¿Será?
Ramón Zurita Sahagún jueves 10, Jul 2014De frente y de perfil
Ramón Zurita Sahagún
¿Por fin se decidirá Andrés Manuel López Obrador a participar como candidato al Congreso de la Unión?
Esa es una pregunta que se hacen muchos que quieren ver al tabasqueño debatiendo en la Cámara de Diputados.
La oportunidad se presenta en los comicios del próximo año, cuando su partido (Morena) ingrese formalmente a las boletas electorales.
No es la primera ocasión en que los seguidores de AMLO le piden que se postule para el Congreso, para dar la batalla desde ese escenario.
Hace cuatro años se planteó la posibilidad de que López Obrador compitiera por un escaño en el Senado de la República, dejando la vía libre para que Marcelo Ebrard Casaubond contendiera por la Presidencia de la República.
Eran los momentos estelares de Marcelo, cuando registraba altos índices de popularidad y algunos lo veían como un oponente difícil para el priísta Enrique Peña Nieto, quien adelantaba a los demás aspirantes del PRI.
Lo demás ya es historia, Andrés Manuel superó en las encuestas que realizó la izquierda a Marcelo y se convirtió nuevamente en candidato presidencial, un aspirante que cerró ciclónicamente, luego que se le concedían pocas posibilidades de triunfo.
Se trepó al segundo lugar, echando por la borda todas las encuestas que lo ubicaban demasiado lejano del triunfador.
Después de eso, AMLO decidió renunciar al PRD y formar su propio partido político, sobre las bases de su ya existente Movimiento de Regeneración Nacional. El apoderamiento del control del partido por parte del grupo de “Los Chuchos” aceleró el proceso de salida.
La verdadera disputa dentro de la izquierda es entre AMLO y el grupo de “Los Chuchos” que comandan Jesús Zambrano Grijalva, Jesús Ortega Martínez y Graco Ramírez Garrido y que ahora apuntala a Carlos Navarrete Ruiz hacia la presidencia del partido.
Por eso, que inoportuno resulta para el PRD el registro de Morena como partido político y con derecho a participar en los comicios de junio del próximo año.
El registro para Morena llega en momentos en que el partido del sol azteca se sumerge en la oscuridad por la serie de asuntos que viven sus dirigentes, sus militantes y sus aliados.
No son los mejores tiempos para un perredismo que vive bajo el yugo de un grupo que lo mantiene atado a sus intereses y nebuloso su futuro ante una competencia cada vez más cerrada.
Es cierto que existen algunas encuestas que anticipan que el PRD no sufrirá demasiadas pérdidas de militantes, ni de votos en los comicios del año próximo, pero esas mismas encuestas han mostrado en ocasiones pasadas que no son tan precisas.
Y es que el acercamiento del PRD con el gobierno federal dejó insatisfecha a la izquierda tradicional, mientras que las reformas aprobadas en el Congreso de la Unión generaron dudas en otros más y la línea dictada desde el alto mando del partido a sus representantes populares causó mayor zozobra.
Los mandos perredistas saben que les espera una fuerte disputa por los votos con el partido que fundó Andrés Manuel López Obrador y que preside Martí Batres Guadarrama.
Se encuentran conscientes de que no podrán establecer alianza ni coaliciones con ese organismo político, aunque les queda el recursos de hacerlo de facto, situación complicada, aunque factible en algunas entidades del país.
Son varias las entidades en la lucha por el voto de la izquierda generará batallas épicas, aunque habrá otras en las que podrían darse los entendimientos.
Sin embargo, se ve difícil que la dirigencia nacional consienta ese tipo de alianzas de facto.
Es cierto que para entonces Jesús Zambrano Grijalva ya no será más el presidente del Comité Ejecutivo Nacional del Partido de la Revolución Democrática y que una nueva dirigencia estará a cargo de ello.
La mala noticia para muchos es que el partido seguirá dominado por el mismo grupo de “Los Chuchos”, en razón de que quien asuma la presidencia del organismo político será Carlos Navarrete, otro miembro de ese selecto grupo dominante.
Navarrete como varios de ellos (Jesús Ortega y Graco Ramírez, entre otros) procede del Partido Socialista de los Trabajadores que fundara el mítico Rafael Aguilar Talamantes y se rige bajo los principios abrevados al lado de RAT.
El ex coordinador de la fracción senatorial del PRD en el sexenio pasado continúa su periplo por todo el país en la búsqueda del voto de la militancia que lo lleve a la presidencia del partido, aunque no haya necesidad de ello.
Navarrete transita solo en esa búsqueda, ya que de su adversario Carlos Sotelo hace tiempo que no se sabe ya de su interés por competir y los demás no dan señales de vida.
Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano sigue pensando que de última hora se le unirán todos, le pedirán que asuma la presidencia del partido y Carlos Navarrete renunciará a participar en la contienda interna.
Marcelo Ebrard se encuentra más ocupado y preocupado en torno a lo que suceda con las investigaciones que se realizan sobre la Línea 12 del Metro y las posibles que implicaciones que le podrían traer, por lo que sus sueños de presidir al Partido de la Revolución Democrática quedaron en el pasado.
TRABAJAN
Diputados y senadores muestran que con todo y que se acerca el final del mundial de futbol, ellos se encuentran enfrascados en sus debates para la aprobación de los temas pendientes.Son períodos extraordinarios, pero los legisladores cumplen con su tarea y acuden a las sesiones muchas de las, curiosamente, celebradas a la misa hora de la transmisión de los partidos.