Un triste adiós
¬ Augusto Corro lunes 21, Abr 2014Punto por punto
Augusto Corro
Las letras universales se encuentran de luto por la muerte de Gabriel García Márquez “Gabo”, el gran escritor que mejor incursionó en el realismo mágico.
Las características del realismo mágico en la literatura son: presentación de elementos fantásticos y fabulosos, convivencia de lo real con lo fantástico. También los personajes conviven con elementos fantásticos, la narración no es lineal y los escenarios son exóticos. Como señaló un colega: el realismo mágico es la narrativa que altea la lógica de la realidad.
La genialidad del escritor colombiano se plasmó en su obra literaria encabezada por “Cien años de soledad”. Le siguieron otros libros: El amor en tiempos del cólera”, “El coronel no tiene quien le escriba”, “Crónica de una muerte anunciada”, “El otoño del patriarca”, etc.
El periodista y escritor murió el jueves pasado a los 87 años de edad, víctima de un cáncer que invadió órganos vitales.
PREMIO NOBEL DE LITERATURA
En 1982, “Gabo” recibió el Premio Nobel de Literatura a los 55 años, para convertirse en uno de los escritores más jóvenes en obtener ese galardón tan importante en el mundo de las letras.
Por cierto, el colombiano inició su trabajo literario como periodista en un diario de su natal Colombia. Además incursionó en el cine.
Sus obras fueron publicadas y traducidas en 36 idiomas y más de 40 millones de libros han sido leídos en todo el mundo. Los libros de “Gabo” son una herencia de valor incalculable para la literatura universal. En Latinoamérica, “Gabo” se integró al selecto grupo de novelistas y poetas de fama mundial: Pablo Neruda, Julio Cortázar, Octavio Paz, Mario Vargas Llosa y Jorge Luis Borges.
La obra del colombiano ha sido la más leída, en español, después del libro de Miguel de Cervantes Saavedra, joya de la literatura universal: “El ingenioso hidalgo don Quijote de la Mancha”.
En el mundo literario, “Gabo” es comparado con Charles Dickens, Leon Tolstoi, Faulkner entre otros. Este último tuvo una influencia importante en la obra de García Márquez.
Por otra parte, García Márquez era un enamorado del periodismo. En una ocasión dijo: “Siempre me he considerado un periodista por encima de todo”.
EN MÉXICO
“Gabo” sentía un profundo amor por México, país al que llegó a instalarse en 1961. Su estancia desde entonces casi fue permanente.
Emigraba por temporadas para vivir en Europa. En el suelo azteca se sentía a sus anchas. Su presencia, en cualquier lugar del Distrito Federal (DF), siempre era motivo de interés por parte de los lectores que buscaban su autógrafo. En la capital convivió con el otro genio de las letras (para mí) su paisano Álvaro Mutis, quien escribió esas inolvidables novelas sobre “Maqroll el Gaviero”.
Mutis recibió el Premio Cervantes en 2001. El propio “Gabo” contaba la anécdota en la que Mutis le regaló el libro “Pedro Páramo”, de Juan Rulfo, para que aprendiera a escribir. En el 2013 murió Mutis a los 90 años de edad, tras sufrir un problema cardiorrespiratorio.
DE IZQUIERDA
De acuerdo a su forma de pensar, “Gabo” caía en la política de izquierda. Sin embargo, no desempeñó un papel protagónico.
Su inclinación por la izquierda se confirmó con la amistad estrecha que cultivo con Fidel Castro.
La imagen contraria del otro Premio Nobel de Literatura, Mario Vargas Llosa, quien participó como candidato presidencial en su país de origen: Perú. Perdió en la competencia. Fujimori se alzó con el triunfo. García Márquez no tuvo una participación importante en la política, aunque no dejaba de lado su interés por dialogar con los representantes del poder que lo buscaban.
ALGUNAS FRASES DE “GABO”
+ “La ingratitud humana no tiene límites”.
+ “La sabiduría nos llega cuando no nos sirve de nada”.
+ “El periodismo es el mejor oficio del mundo”.
+ “El deber revolucionario de un escritor es escribir bien”.