La mar de pobres
¬ Juan Manuel Magaña miércoles 3, Sep 2014Política Spot
Juan Manuel Magaña
Las cifras de la pobreza muestran un alarmante incremento. En los últimos dos años la pobreza aumentó en 2.1 millones de personas.
Según los cálculos del doctor Julio Boltvinik, investigador de El Colegio de México, eso equivale a 105 mil nuevos pobres por mes, en promedio, con base en los datos más recientes del índice de tendencia laboral de la pobreza del Coneval.
Se dirá, con los datos oficiales, que en el país hay 52 millones de pobres, es decir, poco menos de la mitad de los habitantes. Pero los expertos en la pobreza consideran que, en realidad, el 80 por ciento de los mexicanos vive en situación de pobreza, frente a un 20 por ciento de privilegiados por el orden establecido.
El propio Julio Boltvinik estima que ocho de cada diez habitantes del país enfrentan esa condición. El especialista ha dicho que desde la década de los 80 y después de la crisis de 1994, los niveles de pobreza crecieron y en vez de que haya mejorías, “hoy estamos peor que lo que estábamos hace 50 años”.
También ha expresado que “México es un país de 80 millones de fregados y 20 millones bien, es decir, que 80 por ciento tienen carencias y sólo 20 por ciento vive sin necesidades”.
Nomás hay que recordar, como lo hace Boltvinik, que durante el sexenio de Felipe Calderón este flagelo creció, y durante su gobierno se sumaron a la pobreza 12 millones de mexicanos más, sobre todo en zonas urbanas. Y con 2.1 millones de pobres más, el PRI que está de regreso no canta mal las rancheras.
De muchas maneras se ha contemplado la mar de pobres que hay en México. Otro investigador de El Colmex, Gerardo Esquivel, nos recuerda que hay un segmento de la población que pese a no estar en la clasificación de pobre, “es altamente vulnerable a serlo”, porque la política social no esta funcionando y el crecimiento económico se concentra sólo en sectores ricos, de modo que es un desarrollo excluyente.
Eso explica por qué de los 52 millones de pobres oficiales, el asunto trepa a los 80 millones: porque los que son “altamente vulnerables a serlo” virtualmente ya lo son, o no lo son por una diferencia de unos cuantos pesos.
La mar de pobres se puede ver también de esta manera: “Ser niño en México es ser niño pobre”, como sugiere el blog Hilo Directo, que dedica espacio al tema.
Ahí dice que de los 40 millones de niños y adolescentes que hay en México, el 53 por ciento, 21.2 millones, se encuentran en pobreza y de éstos 4.7 millones viven en pobreza extrema.
Se refiere al reporte elaborado de manera conjunta por el Fondo de la Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) en México y el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval), sobre cómo dejó a los niños el “gobierno de Calderón”.
Se menciona que el caso más trágico es el de los menores de 17 años de comunidades indígenas, pues casi ocho de cada 10 (78.5 por ciento) padece condiciones de pobreza, y uno de cada tres de ellos vive en pobreza extrema.
Está claro que fueron los gobiernos del PRI los que acumularon un problema que se volvió irresoluble, y más con la demagogia en el uso de la palabra Solidaridad, que más bien lo ocultó. Pero los gobiernos panistas salieron peor, mentían flagrantemente y abultaron con impunidad la cuenta. La magnitud del problema es tal, que al único líder opositor que le queda a México se le oyó decir en campaña que “quién sabe si haya solución”.
