Tolerancia a “vagoneros”
Luis Muñoz miércoles 18, Mar 2015Segunda vuelta
Luis Muñoz
Para el diputado Orlando Anaya, del grupo parlamentario PAN en la Asamblea Legislativa del DF, no está claro si es permisibilidad o permisividad cuando se refiere a la tolerancia del gobierno a la presencia de “vagoneros” y “bocineros” en el Metro.
¿Permisibilidad o permisividad?
Aclaremos: Permisividad significa ‘tolerancia excesiva’ (‘que permite o consiente’), mientras que permisibilidad es la ‘posibilidad de ser permitido’.
¿Cuál es el caso?
Sin duda lo primero. El legislador lo dice claro: hoy los vagoneros y bocineros “operan con toda tranquilidad bajo la mirada de las autoridades”.
A juicio del diputado Anaya eso es un indicador de que la “permisibilidad”, así lo maneja él, tiene fines electorales. Por tanto, pide a las autoridades el retiro de los vendedores con la finalidad de evitar que este sector sea utilizado a cambio de votos.
Claro que no está descubriendo el “hilo negro”.
Desde siembre se ha sabido que las autoridades utilizan a los comerciantes a cambio de apoyo.
Los líderes de los comerciantes son los responsables. Ellos son los que negocian en lo “oscurito” o a espaldas de sus agremiados el rol que les toca jugar en este juego.
Orlando Anaya advierte que los “vagoneros” son usados con fines partidistas, los dejan trabajar a cambio de votos o filiaciones para después ser extorsionados por la misma autoridad.
Por eso este fenómeno social se ha convertido en un círculo vicioso al que el gobierno no está dispuesto a poner fin.
¿Qué se necesita para revertir esta situación?
Una fuente de empleo digna, que les traiga beneficios como seguridad social y otras prestaciones, además de asegurar un mejor futuro para sus familias.
No estaría del todo mal que los “vagoneros” ejercieran el comercio dentro del STC si su actividad estuviera regulada. Pero no lo está. Por lo tanto, en lugar de ser algo benéfico para los usuarios, resultan un problema porque lo menos que ocasionan es contaminación auditiva (en el caso de los bocioneros).
El diputado del GPPAN recordó que han pasado 459 días desde el incremento del precio del boleto de tres a cinco pesos, alza que se dio a cambio de varias promesas de mejora, entre las que se encontraba el retiro total e inmediato de “vagoneros”, objetivo que a la fecha no se ha cumplido…
FALTAN OPCIONES CULTURALES
No hay duda de que la cultura y el arte son (o deben ser) una de las bases de la sociedad. Pero de eso a que “forman parte de las preocupaciones y soluciones actuales”, como dice el diputado Rosalío Alfredo Pineda Silva, está por verse. De sobra se sabe que a la cultura de falta mayor impulso.
El legislador presentará dos iniciativas para reformar la Ley de Fomento Cultural del Distrito Federal, y, al respecto, comentó que es a través de la cultura y el arte como los ciudadanos expresan sus sentimientos, ideas y propuestas de cambio.
“Como personas, como ciudadanos, y en mi caso como político, considero que es nuestra responsabilidad preocuparnos por la cultura y las actividades artísticas de la ciudad; los niños y jóvenes de la capital gustan y necesitan de un mayor número de opciones culturales”, destacó.