Tchaikovsky, homenajeado en México
* Especiales, Espectáculos jueves 23, Oct 2014- El Ballet Clásico de St. Petersburgo deleitó a los mexicanos en el Teatro Metropólitan, con orquesta en vivo
Texto: Arturo Arellano
“No hay sentimiento que no pueda ser transmitido por medio de la danza”, pero si ésta es acompañada de obras tan hermosas como las logradas por los genios de la música clásica, los momentos se vuelven simple y complejamente únicos. (Foto: Arturo Arellano)
La tarde del domingo en el Teatro Metropólitan se tornó mágica y obviamente hermosa, con la presencia del Ballet Clásico de St. Petersburgo en su escenario, quienes llegaron para ofrecer un homenaje al más grande compositor que dio este lugar de Rusia, el genio Piotr Ilich Tchaikovsky, acompañados de Orquesta Sinfónica en vivo, que les acompañaron interpretando fragmentos de “La bella durmiente”, “Romeo y Julieta” y “El lago de los cisnes”, además de un popurrí con lo mejor del artista. Las coreografías fueron creadas especialmente para este espectáculo, por lo que los 40 bailarines estuvieron bajo la tutela del coreógrafo y director artístico del Ballet Estatal de Rusia, Viktor Korolkov.
El espectáculo comenzó después de las 13:30 horas, cuando el cuerpo de bailarines saltó al escenario en medio de las magistrales ejecuciones de la orquesta, siendo primeramente representada la historia de “Romeo y Julieta”, con la que lograron el aplauso y respeto del público, que al terminar cada acto aplaudió nutridamente.
El talento y plasticidad de cada miembro de este ballet es evidente en cada movimiento, cada figura creada con el cuerpo, cada sentimiento transmitido con pasión y energía, pero también sutileza y belleza, llevando a los presentes a mundos mágicos, que catapultan los sentidos con cada nota, armonía, paisajes sonoros creados por el genio que fue y sigue siendo, mientras su obra sea viva: Tchaikovsky.
Luego se dio paso a la historia más conocida por los infantes: “La bella durmiente”, no así la música, pero este homenaje sirvió por supuesto para acercar a los más pequeños a la obra musical. Cabe destacar que entre el público hubo gran presencia infantil y principalmente las niñas mostraron asombro y atención a lo sucedido en el escenario.
Así se llegó al momento cumbre de la tarde con la ejecución de “El lago de los cisnes”, quizá la más grande obra escrita por Tchaikovsky, o por lo menos, la más popular, por el grado de dificultad, tanto para los músicos, como para los bailarines que ante la grandeza de la pieza deben exigirse una mejor coreografía e interpretación, logrando movimientos, saltos y figuras que representarían un desgarre o lesión para cualquier persona normal, dejando clara la belleza de esta vertiente artística: El ballet, que permite resaltar las capacidades del cuerpo humano.
Como se dice: “No hay sentimiento que no pueda ser transmitido por medio de la danza”, pero si ésta es acompañada de obras tan hermosas como las logradas por los genios de la música clásica, los momentos se vuelven simple y complejamente únicos, maravillosos e inolvidables. Tarea bien lograda por Margarita Kamysh, Olga Stepanova y Petr Borchenko, solistas del Ballet de St. Petersburgo, que de nuevo conquistó a los mexicanos.
