Hay 160 millones de personas en el mundo con hepatitis C
Elsa Rodríguez Osorio, Salud lunes 21, Jul 2014Cápsulas de la salud
Elsa Rodríguez Osorio
- Se inaugura el Museo Interactivo sobre Adicciones
- México es el país donde se consume más agua embotellada
Expertos advierten sobre el riesgo de graves consecuencias por la hepatitis C, enfermedad crónica, silenciosa, que puede tardar hasta 30 años en manifestarse y para la cual no existe vacuna. Hay más de 160 millones de pacientes en todo el mundo y un incremento anual entre 3 o 4 millones de nuevos infectados. La doctora Margarita Dehesa Violante, miembro del comité médico de la Fundación Mexicana para la Salud Hepática, afirma que la enfermedad no respeta edades y en algunas ocasiones se puede contagiar al recién nacido si la madre es portadora. Los síntomas comunes de la enfermedad son: fiebre, cansancio, pérdida de apetito, náuseas, vómitos, dolor abdominal, orina de color oscuro e ictericia (piel y ojos amarillentos). Hasta un 80% de los pacientes infectados con hepatitis C no desarrollan inmediatamente los síntomas, el proceso puede manifestarse hasta 30 años después, pero si se atiende a tiempo es curable. La enfermedad consiste en la inflamación del hígado provocada por la infección del virus tipo C. Durante los primeros 6 y 12 meses después de la infección, es posible que ésta se elimine en un 15% a 25% de los pacientes, pero en la mayoría de los casos -hasta un 85%- los pacientes no eliminan el virus y se vuelve crónica, lo que deriva en consecuencias graves, como la cirrosis hepática o el cáncer de hígado. El Día Mundial de la Hepatitis C es el 28 de julio.
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El Museo Interactivo sobre Adicciones (MIA) es una alternativa única en México para abordar el abuso en el consumo de drogas, así como las afectaciones que generan en el corto, mediano y largo plazos. El MIA es una iniciativa educativa y cultural apoyada por el Consejo Nacional contra las Adicciones (CONADIC). Se ubica en Culiacán, Sinaloa, y es único a nivel internacional. El museo se divide en dos niveles: uno corresponde a la experiencia multisensorial, donde se abordan drogas legales e ilegales, tales como tabaco, alcohol, cocaína, ludopatía, mal uso de internet y trastornos alimenticios, y el segundo nivel responde a las áreas del conocimiento y de la información, donde se proporcionan datos duros y cifras específicas. De acuerdo con su director, Luis Arturo León Tavera, el objetivo principal es que el usuario adquiera elementos para ampliar su capacidad de tomar decisiones correctas, por lo que el museo está constituido para elevar la percepción de riesgo y con ello bajar los índices de consumo. El MIA recibe anualmente 60 mil personas. En su mayoría adolescentes, quienes, acompañados por sus profesores, pueden recrear el síndrome de abstinencia de un alcohólico por medio un juego llamado “Vortex”. Este simula la entrada a un túnel cuyas paredes giran mientras la persona está de pie. La sensación es la pérdida del equilibrio y de inminente caída. Y sirve para ejemplificar y concientizar a sus visitantes sobre las consecuencias del abuso del alcohol. El MIA también explica a los jóvenes cómo alimentarse sanamente, promueve el arte y la cultura de México y al mismo tiempo educa a los padres con información avalada por el Consejo Nacional de Adicciones sobre cómo identificar conductas anormales en sus hijos. El modelo será replicado en Chihuahua y Jalisco.
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Grupo Peñafiel presenta Purezza, agua mineral finamente gasificada de origen 100% mexicano. Se distingue por su delicada burbuja y minerales como calcio, magnesio y potasio, producto de los años que tarda en filtrarse desde el Pico de Orizaba. Estos elementos le brindan un característico sabor, que deleita los paladares exigentes. Enrique Ortiz, Gerente de Mercadotecnia de Grupo Peñafiel, informa que México es el país donde se registra el mayor consumo de agua embotellada, creciendo un promedio de 5% anual en los últimos 5 años. Por su parte, Eduardo Palazuelos, chef mexicano de prestigio internacional, señala que es muy importante contar con un producto de esa naturaleza, sobre todo, porque al no contener azúcar, saborizantes ni colorantes añadidos, es ideal para consumirse sola o acompañando los platillos más suculentos.
