Reforma energética será transformadora: Peña
* Especiales, Nacional miércoles 19, Mar 2014- El Presidente encabezó en Cosoleacaque los festejos por el 76 aniversario de la Expropiación Petrolera
José Luis Montañez
Cosoleacaque, Veracruz.- Con la reforma energética, que abre nuevas oportunidades de crecimiento y mantiene a los hidrocarburos como propiedad de la nación, México tomó una determinación audaz y optó por el camino de la transformación, señaló ayer aquí el presidente Enrique Peña Nieto.
Al encabezar la ceremonia conmemorativa del 76 aniversario de la Expropiación Petrolera, donde felicitó a todos los trabajadores, que son el alma, el músculo y el corazón de Petróleos Mexicanos (Pemex), el mandatario agregó que la reforma energética abre nuevas oportunidades de crecimiento y al mismo tiempo, mantiene la propiedad de la nación sobre su riqueza.
Peña dejó en claro que con la reforma energética el Estado mexicano es y seguirá siendo el único dueño de las reservas petroleras.
De a los beneficios que México tendrá con estas modificaciones el mandatario expresó que se tendrá más gas, más petróleo y más electricidad y que además se reducirá el costo de producir energía.
En tanto las recientes modificaciones a la Constitución permitirán que México crezca más rápido, generando empleos para cientos de miles de mexicanos, dijo Peña Nieto.
Sostuvo que ahora existe la posibilidad de llevar a cabo una revolución energética que eleve de manera contundente el nivel de desarrollo nacional.
Acompañado por el secretario de Energía, Pedro Joaquín Coldwell, por el director de Petróleos Mexicanos, Emilio Lozoya, y por el líder del Sindicato Petrolero, Carlos Romero, afirmó que la reforma energética es el cambio más importante en el país en los últimos 50 años.
“Es una transformación de fondo para que el país cuente con más energía para crecer económicamente y generar cientos de miles de nuevas fuentes de empleo”, dijo.
Subrayó que al contar con más energía se reforzarán las ventajas del país –como su ubicación geográfica y el talento de su gente– para generar inversión productiva.
Sostuvo que hoy México está creando una combinación poderosa para atraer más inversiones nacionales y extranjeras y con ellas generar los trabajos que demandan los jóvenes del país.
“Esta es la oportunidad que nos abre la reforma energética y que vamos a aprovechar. Es tiempo de que los recursos energéticos del país nos permitan construir un nuevo México, un México más dinámico, más competitivo y más próspero.
“Hoy México tiene la oportunidad de llevar a cabo una revolución energética que eleve de manera contundente su nivel de desarrollo, es momento de aprovechar al máximo nuestros recursos, de concretar esta reforma para convertir a México en una potencia energética pero sobre todo es momento de utilizar toda nuestra energía para mover y transformar a México”.
Dijo que a los trabajadores de Pemex les toca encabezar esta transformación nacional.
Expuso que la reforma energética abre nuevas oportunidades de crecimiento y mantiene la propiedad de la nación sobre su riqueza.
Atajó: “que no haya duda, con la reforma energética el Estado mexicano es y seguirá siendo el único dueño de las reservas petroleras, de la renta petrolera y de Petróleos Mexicanos”.
Recordó que el año pasado, en esta fecha, señaló que el país debía enfrentar los desafíos energéticos del Siglo XXI con la misma determinación que el presidente Lázaro Cárdenas enfrentó los del siglo pasado.
“Hay que reconocerlo, frente a los cambios globales, lo que está ocurriendo en todo el mundo, en los últimos años nuestro sector energético había perdido dinamismo y competitividad”, señaló.
Dijo que no obstante las inversiones millonarias realizadas en Pemex cada año su producción ha seguido bajando. Advirtió: “el país iba directo a ser un importador neto de petróleo, de gas natural y de petrolíferos”.
Subrayó que ante esta situación había dos alternativas: seguir por el mismo camino o emprender una transformación de fondo.
Dijo que seguir por el mismo camino significaba producir cada vez menos petróleo, importar cada vez más gasolina, mayores tarifas de luz y pagar más por el gas que consumen las familias mexicana y poner en riesgo el empleo de miles de trabajadores por el desabasto de gas natural que obligaba a detener sus plantas y centros de trabajo.
“Y aún peor, mantenernos así, de esa forma, era poner en riesgo la seguridad energética del país y con ello nuestra soberanía nacional. Afortunadamente los mexicanos no elegimos el camino fácil de la inercia, por el contrario México tomó una determinación audaz y optó por el camino de la transformación”.
Dijo que así como ocurrió hace 76 años en el país se ha vuelto a tomar decisiones importantes en materia energética y que gracias al trabajo del Congreso de la Unión hoy existe un marco jurídico de avanzada que transformará al sector energético nacional.