Si no es el gobierno, ¿entonces quién?
Roberto Vizcaíno miércoles 23, Jun 2010Tras la puerta del poder
Roberto Vizcaíno
Evidentemente, Madero no habló del origen de las grabaciones y mucho menos de la intención de darlas a conocer, precisamente en este momento, que es lo que reclama el gobernador mexiquense
La aparición de intercepciones telefónicas ilegales es un asunto recurrente en México. Y cada que eso ocurre el dedo de los “enterados” apunta hacia el gobierno.
No es una afirmación gratuita. La historia revela una y otra vez que son los equipos del Estado los que prácticamente tienen la capacidad para intervenir teléfonos. Hacerlo no es cosa fácil. No sólo se requieren equipos electrónicos muy modernos, sino humanos altamente capacitados y que trabajan permanentemente en eso. Evidentemente que quienes lo hacen no cobran barato.
Y eso ocurre en México, como en otras muchas naciones del mundo. En Estados Unidos la CIA, el FBI o la DEA mantienen bajo el alambre a quizá millones de ciudadanos, no sólo de su país, sino en el mundo entero.
En Alemania Oriental la Stasi fue una agencia brutal que obligaba a la mitad de la población a vigilar a la otra parte, independientemente de parentesco o situación profesional o social. La magnífica película “Los otros”, explica cómo y hasta dónde el espionaje era parte vertebral de la vida en ese país.
En fin, no le demos más vueltas al asunto mexicano.
En los días recientes los medios informativos han reproducido varias de estas intercepciones telefónicas que involucran otra vez a los gobernadores de Veracruz, Puebla y Oaxaca.
Algunas de estas las presentó directamente el presidente del PAN, César Nava.
Evidentemente, no explicó dónde las obtuvo. La revista “Proceso”, sin embargo, asegura que una de las fuentes de estas intercepciones se localiza en las instalaciones y equipos de la Policía Federal, al mando de Genaro García Luna.
De ahí que el gobernador del Estado de México, Enrique Peña Nieto, haya pedido hace días una explicación lógica: que el PAN diga de dónde obtuvo esas grabaciones.
Y ubicó el asunto en el contexto electoral actual. Indicó: “Muy lamentable… yo creo que es parte de este golpeteo electoral, y no sería deseable que en el futuro, aunque no será evitable, sigamos viendo ese tipo de actividades que llaman la atención (y que se valen) de la ilegalidad para pretender ganar una elección”.
Le insistió a César Nava y al propio gobierno de Felipe Calderón, que expliquen de dónde obtuvieron esas grabaciones…
Indicó que todo advierte que no son tan ilógicas las sospechas respecto del uso de las instituciones de inteligencia nacional por parte del gobierno federal y su partido para el golpear a sus contendientes.
“El partido en el poder no debe usarlas para hacer política electoral ni para interferir en la vida privada de los individuos… no es la primera vez que algún personaje público es víctima de este tipo de exposiciones, ante lo cual el gobierno federal no se ha manifestado para garantizar la confidencialidad de las conversaciones.
“Habrá que preguntarle al partido (que ha venido) exhibiendo estas llamadas como gran logro y que están en la ilegalidad, de dónde las obtuvieron; no nos hagan pensar o suponer que las instituciones dedicadas al trabajo de inteligencia, ahora las utiliza el gobierno y el partido en el gobierno para fines electorales.
“Espero que haya explicaciones suficientes, amplias, de investigación que determinen quién estuvo grabando.
“Los partidos deben madurar lo suficiente como para privilegiar el clima de civilidad y armonía, constructivo, no denostativo, no descalificativo… estos hechos desgastan a las organizaciones políticas y generan falta de credibilidad entre la sociedad”, precisó Peña Nieto.
Claro que hubo otros reclamos. Pero resulta que Peña Nieto es el puntero en la carrera presidencial del 2012 con casi un 65 por ciento de preferencias electorales y su voz tiene un peso especificó para el gobierno.
