El federalismo concentrador
Nacional* viernes 26, Sep 2014El origen del federalismo 4
Al regresar Santa Anna a la Presidencia anula el decreto de Gómez Farías de la ocupación de los bienes del clero y sustituye a los legisladores liberales del congreso por conservadores que participaron en el movimiento de los polkos. Posteriormente a principios de 1847 en el Congreso se crea el Acta de Reformas.
Simultáneamente las tropas norteamericanos habían ocupado Puebla y se aproximaban al Valle de México. El congreso se dispersa, Antonio López de Santa Anna abdica y el cargo presidencial lo asume Manuel de la Peña y Pela, Presidente de la Suprema Corte de Justicia que reúne al gobierno en Querétaro y el Congreso inicia sesiones a inicios de 1848 para aprobar el Tratado de Guadalupe Hidalgo.
Con el Tratado de Guadalupe Hidalgo de 1848 termina la guerra al establecer los límites entre el territorio americano y el mexicano. Con base en este y en el tratado que realiza el Santa Anna de la Mesilla en 1853 donde vende más de cien mil kilómetros cuadrados, México pierde gran parte de su territorio.
Años después, en 1856 con un Congreso Constituyente compuesto por legisladores moderados y conservadores se trabaja una nueva constitución, la Carta Magna del 5 de febrero de 1857.
La Constitución de 1857, incluye el equilibrio entre el poder de la federación y las libertades de las entidades federativas, es decir, el proyecto federal y liberal en 1857, que se realizó en oposición tanto a la tendencia centralizadora como a la tendencia descentralizadora y pactista, capaces todas de ligar los numerosos intereses que se sentían afectados por el proyecto liberal y federal.
Este proyecto liberal tuvo que esperar, por la fuerte oposición, principalmente de los intereses eclesiásticos y militares, que lograron retardar su implantación durante 10 años, a través de la intervención extranjera y la guerra civil. Primero con el levantamiento de Félix Zuloaga y posteriormente mediante el Imperio de Maximiliano de Habsburgo. Esta nueva fase centralista termina con el fusilamiento de Maximiliano y sus aliados y con el fin del imperio. El régimen federal se impone de manera definitiva en 1867, con la República Restaurada, preservándose hasta nuestros días.
El siglo XIX y hasta 1910, fue un periodo de constante tensión entre el centro y la periferia, entre federación y estados. El movimiento armado de 1910 dio la pauta para renovar el modelo federal. Con la promulgación de la Constitución de 1917 se dota al gobierno central de amplias facultades, además de conferirle poderes para garantizar la unidad política y económica de la nación y responder a los desafíos internos y externos.
El federalismo contemporáneo no nació concentrado, sino que fue adoptando paulatinamente elementos de centralización, misma que se consolida a partir de la década de los treinta.
Durante el presente siglo, una serie de factores han originado este proceso:
- a) el desarrollo de la economía se impulsó a partir del Estado federal. La concentración del capital y de las actividades económicas debilitó los poderes locales y reforzó al poder central.
- b) la administración pública se organizó en cuerpos nacionales de estructura centralizada.
- c) la consolidación de un fuerte aparato administrativo adscrito al Ejecutivo, con el cual se hizo responsable de las funciones sociales al garantizar los servicios de educación, cultura, sanidad, seguridad, servicios sociales, entre otros (Borja, 1987, 29-30).
- d) la formación de clases políticas y de burocracias habituadas a funcionar centralmente.
Es hasta 1974, cuando nace el Estado Libre y Soberano de Quintana Roo, el entonces el presidente Luis Echeverría Álvarez, decreta la conversión de los Territorios de Baja California Sur y Quintana Roo en Estados Libres y Soberanos.
La creación y consolidación de ambas entidades sólo se alcanzó como tal hasta el momento en que dejaron de depender plenamente del gobierno federal y sus funcionarios, es decir, en el momento de la promulgación de las constituciones políticas estatales y la elección de representantes de los poderes locales de acuerdo con las normas de esas constituciones
En la actualidad, nuestra Constitución en su artículo 40 recoge la voluntad popular de constituirse en una república representativa, democrática y federal; describe al Estado como una organización compuesto por entidades libres y soberanas en todo lo concerniente a su régimen interior, pero unidos en una federación establecida según los principios de la misma ley fundamental.
En nuestro país, las facultades que no están expresamente concedidas por la Constitución a la federación se entienden reservadas a las entidades, que cedieron parte de sus potestades al momento de establecer el nuevo Estado, conservando el resto de sus facultades.
Con el propósito de analizar este fenómeno histórico de gran relevancia para el desarrollo del México contemporáneo, la mesa directiva el Senado de la República organizó una serie de eventos que tienen como eje el federalismo, el municipalismo, el desarrollo social, la política exterior y la situación que guarda la República, que inicia el próximo 30 de septiembre a la cual asistirán los representantes de los poderes públicos del país.