La complicada vida de algunos políticos
Roberto Vizcaíno martes 24, Feb 2015Tras la puerta del poder
Roberto Vizcaíno
- Ante sus fracasos por reinsertarse en la política mexicana, Margarita Zavala dice que va por la Presidencia en 2018
- René Bejarano fue dejado al margen en el reparto de candidaturas en el Distrito Federal
- ¿En verdad habrá quien crea que el comentario del papa Francisco fue algo inocente?
- Las cosas de la vida dicen que no hay tiempo que no se cumpla. Para ser más directos: a todo le llega su momento
De eso nadie se salva.
Y el domingo pasado a René Bejarano y su corriente Izquierda Democrática le llegó el ajuste: de haber tenido el predominio de las estructuras territoriales en el Distrito Federal en los años anteriores, pasó ahora a una cuota mínima en el reparto de candidaturas en la capital.
La lógica que le aplicaron las otras corrientes -entre ellas la predominante Nueva Izquierda (mejor conocida como “Los Chuchos”), así como ADN, Foro Nuevo Sol, y Vanguardia Progresista esta última encabezada por Héctor Serrano, secretario General del Gobierno de Miguel Ángel Mancera-, fue simple: ID de Bejarano no alcanzó más que el 23 por ciento en las elecciones últimas de dirigentes nacionales y eso le corresponde.
Así que de las 40 candidaturas a asambleístas y 16 para delegados, le dejaron 6 y 3, respectivamente.
Por supuesto que al señor Bejarano el reparto no le gustó. Y despotricó. Acusó al jefe de gobierno del DF, Miguel Ángel Mancera de ser él quien decidió el reparto de candidaturas.
Independientemente de que Mancera haya tenido algo que ver con eso, el caso es que el porcentaje alcanzado por Izquierda Democrática -que es la corriente de Bejarano-, no logró en las elecciones del pasado 7 de septiembre organizadas y sancionadas por el INE una votación significativa.
Fue su propia capacidad de atracción la que le marcó sus propios límites en el reparto de candidaturas ahora.
Por supuesto, tampoco le gustó que Nueva Izquierda, es decir “Los Chuchos” -sus enemigos tradicionales al interior del PRD-, se llevaran la mayor tajada.
Pero bueno, pues así es la vida y ni modo. La siguiente aduana de Bejarano -a quienes muchos conocen como “El señor de las ligas”- es la elección federal y las locales del 7 de junio donde sus candidatos deberán obtener la mayoría si quieren ganar.
Es decir, poco y por demás difícil.
VAN DE NUEVO
En otro contexto y con otras razones, los Calderón-Zavala (es decir Felipe y Margarita) han emprendido un nuevo camino para su reinserción en la vida política del país.
En este proceso los Calderón-Zavala se han enfrentado durante los últimos meses a un viacrucis en el que han ido de fracaso en fracaso.
Su penar se inició en mayo del año pasado cuando su delfín en la coordinación del grupo panista en el Senado de la República, el ex secretario de Hacienda Ernesto Cordero fue echado fuera del control de la fracción por el presidente de Acción Nacional Gustavo Madero.
El golpe fue devastador porque desde esa posición Calderón y su grupo de senadores afines, en total unos 24 de los 38 que hay en la Cámara alta, tenían:
1) Un ingreso de 18 millones de pesos mensuales que Cordero podía aplicar discrecionalmente.
2) Una interlocución del más alto nivel con el gobierno federal, empezando por el presidente Enrique Peña Nieto y con empresarios, líderes políticos e intelectuales, nacionales y extranjeros.
3) Tenían una posición de negociación privilegiada en cada evento o reforma legislativa que pasaba por ahí.
4) Y representaban una oposición fuerte al interior de su propio partido.
Pero Madero echó fuera a Cordero y minó el poder de Felipe Calderón que en ese momento estaba viviendo en Boston y trabajando en Harvard.
El segundo descalabro lo sufrió el ex presidente cuando perdió Cordero frente a Madero en la primera elección interna abierta a las bases, con lo cual el grupo quedó noqueado y fuera de la posibilidad de designar candidatos o de formar parte de la directiva nacional del PAN.
