la derecha. Dan la impresión que fueron cortados por la misma tijera. Salvo las excepciones de rigor.
Por ejemplo, en el Movimiento Ciudadano, refugio de grillos, ya se encuentran Marcelo Ebrard, antes perredista, y Manuel Espino, ex panista de hueso colorado. Con la ventaja de que ya tienen asegurado su lugar en la Cámara de Diputados. Armando Quintero, ex perredista, irá como candidato a la delegación Iztacalco.
Otro ejemplo es el de la ex perredista Polimnia Romana fue ungida como candidata a la delegación Álvaro Obregón, por el PRI-Verde, que dio como pretexto de su cambio la continuidad de su proyecto político que logrará en su nueva organización política.
Se mudaron de un partido a otro sin el menor rubor. Como quien cambia de chamba en busca de mejor salario y prestaciones.
Al fin y al cabo, algunos partidos se manejan como negocios particulares.