PAN y PRD, envenenados por el poder
Roberto Vizcaíno martes 9, Sep 2014Tras la puerta del poder
Roberto Vizcaíno
- Detrás del nuevo escándalo de AN hay “un aprendiz de brujo” al que todo conjuro mediático le sale mal
- Hoy los aspirantes blanquiazules a varias gubernaturas están embarrados con lo de sobornos, hasta las orejas
- La elección interna del PRD conducida por el INE, le quitó responsabilidades y presiones a Jesús Zambrano
Los hechos indican que mientras los panistas han perdido el estilo y la cordura, los perredistas han aprendido las lecciones de sus confrontaciones y ahora usan con éxito al INE para controlar y legitimar sus procesos en el reparto de sus cargos internos.
Mientras los blanquiazules profundizan su degradación y deterioro, los perredistas caminan hacia la elección de su dirigente nacional dentro de parámetros aceptables.
En uno y otro casos sus situaciones son sin embargo de crisis y debilidad frente a un PRI que cuenta de nuevo con la amalgama que le da volver a tener un liderazgo fuerte desde la Presidencia de la República.
Enfrente, dentro de 8 meses y medio, todos ellos tienen las elecciones intermedias para renovar 500 diputaciones federales, 9 gubernaturas, 16 delegaciones en el DF (algunas más importantes que varios estados), la Asamblea capitalina y cientos de alcaldías y diputaciones locales en 17 estados.
Por eso a todos les urge recomponerse.
EL APRENDIZ DE BRUJO
En este contexto sobresale sin duda la grave descomposición que vive el Partido Acción Nacional, donde no terminan de salir de un escándalo para entrar en otro.
Y todo indica que detrás de este deterioro de la segunda fuerza política nacional podría haber un “aprendiz de brujo” al que, como en la película Fantasía de Walt Disney, sus conjuros le salen tan mal que, de pronto, el edificio amenaza con caérsele encima.
En medio de este desastre provocado también por la sorprendente inexperiencia e inmadurez de ellos mismos, los 38 senadores del PAN se hunden peligrosamente en un desprestigio sin retorno, la mayoría sin salvavidas que les garantice algún futuro.
Un recuento de los hechos en este naufragio indica que durante la reciente reunión plenaria de senadores del PAN en un hotel de Paseo de la Reforma, el coordinador Jorge Luis Preciado decidió remover al también senador José María Martínez de la vicecoordinación, y designar en su lugar a Fernando Herrera.
Lo que siguió después es confuso. De entrada nadie sabe el motivo de la remoción. Aunque es común ahora que eso se haga en el PAN con el aval del líder nacional, y de la mayoría del grupo.
De acuerdo a una filtración –diría chisme– hecha por la senadora pluri Laura Angélica Rojas a sus reporteros favoritos, el senador Martínez habría reaccionado con resentimiento y acusado a su vez a Preciado de haber intentado sobornarlo en diciembre pasado con 500 mil pesos para votar a favor de las reformas del PRI.
En medio del sainete, el senador Martín Orozco habría revelado que a él también Preciado le ofreció dinero con el mismo fin, y agregado que además el colimense lo invitó a una fiesta privada con sexoservidoras.
Preciado negó los hechos.
Pero el escándalo estaba servido, y el “aprendiz de brujo” ordenó ventilarlo en medios.
La senadora Rojas fue la encargada de disparar la escopeta y su compañera Adriana Dávila urgió al resto de la bancada a conminar al presidente nacional del PAN, al chihuahuense Gustavo Madero, a remover a Preciado.
De nuevo el objetivo evidente era obligar a Madero a quitarle la coordinación a Preciado.
Sólo que al ordenar su difusión en medios y darle validez a la acusación de Martínez y de Ortiz contra Preciado, el “aprendiz de brujo” y marionetas propinaron un duro golpe y desprestigio a su partido y a su fracción, y muy especialmente a los aspirantes a varias gubernaturas, varios de ellos de su propia corriente interna. El asunto se convirtió en más que “fuego amigo”.
