Bruno Bichir enfrenta el mayor reto actoral: dar esperanzas de vida como “Cuenta cuentos”
* Especiales, Espectáculos lunes 12, Jul 2010Gloria Carpio
El actor mexicano Bruno Bichir definió como una bendición poder convivir con niños que necesitan ánimo, alegría y que pasan por momentos difíciles o con algún tipo de enfermedad, luego de contar un par de cuentos y otorgar regalos a niños del Hospital Infantil Federico Gómez.
El consagrado actor Bruno Bichir se sometió a la prueba más difícil que puede experimentar un histrión: contar cuentos frente a una audiencia de niños sometidos a tratamientos médicos y en un hospital, a quienes es preciso hacer reír y mover sus emociones.
La prueba más que un reto actoral, es un factor científico, derivado de un estudio que mereció el Premio Nobel de Literatura en 2007 por parte de Doris Lessing y que desarrolló Robert Ornstein, profesor de Stanfordf Harvard en la UCLA de Estados Unidos, que descubrieron que el cerebro se activa del lado derecho al escuchar cuentos bien hilvanados y se conecta con una serie de informaciones.
Bruno Bichir, quien aparte de ser actor es director y un apasionado de las innovaciones culturales y del arte, consideró que es una bendición poder convivir con los niños que necesitan ánimo y alegría y que pasan por momentos difíciles con algún tipo de enfermedad.
El proceso (prácticamente comprobado en los Estados Unidos) se llevó a cabo en el Hospital Infantil de México “Federico Gómez”.
En este hospital, que lleva 67 años de existencia, es considerado como la cuna de la pediatría moderna en México y el mejor de Latinoamérica, unieron esfuerzos y voluntades la Fundación CIE “Creamos Alegrías”, El Foro Shakespeare y el Banco HSBC, que llevarán a los pequeños internados a los mejores actores para que le den lectura a los cuentos diseñados para el referido proyecto bautizado en la Unión Americana como “Teaching Stories”.
Bruno Bichir por su parte no se arredró ante el proyecto, por difícil que éste fuera y dio lectura a tres cuentos: El pollo bobo, El león que se vio en el agua y El hombre y el zorro. Y comenzó el proceso supervisado por psicólogos y educadores que tienen como premisa que los primeros años de vida son importantes para el desarrollo psicosocial del ser humano y es posible anclar un nivel de comprensión y desarrollo emocional de los niños.
El relato de cuentos, dicen los científicos, es una herramienta que promueve un nivel de comprensión emocional, alienta la empatía y da solución a conflictos al mejorar el pensamiento crítico.
Los cuentos elaborados hace que se exploren habilidades del pensamiento analógico y contextual y genera que los niños hagan preguntas abiertas.
Por ello el actor comprobó el momento de cuestionar a los niños y al final dijo que seguirá siendo partícipe de estos proyectos, ya que la sociedad está urgida de tener un apapacho y atención, por lo cual está dispuesto a concurrir a cualquier llamado de las instituciones científicas a fin de dar a los niños un poco de felicidad y reflexión.
El actor, miembro de una dinastía de primeros actores confesó que es el papel más difícil que le ha tocado desempeñar en su carrera en razón de que a un niño no se le puede engañar tan fácilmente, no importa en qué estado de salud se encuentre y comentó que ellos entienden lo que es la corrupción, la honestidad, la generosidad, la humildad, el amor, la belleza y saben cuando las cosas no están bien.
