El feudo panista en Benito Juárez
¬ José Antonio López Sosa lunes 26, May 2014Detrás del Poder
José Antonio López Sosa
Una vez más se comprueba que el gobierno delegacional en Benito Juárez actúa como un ente feudal, donde cambia de nombre el delegado, pero las principales posiciones están en manos de los mismos desde hace lustros.
Con el caso del Polyforum, donde se pretendía construir una torre de más de 40 niveles, haciendo a un lado la obra de David Alfaro Siqueiros, quedó al descubierto cómo se oculta información en la delegación y como se esconde el delegado cuando surgen problemas de esta naturaleza.
Los vecinos, a través de Transparencia, obtuvieron la información que el propio delegado negó constantemente, algo que evidentemente tenía que ver con los mismos funcionarios que hoy día están, pero que en su momento tuvieron que ver con la administración anterior.
El panismo en la capital del país tiene un solo bastión de poder y es Benito Juárez, ahí se puede sintetizar el modus operandi del PAN en esta ciudad, cómo operan y cómo representan los peores intereses, por lo menos los funcionarios de Benito Juárez, delegado incluido.
Desde el área de comunicación social liderada desde hace años por Rubén López Córdoba, se ha tenido la política de encerrar al delegado y exponerlo lo menos posible ante las cámaras y micrófonos, desde Germán de la Garza, pasando por Mario Palacios, así opera la oficina de comunicación por instrucciones de López Córdoba, quien de pronto pareciera tener más poder que el propio delegado.
Recuerdo que cuando Jorge Romero ganó la elección, le envié un tuit preguntándole si ratificaría a Rubén López Córdoba, su respuesta fue que aún no lo sabía, de ahí no volvió a contestar hasta que todos supimos de la ratificación, lo mismo con decenas de funcionarios que aquilatan el gran feudo panista.
La duda es, ¿los vecinos querrán tres años más de feudo en las elecciones de 2015?
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