Fue por eso que apenas unas horas después salió a dar una explicación el secretario de Gobernación, Fernando Gómez Mont, quien aseguró que la administración de Felipe Calderón no espía.
Y señaló que las sospechas de Peña Nieto no tienen fundamento. Pero en su aclaración dejó correr el veneno de la sospecha. Dijo: “… no en lo que toca a las áreas de inteligencia con las que la Secretaría de Gobernación trabaja”.
Interrogado respecto a las grabaciones difundidas por el dirigente del PAN, Gómez Mont las consideró lamentables.
Pero no comprometió al gobierno a indagar de dónde salieron y mucho menos a castigar a los que las hicieron.
Dijo que “no es la primera vez que suceden estas cosas en Veracruz; parece que está en la lógica de las campañas políticas de Veracruz este tipo de revelaciones y filtraciones, y habrá que atenderlo también en su contexto”.
Consideró luego que este tipo de revelaciones no alterarán el clima electoral y afirmó que su dependencia trabaja con los 14 gobiernos estatales donde hay procesos electorales.
“Les puedo decir: hay condiciones para que los mexicanos y las mexicanas salgan a cumplir con sus deberes políticos y electorales el próximo 4 de julio.
“Trabajaremos para que existan mecanismos operativos de seguridad de los dos niveles (federal y estatal) que garanticen que nadie sea molestado en su legítimo derecho a sufragar y que se garanticen las condiciones de paz”, señaló.
Era obvio que la respuesta de Gómez Mont se hizo por indicaciones superiores. Es sabido que este tipo de comentarios, como el de Peña Nieto, producen irritación en Calderón.
Por ello, no fue extraño que como en otros casos similares, otro panista se haya subido al foro para lanzarse contra quien hizo las afirmaciones que irritaron a Calderón.
En esta ocasión le correspondió al líder de la fracción blanquiazul en el Senado ponerse los guantes para golpear al gobernador mexiquense.
Sin que al parecer nadie lo haya llamado a subirse al ring, Gustavo Madero dijo: “hemos advertido de manera consistente un patrón que tiene el PRI, que siempre es dime de qué criticas y te diré precisamente lo que tú tienes, lo que tú haces”, indicó.
Dijo que las actuaciones de Fidel Herrera, en Veracruz, y de Mario Marín, en Puebla, son preocupantes y graves y tienen que generar necesariamente una reacción en la población.
Pero todo eso fue evidentemente un pretexto para írsele al cuello a quien forma la principal preocupación de los panistas: Enrique Peña Nieto.
“Creo que esta declaración del gobernador Peña Nieto, no sé si lo que esté haciendo es curarse en salud, la verdad es que hemos de manera consistente advertido un patrón que tiene el PRI, que siempre es dime de qué criticas y te diré precisamente lo que tú tienes, lo que tú haces.
“Con mucha frecuencia, critican el uso de programas sociales en beneficio electoral y acusan a los gobiernos del PAN, cuando todos sabemos, es historia conocida, vox populi, que ésta es una práctica que inventó, patentó, precisamente durante muchos años en el gobierno el PRI y que lo continúa haciendo, desgraciadamente.
“El tema del espionaje es una declaración que, insisto, no sé si es para curarse en salud o para tratar precisamente de quitarle el peso de la gravedad del asunto, de lo que está detrás, de actuaciones como la de Fidel Herrera (en Veracruz), la de Mario Marín, en Puebla.
“Son actuaciones preocupantes, muy graves, que tienen que generar en la población una conciencia precisamente de los gobernantes, de su actuación, de su calidad moral, de su responsabilidad como servidores públicos o su irresponsabilidad como servidores públicos en esos casos”, consideró.
Evidentemente, Madero no habló del origen de las grabaciones y mucho menos de la intención de darlas a conocer precisamente en este momento, que es lo que reclama el gobernador mexiquense.