Contaminación
Ramón Zurita Sahagún viernes 10, Oct 2014De frente y de perfil
Ramón Zurita Sahagún
Como un brote epidémico que cunde por todo el país, surgen movimientos de inconformidad por asuntos diversos que amagan con expandirse y provocar una gran contaminación nacional. Son reclamos diversos que buscan solución a una serie de problemas, algunos de ellos recientes y otros añejos que en conjunto son motivo de gran preocupación.
El clima de enrarecimiento se siente en el ambiente, es palpable y sumamente perceptible.
Las marchas, bloqueos, concentraciones y mítines, son parte fundamental del reclamo, ya que los demandantes no han obtenido la respuesta adecuada a sus exigencias.
Van desde los familiares de los desaparecidos en Iguala, pasan por estudiantes politécnicos y normalistas, profesores de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación y se unen a ellos otros grupos que mantienen vivas sus demandas.
Son muchos los temas pendientes, algunos de ellos derivados de la ola de violencia que vive el país y que se sitúa como una sombra pavorosa en el escenario nacional.
La atención que se pone desde el extranjero sobre México es un aviso sobre el seguimiento que se hace de lo que viene aconteciendo ante la eventualidad de que concurran los inversionistas. Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano y otros personajes académicos y políticos que lo acompañaban pudieron constatar el hartazgo que se tiene sobre los políticos.
Es cierto que Cárdenas Solórzano no merece ese trato, pero tampoco tenía que hacer nada en esa marcha.
Desde hace mucho tiempo, vemos como los políticos de oposición se montan en todo tipo de reclamos y demandas en un intento de mostrar su bonhomía, solidaridad y liderazgo, pero buscando, en realidad, sacar raja política al hecho.
Por eso, resulta un llamado de atención para todos ellos, del que deben tomar nota a tiempo, antes de que estos eventos se multipliquen. Es cierto que hubo infiltrados en la marcha y que muchos de ellos lo hacen con la finalidad de provocar desmanes y enrarecer más el ambiente, pero este se nota tenso.
La calma en que se encontraba sumido el país está siendo parte del pasado, mientras que la ola de violencia renace en algunas partes del país.
La masacre de Iguala no puede considerarse como un hecho aislado como tampoco lo es el descubrimiento de colusión entre autoridades y grupos delincuenciales.
Son varios los pendientes que se tienen en el renglón de asesinatos masivos, los más de ellos producidos entre los propios grupos delincuenciales, aunque no por ello no deben ser investigados y penalizados los responsables. Las fosas clandestinas en las que se entierran decenas de cuerpos se multiplican por las extensas zonas del país y llegan a ser tantas que la identificación de los mismos resulta difícil de realizar.
Pero al margen de la violencia y de los crímenes cometidos por los grupos delincuenciales se encuentran también otros temas que no deben ser soslayados como son los profesores renuentes a la reforma educativa que ya fue aprobada y hasta puesta en operación por el gobierno federal, además del movimiento estudiantil prohijado en el Instituto Politécnico Nacional y que es apoyado por otros centros educativos.
Los politécnicos presentaron a las autoridades una serie de puntos que les fueron aceptados, pero no conformes con ello, adicionaron otros más, luego de que les fueron aceptados los primeros. Desde el primer momento decidieron que la respuesta a su pliego petitorio sería puesta a consideración de los involucrados y que la respuesta a la autoridad vendría después.
Llegó el momento y hoy, acudirán de nueva cuenta a la Secretaría de Gobernación, para definir si los aceptan y regresan a las aulas o continúan con su movimiento. Por lo pronto, los estudiantes del Politécnico decidieron seguir en paro, por los próximos días.
AFERRADOS
Ángel Aguirre Rivero, tambaleante gobernador de Guerrero decidió apostar por continuar en el cargo y en su esfuerzo por conseguirlo busca un referéndum para que sea el pueblo el que decida si sigue o se va.
El proyecto de Aguirre Rivero conlleva que su hijo sea candidato al ayuntamiento de Acapulco en la siguiente elección (junio del 2015) y sabe que su relevo le ocasionaría a su vástago ser desechado de esa posibilidad, aunque, tal vez, le convendría una negociación que le permita al junior ser postulado por la izquierda a cambio de su qué padre se vaya.
La negociación puede serle conveniente, ya que sacrificaría un año de gobierno por seis de gobierno del orgullo de su nepotismo, toda vez que si gana la elección de junio podría ser reelecto en el 2018 y de ahí saltar a la candidatura al gobierno del estado, con lo que cumpliría sus sueños de extensión gubernamental. Aguirre Rivero ha sido dos veces gobernador, una como interino y otra electo, además de dos veces diputado federal y uno más senador, por lo que podría buscar repetir en alguna de esas posibilidades.
Sin embargo, la ciudadanía guerrerense no está conforme con su forma de gobernar, aunque él lo atañe a que son solamente opinadores, analistas y adversarios políticos los que piden su salida. Otro que debe pensar seriamente en los pasos que da es el ingeniero Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano al que últimamente no le salen bien las cosas.
Cuauhtémoc pretendió ascender a la presidencia del PRD, poniendo muchas condiciones y sin participar en una contienda como lo harían los demás y fracasó en su intento.
Lo ocurrido en la marcha en que fue repudiado es un llamado a tiempo para pensar bien la ruta por la que deberá transitar en lo futuro.
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