Declinan candidaturas
Ramón Zurita Sahagún miércoles 30, Jun 2010De frente y de perfil
Ramón Zurita Sahagún
Inmersos en el seguimiento que se da al crimen del candidato priísta al gobierno de Tamaulipas, Rodolfo Torre Cantú, pasan inadvertidas las declinaciones de candidatos a gobernadores, los que respaldan a un candidato más fuerte.
Lo hacen a la espera de que sus votos contribuyan a la victoria de candidatos opositores que se encuentran lejanos de la posibilidad de triunfo y para que a la postre ese esfuerzo les sea recompensado.
Son varios los personajes, hombres y mujeres, que decidieron ir a la segura y ante el poco apoyo recibido por parte de los electores desisten de sus aspiraciones y entran a la negociación política.
Esta situación vendrá a complicar las cosas para un PRI ensoberbecido y seguro de ganar los 12 procesos electorales del 4 de julio en los que se elegirán gobernadores.
Lo asfaltado del camino que recorrían los candidatos del PRI se les complicó dos semanas antes de la realización de los procesos electorales y amenaza ahora con tornarse en una gran tragedia.
Y es que no solamente se quedaron sin uno de sus candidatos más sólidos y con mayor margen de ventaja sobre sus opositores, sino que además corren un alto riesgo de que las adhesiones de última hora y las renuncias de candidatos en respaldo de otros de sus opositores les provoquen una derrota en entidades que consideran enclaves suyos.
Es cierto que la tragedia de Tamaulipas les refrenda el respaldo que ya de por sí traía el candidato Rodolfo Torre Cantú y que en esa entidad, solamente podría producirse una baja participación ciudadana, lo que afectaría en nada sus expectativas de voto.
Pero en otras entidades del país, las declinaciones de candidatos podrían alterar la correlación de fuerzas, especialmente en aquellas que se ubican dentro de un empate técnico.
Oaxaca, Durango, Tlaxcala -se espera que en Zacatecas también ocurra-, son algunas de las entidades en las que los candidatos situados en tercer lugar y sin posibilidades de ganar recurrieron al fortalecimiento del segundo lugar en una intentona desesperada por darle los votos necesarios para derrotar a los candidatos del PRI.
Irma Piñeyro, candidata de Nueva Alianza, decidió de última hora sumar los pocos votos que alcanzaría el próximo 4 de julio al candidato de la gran alianza opositora Gabino Cué Monteagudo, posicionado muy cercano del candidato priísta Eviel Pérez Magaña.
Sin embargo, los votos de Piñeyro -ni de ningún candidato declinante- no podrán ser cuantificados a favor de otro candidato, ya que serán sumados dentro de su partido, con todo y que se hayan retirado de la candidatura.
De esta forma, los seguidores del candidato renunciante podrán votar por el candidato al que se respalde, aunque no todos los que pensaban sufragar por esa o esos candidatos declinantes habrán de optar por cumplir con este mandato.
En Tlaxcala, Minerva Hernández Ramos, senadora con licencia, comprendió de última hora que sus esfuerzos no serán compensados en las urnas, por lo que decidió retirarse de la contienda en que competía como candidata del PRD. Lo curioso de esto es que Minerva se empecinó en ser candidata, rompiendo con ello las posibilidades de establecer una gran alianza entre PAN y PRD en esa entidad.
Ahora, Minerva sale con que siempre sí une esfuerzos con la abanderada de Acción Nacional, Adriana Fernández, la que va además en coalición con Nueva Alianza y con los votos que pueda sumar de perredistas, convergentes y petistas que apoyaban a Minerva.
La intención de la perredista es la de frenar el súbito crecimiento registrado entre los votantes por Mariano González Zarur en las semanas recientes. Como en los demás casos, los tlaxcaltecas deberán votar directamente por Adriana para que funcione el “sacrificio” de Minerva, ya que en caso contrario, los que opten por el PRD, Convergencia o PT le darán los sufragios a la que fue su candidata y quiso dejar de serlo.
Durango fue la primera entidad en que uno de los candidatos a gobernador decidió ya no participar como tal. Gabino Martínez decidió ya no seguir participando como candidato del Partido del Trabajo y decidió sumarse a las huestes del ex priísta José Rosas Aispuro quien es avalado por Acción Nacional, Convergencia y el Partido de la Revolución Democrática, a cuya alianza no quisieron integrarse los petistas, que ahora lo hacen de facto.
En Durango, el favorito es el priísta Jorge Herrera Caldera, apoyado también por los partidos Nueva Alianza y Verde y se duda que el esfuerzo del petista se traduzca en los votos que se requieren para desplazar al partido tricolor del gobierno estatal.
Zacatecas enfrenta la resistencia de dos candidatos que han sido tentados para retirarse de la contienda y apoyar al candidato de otro partido, se trata de Cuauhtémoc Calderón, abanderado del PAN y David Monreal del PT.
*El gobernador de Tamaulipas, Eugenio Hernández Flores, encabezó el homenaje póstumo rendido a Rodolfo Torre Cantú y las otras personas asesinadas en el atentado ocurrido el pasado lunes y al que asistieron 15 gobernadores de extracción priísta, además de los dirigentes nacionales de los partidos que lo respaldaban en la búsqueda del gobierno estatal, Panal, Verde y PRI.
Hernández Flores destacó que la política de juego limpio siempre fue privilegiada por Torre Cantú y manifestó su indignación por el atentado en que perdieron la vida varios colaboradores del diputado federal con licencia.
Hernández Flores remarcó que la afrenta de la violencia irracional no debe quedar impune.
*El cese de Miguel Gómez Mont Urueta como director de Fonatur fue fulminante, luego del lamentable espectáculo ofrecido en una de las sedes del futbol, donde intercambió insultos y agresión con los familiares de los futbolistas mexicanos que participaron en el mundial.