México lamenta anexión de Israel en Cisjordania
* Especiales, Mundo viernes 5, Sep 2014- Cancillería deplora que el gobierno de Netanyahu se haya apropiado de 400 hectáreas en Belén
El gobierno mexicano lamentó “profundamente” la decisión de las autoridades de Israel de apropiarse 400 hectáreas en la zona de Belén, en los territorios palestinos ocupados de Cisjordania, y exhortó a revertir esa decisión.
La Secretaría de Relaciones Exteriores de México afirmó en un comunicado que, según lo expresado por el titular de Naciones Unidas, Ban Ki-moon, los asentamientos en los territorios palestinos ocupados “son ilegales”.
El pasado domingo, el gobierno israelí declaró como “tierras estatales” las más de 400 hectáreas en una zona entre las ciudades palestinas de Belén y Hebrón, una decisión que abre la puerta a la construcción de nuevas colonias en el futuro Estado palestino que debe incluir la Franja de Gaza y Jerusalén Oriental.
Añadió que la medida de Israel, como potencia ocupante, contraviene las obligaciones fijadas en el derecho internacional humanitario y es “uno de los obstáculos principales para las negociaciones de paz”.
La cancillería mexicana también afirmó que la nueva anexión de tierras “mina la confianza” entre las partes cuando se busca consolidar un cese el fuego permanente en Gaza y se realizan esfuerzos para reanudar las pláticas directas de paz entre Israel y Palestina.
La SRE exhorta a Israel “a revertir esta decisión y reitera la necesidad de solucionar a la brevedad el problema de fondo en la zona”, en respeto al derecho de Israel y Palestina a vivir en paz y seguridad dentro de “fronteras internacionalmente reconocidas”.
Un informe de la Unctad reveló que en 2012 vivían en Cisjordania unos 360 mil israelíes, cuando en 1972 eran 800. Israel ocupa la llamada Zona C de Cisjordania, igual a 62 por ciento de ese territorio palestino, rico en recursos naturales y a los cuales no tienen acceso los palestinos.
El gobierno de Netanyahu (derecha) anunció la anexión en Belén tras la firma de un alto el fuego permanente con el movimiento radical Hamás, que gobierna Gaza, y argumentó como pretexto para ocupar más tierras el hecho de que ahí habían sido asesinados en julio tres estudiantes israelíes cuya muerte motivó la ofensiva militar Marco protector.