Turbulencia económica
¬ Juan Manuel Magaña martes 16, Dic 2014Política Spot
Juan Manuel Magaña
Los datos económicos están también de pesadilla. Están la severa caída de la bolsa ayer, la cotización del dólar a 15 pesos y el aumento a 30 pesos por kilogramo de jitomate.
Vayamos por partes. La Bolsa Mexicana de Valores (BMV) cerró ayer lunes con una caída de 3.31 por ciento, la mayor baja del año y desde junio de 2013, lo que llevó a su principal indicador accionario a ubicarse en las 40 mil unidades, su menor nivel desde abril pasado.
El Índice de Precios y Cotizaciones (IPC) perdió así mil 379.98 unidades respecto al nivel previo, para colocarse en 40 mil 334.59 enteros, reflejando la caída que mostraron las acciones de América Móvil de casi 5.0 por ciento, Cemex y Alfa con cerca de 6.0 por ciento y Televisa con 4.6 por ciento de decremento.
Esa caída se debió a un fenómeno global por la existencia de preocupaciones por las economías de Japón y Grecia. Sólo que en México esos temores se acentúan más por el anuncio que este miércoles pudiera hacer la Reserva Federal de Estados Unidos sobre la política monetaria del año.
Así que la Bolsa Mexicana de Valores cerró en línea con Wall Street, donde el promedio industrial Dow Jones perdió 0.58 por ciento, el Nasdaq retrocedió 1.04 por ciento y el Standard and Poor´s 500 bajó 0.63 por ciento.
El analista de Banco Ve por Más (BX+), Marco Medina, explicó que nuestro mercado presentó un descenso más pronunciado respecto a Wall Street, que está en línea con los mercados emergentes, porque la economía estadunidense tiene un panorama más favorable, aunque eso mismo eleva las especulaciones respecto al futuro de la política monetaria de ese país.
De lo que se decida en Estados Unidos en materia de política monetaria depende que el dólar se siga fortaleciendo en el mundo. Y si eso pasa significa que estamos fritos, pues se estaría consolidando una devaluación del peso en los hechos. Un golpazo.
Sobre el asunto dice, sin embargo, el gobernador del Banco de México, Agustín Carstens, que por ahora no se planea aumentar el monto de la subasta de dólares, pues el mercado cambiario en el país se ha empezado a estabilizar, gracias a esta intervención. ¿Será?
También en la caída de la bolsa está el hecho de que luego del feriado del viernes, la Bolsa Mexicana incorporó las caídas que presentaron los mercados por la continua baja en los precios del petróleo, a pesar de un buen reporte de producción industrial en Estados Unidos, que fue ignorado. Para los analistas, la caída en los precios del West Texas Intermediate (WTI) y de la mezcla mexicana sigue presionando a los mercados”.
Aquí la aversión al riesgo es muy grande, derivada de la incertidumbre en el mercado petrolero, debido a que hay dudas de qué tanto más seguirá cayendo el precio del crudo.
La penuria económica es acentuada y no se ve por dónde. Para acabarla de amolar, a nivel del bolsillo en el día a día, se tiene el registro de que durante la semana del 8 al 12 de diciembre, el kilo de jitomate alcanzó su precio más alto al ofertarse en 30 pesos, mientras, otros productos de la canasta básica, también mostraron variaciones en su precio.
Según la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) los supermercados en el Distrito Federal ofrecieron el kilogramo de aguacate hass en 30.08 pesos, la bolsa con dos kilos de azúcar en 28.47 pesos, la cebolla en 21.47 y el limón bajó a 15.90 pesos el kilo.
Por su parte, el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) informó que el gasto realizado por los hogares en bienes y servicios de consumo en septiembre de este año registró un descenso de 0.56 por ciento respecto al efectuado en agosto.
En su indicador mensual “del consumo privado en el mercado interior”, el organismo señaló que en el periodo enero-septiembre el gasto de los hogares se desaceleró de un incremento anual de 2.5 por ciento observado en 2013, a un ritmo de elevación de 1.9 por ciento en el mismo periodo de 2014. Y esto se llama vulgarmente apretarse el cinturón.