La cuestión es simple: si Preciado intentó sobornar a Martínez y a Ortiz con 500 mil pesotes cada uno, quiere decir que también lo hizo con la mayoría de los otros 35 senadores, ¿no?
Y si nadie dijo nada fue porque esa mayoría aceptó el soborno, ¿no?
Así que Martínez, Ortiz, Rojas y Dávila –que son quienes hasta ahora aparecen al centro de este nuevo escándalo–, no sólo “embarraron” al coordinador Preciado, sino que cubrieron de porquería al resto de la bancada senatorial blanquiazul y sembraron la duda sobre el resto del Congreso. Fue algo así como tirar la nica encima del ventilador.
¿Y ahora cómo se van a limpiar la cara y el prestigio los senadores panistas que aspiran a varias gubernaturas?, ¿Cómo no creer que todos ellos reciben sobornos?
¿Cómo recomponer la imagen de los senadores Jorge Luis Lavalle Maury, quien suspira por Campeche o de Francisco Domínguez Servín, que el sábado anterior se autodestapó en Querétaro?
¿Y qué decir del daño a la imagen de Sonia Mendoza Díaz y César Octavio Pedroza Gaytán, senadores panistas de San Luis Potosí, estado donde el PRI mantenía foco rojo porque temía perder la gubernatura ante alguno de ellos?
¿Qué hacer si el pulcro potosino Alejandro Zapata Perogordo ya se quemó cuando apareció en una fiesta de diputados panistas con taiboleras de Puerto Vallarta?
¿En fin, qué candidato ganador le queda al PAN luego de este autogol?
Casi seguro que ninguno de los senadores que quedaron en la picota olvidará que fue una senadora panista quien los puso en esa posición.
Simplemente están fritos.
En medio de este embarradero desatado por “el aprendiz de brujo”, el presidente de la Mesa Directiva del Senado, el perredista Miguel Barbosa fue el único cuerdo y con oficio político, al descartar una investigación sobre los supuestos sobornos.
PRD, EN LA RUTA
En contrapartida, luego de años de dar tumbos y vivir la permanente confrontación, las corrientes del PRD pasaron al parecer con éxito aceptable la aduana de su elección de consejeros nacionales, estatales y municipales y de los integrantes de su Congreso Nacional.
De entrada el Instituto Nacional Electoral logró instalar el 99.95 por ciento las 8 mil 269 mesas receptoras. Sólo 8 no pudieron ser instaladas, apenas un 0.01 por ciento del total previsto.
Al informar lo anterior, Pamela San Martín Ríos y Valles, presidenta de la Comisión de Prerrogativas y Partidos Políticos del INE, calificó estos comicios como muy exitosos.
Luego de computarse la mayoría de las casillas instaladas, resultó que Nueva Izquierda –coloquialmente conocida como “Los Chuchos”–, aventajaban al resto de las corrientes.
Habría que recordar que Nueva Izquierda y ADN apoyan la candidatura de Carlos Navarrete para presidente del PRD. La elección de este cargo se realizará el viernes 19 de septiembre, una vez integrado el nuevo Congreso Nacional.
En tercer lugar quedaría Izquierda Democrática Nacional que comandan René Bejarano y su esposa, la senadora Dolores Padierna.
La consejera San Martín indicó que durante el proceso se presentaron 585 incidentes, 390 de los cuales quedaron resueltos casi de inmediato. En su mayoría correspondieron al cambio de mesa receptora.
“Me parece que es indispensable reconocer la participación y el esfuerzo que realizó el PRD, no sólo al solicitar el INE que participáramos con ellos y que organizáramos su contienda para imprimir los principios de certeza, objetividad, de legalidad y de transparencia”, dijo.
El más contento después de Navarrete, fue Jesús Zambrano, quien con la participación del INE quedó fuera de todo conflicto y denuncia.