La misma vara
Ramón Zurita Sahagún martes 1, Abr 2014De frente y de perfil
Ramón Zurita Sahagún
Hace 16 años, el hoy mandatarior de Morelos, Graco Ramírez Garrido, se constituyó en una pieza fundamental de la política en esa entidad, al encabezar el rechazo al entonces gobernador Jorge Carrillo Olea.
Graco, nacido en Tabasco y avecinado en Cuernavaca no podía ser candidato al gobierno del estado, por impedimentos constitucionales y por no ser conocido en la entidad.
Las marchas contra la violencia y la ola delictiva que azotaba a esa entidad, fueron el trampolín que le permitió el afianzamiento y ocupar una curul y un escaño, representando a esa entidad en el Congreso de la Unión.
Graco fue considerado el adalid de la caída del general Carrillo Olea, lo que le permitió elaborar un discurso basado en la lucha contra el crimen y ofrecer solución al grave problema de la violencia que se mantiene estable en esa entidad desde el siglo pasado.
Militante de las juventudes de la izquierda, Ramírez Garrido pasó por los partidos Socialista de los Trabajadores, Frente Cardenista de Reconstrucción Nacional y de la Revolución Democrática.
De esa forma fue escalando posiciones, hasta que una reforma constitucional estatal le permitió contender por el gobierno estatal y ganar, con un discurso basado en el compromiso para erradicar la inseguridad y frenar la violencia.
El compromiso de Graco fue formal y lo asumió desde el primer momento, estableciendo 18 meses de gobierno, como fecha para ofrecer resultados reales.
La fecha llegó y en Morelos las cosas no mejoran, por el contrario se dispararon los niveles de secuestro, asesinatos y violencia en general.
Graco niega esas cifras y por el contrario asume que hay resultados. La seguridad en Morelos es mejor hoy que hace 18 meses, dice el gobernador de la entidad.
Cuando asumió la gubernatura, el 1 de octubre de 2012, Graco Ramírez dijo que necesitaba 18 meses “para encauzar, revisar, corregir y dar resultados en el tema de la inseguridad” en el estado.
“Claro que es mejor la seguridad hoy que hace 18 meses, claro que es mejor la seguridad hoy que hace dos años”, repite constantemente el mandatario morelense.
“Los resultados están llegando, afirma, tenemos al 85% de la población bajo el mando único de la policía estatal”. “Hemos pasado de mil policías que hemos capacitado estatalmente a hacernos cargo de cerca de 4 mil cuerpos de policía que vamos a empezar a capacitar”.
El Ejecutivo estatal destacó como ejemplo de los resultados de su gobierno en materia de seguridad la tendencia a la baja en los secuestros.
“Ahora te puedo decir que la cifra a partir de enero, febrero y marzo ha decrecido en secuestros. Estamos ya ahorita en una cifra histórica de ocho secuestros en el mes”, subrayó.
Sin embargo, sus argumentos no convencen a los pobladores de la entidad que han sentido en carne propia los efectos de la violencia y que se unen, para presentar un frente común, similar al que encabezó Graco hace 16 años y que le generó magníficos resultados políticos.
Graco será medido con la misma vara que midió a finales del pasado siglo y los resultados, se espera, provoquen un efecto igual de entonces.
Los manifestantes pedirán la renuncia de Graco -como él hizo hace 16 años- y marcharán desde las 16 horas de El calvario y la Glorieta del Niño Artillero, hasta converger en Plaza de Armas.
En ese sitio se guardará un minuto de silencio por las víctimas de la violencia y se procederá a la lectura de un discurso por parte de Gerardo Becerra Chávez, único orador, donde el eje del mismo será la ineficacia del gobierno de Graco Ramírez Garrido, para resolver el problema de la inseguridad y su fracaso en el compromiso asumido hace 18 meses.
Los manifestantes han fijado un plazo de 45 días para que presente su solicitud de licencia.
LOCUACIDAD
Si algo tiene Vicente Fox Quesada es que sigue siendo igual. Se mantiene con la misma verborrea y locuacidad que le hicieron ganar la Presidencia de la República el ya lejano dos de julio del 2000.
Desde antes de eso y hasta la fecha el primer opositor al PRI en obtener el Poder Ejecutivo federal sostiene la misma línea, provocando enojo, molestia entre algunos, pero diversión entre otros.
Para él no hay tema aborrecido y siempre manteniendo su figura como protagónica, abordando temas polémicos en donde no da soluciones y presentándose como el gozne que permite los avances a nivel gobierno federal.
Vicente Fox no deja pasar una, todas las atrapa en el aire y con su lenguaje coloquial, manifiesta su sentir o su conveniencia.
La reciente entrevista concedida a un diario es un referente del mismo Vicente Fox, quien antes ofrecía solucionar el conflicto de Chiapas en 15 minutos y ahora se presenta como el adalid de las reformas en materia fiscal, educativa y energética.
Esas tres, dice, fueron compromisos adquiridos durante la campaña electoral entre él y el hoy presidente Enrique Peña Nieto.
De ahí, asegura, provino su apoyo a la candidatura del priista, que no al partido tricolor.
Fox, como siempre, se siente el centro de los acontecimientos y se sitúa como el eje rector, aunque sus declaraciones dejaron de ser lo impactante que lo fueron todavía en el pasado reciente.
NABOR
La fracción cenecista del PRI que encabeza Gustavo Nabor Ojeda, apoyará a campesinos de escasos recursos en diez estados del país, proporcionando semilla de maíz criollo y fertilizantes orgánicos, que les ayuden a levantar una cosecha de un millón de toneladas.
De esa forma no se dependerá del maíz importado y se buscan los vínculos para comercializar el producto.