Kung-Fu Kid
Cine viernes 16, Jul 2010Vértebras del cine
Luis Diego Hernández Romero
Creo que es imposible tratar de repasar el número de películas que renuevan éxitos anteriores, eligiendo lo seguro, algunas veces renovando, aunque otras simplemente traduciendo generaciones adelante. Si el caso es bueno, en esa traducción habrá llegado a proponer algo nuevo, como el caso de Karate Kid, retomado dos décadas después de la primera versión, convertida instantáneamente en un clásico que perdura junto a Volver al Futuro e incluso La Guerra de las Galaxias.
Los emblemáticos, Daniel San y el Sr. Miyagi son reinventados por Jaden Smith y Jackie Chan, respectivamente, bajo un contexto cultural distinto: China en vez de Japón, y Kung-Fu en lugar de Karate. La cinta actual, producida por el propio Will Smith, no es una fotocopia del clásico, sino que, retoma algunas bases del argumento, para interpretarlas en un buen homenaje para la cinta de los ochentas. Jackie Chan, homenajea, sin tratar de calcar a “Pat” Morita, por su lado, Jaden Smith, encarnando al joven Dre, de tan solo doce años, hace que la película sea más cercana para los pequeños, y no para los adolescentes, como sus predecesoras.
El reto comienza cuando Dre y su madre se mudan a China por cuestiones laborales; el pequeño conoce a Mei Ying, cuyo afán por entablar relación con ella, se verá interrumpido violentamente por Cheng, y aunque Dre intenta defenderse a base de movimientos básicos de Karate (de ahí el título de la cinta) no lo salva del dolor propiciado por una impecable Kung-Fu-paliza.
Los problemas del chico seguirán siendo causados por el buscapleitos y su pandilla, hasta que el señor Han (Jackie Chan) lo rescata y llega al acuerdo de que los chicos dejarán de molestar a Dre, hasta el momento del gran torneo de Kung-Fu, en el que participará para enfrentarlos.
El personaje de Jackie Chan guiña constantemente hacia los métodos del icónico Señor Miyagi, sustituyendo por ejemplo, el “encerar-pulir”, por un ejercicio que consiste en recoger una chaqueta del suelo. En el paquete se incluye el viaje a tierras ancestrales, que todo maestro suele emprender junto a su discípulo para ayudarle comprender mejor su arte, y con ello, la vida; esto después de una serie de durísimas pruebas y frases venerables que esconden secretos reveladores.
La edad del protagonista, ha desatado cierta diferencia crítica, más bien ética, pues, a diferencia del adolescente de la cinta original, en ésta, quienes enfrentan sus puños son pequeños de aproximadamente doce años de edad, algo que para muchos resulta incómodo. Sin embargo, esta misma característica se convierte en un incentivo, pues no siempre se observan tales hazañas con actores tan jóvenes, y mucho menos, tan creíblemente dolorosos.
Por otro lado, existe un rompimiento de seriedad, no porque la película emplee un tono cómico, sino por el mismo hecho de la corta edad de los intérpretes. Ello hace difícil el acercamiento espiritual que las artes marciales conllevan, es decir, como espectador, cuesta sentir la evolución en el carácter y sabiduría del protagonista, aunque esto se lleve a cabo durante la película. De cualquier modo, la película ofrece excelentes secuencias de artes marciales, sin olvidar sus respectivos matices de moraleja que toda película infantil veraniega suele tener.
Cuadro por cuadro
El cineasta M. Night Shyamalan, conocido por su éxisto El Sexto Sentido, quien prepara su cinta infantil, El Último Maestro del Aire, también se halla próximo a estrenar Devil, una película de terror, en la cual, de varias personas atrapadas en un ascensor detenido, se encontrará el Diablo en persona. *** Desde España, próximamente sorprenderá un film de ciencia ficción, que narra la historia de Alex, un ingeniero a mediados de siglo XXI dedicado a la tarea de construir un niño robot.
