Futuro asegurado
Ramón Zurita Sahagún jueves 20, Nov 2014De frente y de perfil
Ramón Zurita Sahagún
La ratificación del presidente nacional del PRI y de la secretaria general es vista desde dos ángulos, ya que para unos es buena noticia, pero para otros no lo es tanto.
César Camacho Quiroz e Ivonne Ortega Pacheco, son dos de los aspirantes a diputados federales que con esa condición pretenden coordinar a la próxima bancada de su partido.
De ahí que la ratificación para que, ambos, continúen en sus actuales cargos hasta, cuando menos, el segundo semestre del año próximo, conlleva que tienen amplias posibilidades de llegar a la Cámara de Diputados y uno de los dos convertirse en el “pastor” de los representantes del tricolor
El límite es señalado dentro de un lapso que inicia en julio del año próximo, es decir un mes después de los comicios y considerando que los trabajos del coordinador iniciarían avanzado ese mes, cuentan con el tiempo suficiente para ello.
Los trabajos formales del próximo Congreso de la Unión inician el 31 de agosto, con la instalación de la nueva legislatura, aunque el coordinador deberá iniciar su gestión mucho antes de la fecha.
Comentábamos que para unos es buena noticia y para otros es mala, ya que hay quienes se veían como nuevos dirigentes del PRI, elaborando la estrategia del partido para la campaña electoral y siendo factores de decisión en la nominación de 9 candidata(o)s a igual número de gobiernos estatales, 500 abanderados(a) a la Cámara de Diputados y un gran número de aspirantes a alcaldes y diputados locales.
De acuerdo con la decisión del Consejo Político Nacional, los dos priístas, por cierto ambos ex gobernadores conducirán los destinos de su partido en la difícil contienda electoral del año próximo.
Lo que no se dijo en la reunión partidista, aunque es un rumor en voz alta, es que las principales nominaciones de los abanderados del PRI saldrán de dos filtros que son la Presidencia de la República y la Secretaría de Gobernación.
Por lo pronto, los priístas siguen la misma tendencia de los otros partidos de blindar a sus candidatos a cargos de elección popular, por lo que pedirán una serie de requisitos que tendrán que cubrir cada uno de ellos.
De inicio los aspirantes tendrán que presentar una carta compromiso, mediante la que autoricen al partido para realizar una investigación sobre su situación patrimonial o fiscal, su entorno social, su actuación en el servicio público, así como responsabilidades penales y administrativas.
Los priístas están dispuestos a trabajar con las nuevas reglas políticas, las escritas y las que no lo están.
Saben que tienen que predicar con el ejemplo y que si ellos fueron los promotores de la equidad de género para el Congreso de la Unión, presentarán al 50 por ciento de candidatas mujeres para la Cámara de Diputados, como lo indica la reforma aprobada, e intentarán meter el mayor número de candidatas mujeres a las principales alcaldías y a los gobiernos estatales.
Los priístas salieron fortalecidos de este Consejo Político Nacional, ya que les quedó muy claro que su partido no permitirá el saqueo moral de los valores que constituyen la tesis de la vida democrática, por lo que deberán respetar los valores y el código de ética partidario, mostrando que cuentan con un modo honesto de vivir, dijo el secretario de Asuntos Jurídicos del Comité Ejecutivo Nacional, Sadot Sánchez Carreño.
CAMACHO Y ORTEGA
Hasta el momento, los dos personajes cabezas de la dirigencia nacional del PRI, César Camacho, presidente e Ivonne Ortega, secretaria general, son los más firmes aspirantes a la coordinación partidista en la LXIII legislatura de la Cámara de Diputados. Ambos cuentan con carreras políticas similares: los dos fueron gobernadores muy jóvenes, antes de los 40 años, aunque en el caso de Camacho fue interino y sustituto, mientras Ortega logró ser electa en las urnas.
Uno procede del Estado de México, la otra de Yucatán y ya pasaron por ambas cámaras, aunque nuevamente saca ventaja Ortega, porque ella fue diputada de mayoría y él de representación popular.
En el caso del Senado de la República, empatan, pues los dos llegaron por la ruta de la primera minoría al no ser electos de mayoría en sus respectivos estados. Camacho ya fue alcalde, mientras que Ortega lo compensa con el paso por el Congreso del estado. Ambos guardan cercanía con el Presidente Enrique Peña Nieto, aunque en el caso de César Camacho fue su jefe en los inicios del hoy Ejecutivo federal dentro de la administración pública.
CAMPECHE
Será cierto que el secretario de Gobierno de Campeche, Roberto Sarmiento, le está jugando las contras al gobernador Fernando Ortega Bernés, siendo el promotor de los paros, tomas de carreteras, plantones y protestas.
El propósito de Sarmiento es convertirse en el solucionador de los conflictos, mostrando su valía como negociador y solucionador de conflictos, aunque hay quienes dicen que sale más caro el caldo que las albóndigas, ya que el alto costo de sus servicios repercute fuertemente en las arcas estatales.
NO HABRÁ DESFILE
La convocatoria para una gran marcha y movilización a realizarse en el Distrito Federal motivó a la cancelación del tradicional desfile deportivo del 20 de noviembre.
El temor se siente en la capital del país, donde las movilizaciones partirán de tres rutas distintas, por lo que se advierte a la población tome precaucione sobre el camino que seguirán durante el día. Existe gran tensión por lo que puede derivar de esas movilizaciones que llevan como estandarte el caso Iguala con los 43 normalistas desaparecidos desde finales de septiembre y que no se pueden dar por muertos, oficialmente.
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