Una vez más, ¿qué sucede con el Instituto Nacional de Migración?
¬ José Antonio López Sosa jueves 24, Jun 2010Detrás del Poder
José Antonio López Sosa
Mientras en los Estados Unidos de América discuten cómo proteger su frontera de la intensa ola criminal que nos aqueja, en México el Instituto Nacional de Migración sigue inerte sin proporcionar garantía alguna de seguridad en materia migratoria para los mexicanos.
Para muestra basta otro botón más:
Salió nuestra productora radiofónica con destino a la ciudad de San Diego en los Estados Unidos, para ello abordó un vuelo de la Ciudad de México a Tijuana y ello significó pasar por varios filtros migratorios en el trayecto, en primer lugar antes de abordar el vuelo en México, los pasajeros fueron cuestionados y revisados por agentes del INM para verificar nacionalidad y documentos de todos quienes se dirigían a Tijuana, al aterrizar en el aeropuerto Abelardo Rodríguez de aquella ciudad, otro agente del INM revisó de nueva cuenta a los pasajeros para garantizar que fuesen mexicanos o extranjeros con legal estancia en el país.
Antes de salir del aeropuerto nuevamente hubo otra revisión por parte de la Policía Federal Preventiva, que actúan en conjunto con agentes del INM, finalmente antes de cruzar la frontera y llegar a San Ysidro, California, una nueva inspección mixta donde se encontraban tanto policías como agentes del INM.
Cuatro revisiones para checar la documentación de quienes viajan de la Ciudad de México a Tijuana.
De regreso viajamos el equipo de trabajo en conjunto a la Ciudad de México, ¿cuál fue la diferencia?, simplemente que no hubo revisión alguna ni en la frontera ni en el aeropuerto de Tijuana por parte de algún agente del INM. En síntesis una vez más comprobamos que Migración está para proteger las fronteras de los Estados Unidos pero a nuestro territorio de allá hacia acá puede entrar cualquier persona sin problema alguno. Me parece deleznable que esto suceda especialmente cuando vivimos una situación de inseguridad extrema en las ciudades fronterizas y en buena parte del territorio nacional.
Si en INM tuviera un verdadero control de la gente que ingresa a México por la frontera norte, se agilizarían las investigaciones en materia de tráfico de armas y de personas, ¿por qué empeñarse en revisar nada más de aquí para allá y no a la inversa?
¿Qué sucede con el INM?, ¿a quién procura y a quién defiende?, el eterno pretexto del libre paso para fortalecer el turismo en la franja fronteriza es un cuento del pasado, hoy día la inseguridad provoca que cada vez menos personas de bien que viven en el lado estadounidense busquen un día de turismo o diversión del lado mexicano.
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