El tercer gran descalabro lo sufrió Calderón y su grupo el mes pasado durante el reparto de candidaturas para diputados plurinominales, cuando Gustavo Madero se ubicó como el primero de la lista y dejó fuera de ella a Margarita Zavala.
Entonces Calderón amenazó con abandonar al PAN para ir a formar otro partido. No sé si Gustavo Madero se rió, pero no sería extraño que lo haya hecho. El chihuahuense aguantó la cuerda y Calderón se enredó en ella.
En su enojo los Calderón-Zavala contra-atacaron con una balandronada: si Madero le había negado la posibilidad de ser diputada plurinominal, entonces Margarita iría a fines de este año a competir por la dirigencia de Acción Nacional.
Aquí si casi estoy seguro que Madero carcajeó. Los hechos indican que él tiene el control prácticamente absoluto del voto interno en Acción Nacional. Y además hay que ver que, cuando ocurra el nuevo proceso de selección interna de presidente del PAN, por allá de octubre-noviembre de este año, Madero será el coordinador de la bancada del blanquiazul en San Lázaro y habrá obtenido los triunfos suficientes en las 500 diputaciones federales, las 9 gubernaturas en juego, las 16 delegaciones y 64 asientos en la Asamblea y en los cientos de alcaldías y diputaciones locales, como para hacer trizas cualquier embate que le impida mantener el control del PAN.
Quizá por eso es que ahora Margarita Zavala ha dejado de hablar de competir por la dirigencia nacional del PAN y mirar más alto.
Por eso, ahora habla de que se preparará para competir por la candidatura del PAN a la Presidencia de la República en el 2018.
Aquí sí que a Madero y los suyos les ganará la risa cada que se acuerden de lo dicho por Margarita. No hay que olvidar que para esa candidatura ya están apuntados el propio Madero y el gobernador de Puebla, Rafael Moreno Valle.
Por cierto, Madero como virtual diputado federal de la siguiente legislatura tiene asegurada la chamba y el ingreso hasta agosto del 2018, pero Moreno Valle no.
El gobernador de Puebla dejará de serlo mucho antes de que se inicie el proceso presidencial de 2018, y es por eso que -según lo reportó Excelsior-, va a buscar ser suplente de un diputado federal.
Así, cuando él deje la gubernatura, el diputado federal designado pedirá licencia y dejará la curul para ser ocupada por Moreno Valle.
Bueno, eso es lo que dicen que podrá ocurrir, pero creo que si Moreno Valle es registrado como diputado suplente, deberá abandonar el cargo que hoy ocupa antes de la elección.
NO VIENE
Cuando el 13 de marzo de 2013 el Cónclave Cardenalicio eligió como nuevo Papa al argentino Jorge Mario Bergoglio, quien luego decidió llamarse Francisco, entre los pueblos más entusiastas estaba el de México.
Al final había un Papa latinoamericano y por lo tanto más cercano a nuestros pueblos.
De entonces a la fecha el Papa Francisco ha recibido la visita del presidente Enrique Peña Nieto y su esposa Angélica Rivera, y de otros muchos personajes de este país.
Por supuesto, que entre los cardenales que más han acudido ante él están los mexicanos.
Las invitaciones a visitar México se han convertido en casi un clamor.
Para nadie es un secreto que uno de los centros de mayor nivel de manejo político es el del Vaticano. Ahí no vuela una mosca sin que eso no tenga sentido.
Así que el comentario hecho vía internet por el Papa Francisco a su amigo Gustavo Vera y que luego éste se encargó de dar a conocer en un portal digital, se parece a todo menos a una filtración inocente.
Es por demás obvio que el Papa Francisco quería que su comentario (de que rezaba para que Argentina no se mexicanizara), se conociera.
Tampoco existe casualidad en su señalamiento de que “estuve hablando con algunos obispos mexicanos y la cosa es de terror”.
El efecto causado no tiene regreso. A partir de este comentario no hay nadie que pueda pensar que el Papa Francisco vaya a venir pronto a México. Quizá eso era lo que él quería.